Capítulo 9

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- Quería devorarte... - hizo una pausa y quedó a la altura de su oído. – Y tú a mí, también.

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- Sage... ¡Sage! – giró bruscamente encontrándose con la mirada de Sova. – Estás muy distraída esta noche, ¿estás bien?

- S-sí. Estoy bien. – carraspeó, tomando de su bebida. – Ugh, ¿qué se supone que es esto? – torció su boca con desagrado.

- Perdona. – dijo despacio. – Esto es el mejor alcohol de Rusia. Deja de poner esa cara. – sonrió con malicia. – Ambos sabemos que tienes más resistencia alcohol de la que finges tener. ¿O te recuerdo quién pudo sacar aquella información a base de retar a chupitos al dueño del bar? – Sage rodó los ojos.

- Y te recuerdo que estuve vomitando durante dos días. -Sova rio con ganas.

- Ay, Sage. – pasó una mano por sus hombros. – Tenemos que volver a hacer ese tipo misiones juntos.

- Lamentablemente... parece que la realidad nos lo impide. – suspiró despacio. – Por lo menos, podemos tener este tipo de momentos. – Phoenix, Killjoy, Jett y Raze competían para ver quién aguantaba más bebiendo un alcohol de color verde que no tenía muy buena pinta. Yoru y Skye charlaban animadamente mientras tomaban unas cervezas y Viper bebía de su copa de vino tinto, junto a Reyna. La miró disimuladamente, pero Reyna ya la estaba mirando.

- ¡Sage! – desvió rápidamente su vista y miró a Jett, que la hablaba animadamente. - ¡Ven a beber con nosotros! ¡Sova te lleva ventaja! – observó efectivamente que Sova ya había bebido dos vasos del tirón. Cuánto tiempo había pasado mirando a su alrededor que ni cuenta se había dado de que Sova se había movido de su lado.

- Vaya, vaya, vaya... - Sova sonrió, pasándole el vaso lleno a Sage. – Esto me recuerda a... Berlín. – el ruso guiñó su ojo, haciendo a Sage recordar. - ¿Te acuerdas de...?

- Sova. Bebe y calla. – acercó el vaso a sus labios, obligándole a beber.

- Mmshpfff!!!!! – intentó hablar, pero no pudo debido a la presión de Sage sobre él.

- Eh, eh, ¿Qué es lo que pasó? ¡Yo quiero saber! – se interesó Killjoy.

- Digamos que... pudimos completar la misión gracias a los encantos de Sage. – batió sus cejas de forma insinuante, captando la atención de todos.

- ¿Saaaaaaaage? – Jett giró el rostro hasta encararla. - ¿Algo que decir? – sonrió mostrando todos los dientes, muy divertida por la situación.

- Ay dios. – se llevó las manos a la cabeza, asesinando a Sova con la mirada. – No hay nada que decir. Simplemente... conseguí la información que necesitaba.

- Oh, sí. – sonrió. – Y esa información acaso no estaba en... ¿La habitación 303? – Sage golpeó el brazo de Sova con fuerza.

- ¡Has bebido mucho! ¡Vamos, te acompañaré a tu habitación! – tiró de él hacia la salida, dirigiéndose hacia ningún lugar en concreto. - ¡Me prometiste que no dirías nada de aquella noche!

- Peeeerdón. – canturreó. – Tranquila, - colocó una mano sobre su hombro. – Nadie te va a juzgar. – rodó los ojos, nerviosa. – Oh vamos, Sage. ¡No pasa nada! – la animó. – Sage... eres una mujer muy atractiva. Encantadora. – sonrió. – A nadie le va a pillar de sorpresa que alguien se interese por ti. – Sage suspiró despacio, cruzándose de brazos.

Tú das vida, yo la quitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora