La puerta de su habitación se abrió con brusquedad.
— ¡AH! ¡ME ASUSTASTE! — Gritó Becky, aprovechando el ruido para arrancar la hoja de papel en donde había escrito todo su plan. La arrugó con su mano en una perfecta bola y la ocultó en su palma.
Freen tan solo dió unos pocos pasos dentro de la habitación.
— ¡Oye! ¡¿No puedes tocar antes de entrar?! ¡¿Estás loca?!
Freen cerró la puerta, soltando un bufido.
— Nunca lo hago. ¿De qué estás hablando? — Dijo comenzando a caminar hacia la silla giratoria donde se encontraba la castaña.
Becky al mirarla comenzó a meter la hoja arrugada que se encontraba en su mano dentro del bolsillo de su jean.
— ¿Qué estás haciendo? — Cuestionó su amiga alargando el cuello para ver el cuadernillo sobre el escritorio.
— ¡No toques!
— ¿Qué es eso? — Preguntó de nuevo, notando que su amiga escondía algo.
— ¡¿Por qué?! ¡¿Qué estás haciendo aquí?!
Becky levantó la voz, estaba nerviosa. Demasiado. Y no quería que Freen la interrogara más.
La pelinegra río con falsa burla y comentó con una mirada de enojo; — Mi mamá está aquí.
Becky la miró de arriba a abajo. Freen relajo sus expresiones y le dió una tierna sonrisa.
— Oye~ ¿Puedes cocinar esto por mi?
Becky gimoteó cuando Freen sacó un bote de fideos instantáneos. La pelinegra los acercó a su pecho, dándole una tierna mirada de niña inocente.
Becky los tomó resignada. Ni siquiera pudo negarse ante ella. Freen agitó el cabello de su amiga en forma de gratitud.
— ¿De qué le sirve a tu mamá prohibir los fideos instantáneos en casa? Si de todas formas vienes a comerlos aquí.
Becky se levantó de su asiento. Freen ignoró sus palabras y deambuló por la habitación en busca de qué hacer.
— Oye. ¿Ella no fue al estudio hoy?
Becky recordó que la madre de Freen imparte cursos de diferentes tipos de instrumentos musicales a niños y adolescentes que estaban interesados en la música, todo es llevado a cabo en un estudio cerca de casa, donde hay aproximadamente 6 profesores.
— Una nueva profesora entró hace un mes. Ella es linda, es tan buena tocando el piano. A los niños parece gustarle más que a mi madre.
Becky esperó a que su amiga terminara de explicar y, al terminar, se giró para marcharse e ir a preparar la comida instantánea.
— Señorita chef. — Freen le detuvo, llamándole en un tono elegante y exagerado, sintiéndose como en un lujoso restaurante.
Becky volvió a girar para mirarla.
ESTÁS LEYENDO
If We Were A Season (FreenBecky)
FanfictionRebecca Armstrong se da cuenta que está enamorada de su mejor amiga de la infancia; Freen Sarocha, gracias a la llegada de un apuesto chico que se entromete en sus planes. ___________________________________________________ • Historia corta • • Mayb...