84. Mini Shipp

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Stiles mira el reloj en su muñeca y al ver la hora que es le impacienta aún más. Él no es de esperar, odia tener que esperar.

Su impaciencia llegó a límite.

“I frutti proibiti sono i più dolci.” susurro entre dientes para luego irse, otra cita que lo deja plantado.

Tirando maldiciones en polaco y diciendo cosas dulces en italiano subió a su hermoso Jeep.

─ Él maldice más que un demonio.

─ Querrás decir una bruja. ─ se burló ella

¿Quiénes eran?

Quizás algunos fantasmas, quizás seres especiales que pueden mantenerse ocultó de lo sobrenatural y los humanos.

ʕ•っ..

Stiles llegó a su casa y subió a su cuarto, su enojo brotaba por sus bonitos ojos dorados. Jamás iba admitir que lo dejaron plantado.

Sentía vergüenza, no podía creer que otra vez le hicieran esto.

Camina hacia el espejo y mira su figura, hasta el aprecia tal belleza y no comprenden porque siempre lo dejan plantado.

─ Tengo raíces Italiana y también Polacas, soy el partido perfecto. ─siseó mirándose al espejo─, Habló cinco idiomas y aún así no soy suficiente para nadie. ─ gritó, seguido de eso su puño se estrelló en el espejo, los pedazos salieron volando.

Su enojo brotaba dejando a la vista su naturaleza.

Su celular sonó aumentando más su enfado.

─ Hola, te gustaría ir al cinema esta noche.

Leé repetidamente el mensaje, ¿Era una broma?

De cuando acá Brett Talbot lo invita al cinema, más bene de cuando acá él le escribe.

─ Está vez no quedaré expuesto. ─ dijo para luego contestar el mensaje

─ Hi Liam, ¿Me leíste la mente? Estoy por salir de la casa, te veo allá. Deberías pasar por unos chocolates para tu novia.

Mando el mensaje y con una sonrisa de superioridad pudo respirar tranquilo.

─ Mejor que piense que lo confundí, no quiero ser más la burla de nadie. Ahora que lo pienso, ¿Cómo llegó su número a mi celular? No recuerdo haberlo guardado jamás, menos pedirle el número.

Su mente empezó a trabajar sacando conclusiones, él no presto su celular así que era imposible que su contacto quedará registrado, segundo; ¿Cómo consiguió su contacto el beta de Satomi Ito?

─ Bueno, averigüemoslo. ─  tomo su billetera y las llaves de su Jeep para salir, con un movimiento de mano el espejo volvió a la normalidad tal y como estaba antes.

No quería asustar a su padre y piense que lo han secuestrado o mejor aún, que ellos se lo llevaron para hacerle pagar su traición.

Al llegar al cinema se estaciona y se encuentra con Brett esperando en la entrada, Stiles se hizo el desentendido y camino como si nada. La cara de Brett paso a una de amargura, Stiles se pregunta porque él actúa así.

─ Hola Stiles.

Stiles detuvo sus pasos y dijo:

─ Se te ofrece algo?

Brett lo mira sorprendido

─ ¿Qué? ─ fue lo único que logró pronunciar

─ No somos amigos, quizás conocidos pero nunca hemos tenido una conversación. ─lo mira de arriba abajo─ Me dirás qué se te ofrece, Talbot. ─la mirada de Stiles eran como dos dagas filosas; el lobo no salía de su shock.─ ¿Necesitas a Scott? Puedo darte su número si no lo tienes.

Stiles arto de su silencio cortó la distancia, su acción no era romántica; más bien parecía que en cualquier momento iba atacar al lobo.

“Que sexy se ve.” pensó el beta

─ No necesito a Scott, solo quería saludarte.

Stiles corto la distancia y con una pose amenazadora preguntó:

─ ¿Por qué? ─ su voz salio demandante, eso causó una erección el beta.

Brett recuperó su postura y corto la distancia tomando desprevenido al "humano", cuanto Stiles reaccionó ya era tarde; tenía al beta devorando su boca con mucha pasión.

Se quedó de piedra, ni en sus peores fantasías se imaginó a él y Brett en esta posición.

Stiles se dejó llevar por ese beso tan apasionado que ese lobo le está dando sin importarles que están a plena vista continuaron en su burbuja.

Cortaron el beso más no la distancia y se miraron a los ojos.

─ ¿Por que fue eso? ─ preguntó Stiles

─ Por que te amo, me gustas mucho y lo único que quiero es tenerte conmigo para siempre. ─ está vez no lo besa, él lo abraza como si temiera perderlo

Stiles está sorprendido, él no se opone a las caricias en su espalda o el hecho de que él esté besando su cuello.

─ Tenemos mucho de que hablar. ─ fue todo lo que él dijo para luego tomar la mano del beta y llevarlo a su Jeep

Brett lo seguía con una sonrisa de bobo, al fin pudo cumplir su único deseo; estar con Stiles.

Se preguntan quién era el responsable y causante de que las citas de Stiles nunca llegarán, ahí tienen la respuesta.

Será mejor que Stiles nunca se enteré, oh pobre de Talbot.

𝐒𝐮𝐫𝐫𝐞𝐧𝐝𝐞𝐫. ᵒⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora