Capítulo 16

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– Lo siento, pero ya tengo agenda llena hasta marzo del próximo año –dijo con una de sus usuales deslumbrantes sonrisas mientras seguía ordenando su atelier.

– Pero no hay posibilidad de hacerlo, pagaremos el extra por los acotados tiempos –dijo Yumiko rogándole de rodillas, la ilusión que le hacía pensar en tener un vestido de su diseñadora favorita competía contra cualquier cosa en su mundo.

Por otra parte, a espaldas de la chica estaban Shinichiro y Taiki negaban con la cabeza, el último más enérgico y haciendo cruces con sus manos, si ya conocía el costo de un vestido promedio japones, tenía miedo a de los pomposos vestidos occidentales. La chica tomó la calculadora y tecleó una cifra de 5 dígitos y se lo extendió a la muchacha.

– Son los costos base del vestido, se abona completo y al momento de elegirlo, no hay negociación sobre el mismo y eso que les estoy haciendo un descuento por ser amigos de los chicos.

El novio se asomó sobre el hombro de su novia y vio el precio, por un momento exhaló al pensar que no era tan caro.

– Podremos pagarlo sin problema, pensé que sería más elevado –empezó a sacar los yenes de su cartera y al momento de extendérselos a la chica está los rechazó.

– El valor es en dólares y el costo del traje no está contemplado, pero es menor.

La sangre se les congeló a ambos, con las lágrimas surgiendo de sus ojos, al ver esto el corazón de la chica se enterneció, conocía el esfuerzo que podía hacer algunos novios por conseguir la boda de sus sueños, pero también debían ser realistas con la planificación y los tiempos que llevaban cada preparativo de la misma. Extendió la mano para recibir la maquina y borró la cifra para teclear 10.000 y volver a extendérsela, quienes la miraron asombrados.

– Si aún no tienen reservado el lugar y el catering puedo ofrecerles esta suma base tanto por el vestido como el traje, pero para mediados de abril, de lo contrario, lamento decirlo, pero no podré hacer los trajes. También puede señarlo con al menos el 25% de la suma total y terminando de abonarlo para la entrega de los mismos.

La chica empezó a llorar y la abrazó con mucha fuerza.

– Gracias, muchas gracias.

El novio suspiro aliviado por el gran favor que les estaba haciendo la chica, a su vez de convencer a su chica de evitar tal fecha donde los precios de alquiler de espacios y catering eran tan elevados por la fecha.

La sonrisa de Shinichiro se ensanchó, el ser una gran diseñadora no le había quitado su humildad y ganas de ayudar a quien lo necesitara sin dejarse de lado a ella misma. Por un momento sus pensamientos fueron a los sucesos de la semana pasada, llegada la noche, los hermanos de la mujer se presentaron en la casa de la chica preocupados ante la falta de respuesta del pelinegro para encontrarse con la escena de todos esos hombres durmiendo en el sillón junto a su pequeña hermanita; sin embargo, había subestimado con quien estaban tratando, no era nada más ni menos que la quien unos momentos después los tenía de rodillas pidiendo perdón por su inconciencia al organizar veinte bodas en total en cada uno de sus hoteles alrededor del mundo bajo la primicia que el precio final incluía uno de sus vestidos.

– Perdónanos, hermanita, no pensamos que iban a ser tantas las parejas que se casarían ese día.

La dulce chica había desaparecido para traer a esa temida pandillera que ahora exponía sus brazos con media mangas de tatuajes con motivos florales, tigres y un dragón en su espalda.

El de ojos azabaches se rio perdido en sus pensamientos, sin prestarle atención a la chica en frente de él; su ex compañero de padilla y su novia se había ido, sólo quedaban ellos dos, la chica vestía un sweater con un cárdigan amplio y una falda hasta la mitad de la pantorrilla con medias de lana, a pesar de declararse fan del frío, no soportaba las bajas temperaturas de la isla y solía abrigarse a extremos que le parecían graciosos a sus amigo, sobre todo a Takeomi, quien solía burlarse de ella y llamarle "repollito-chan", sin embargo, a Shinichiro le parecía adorable aquella faceta de la chica.

La chica tomó su mano para captar su atención, cosa que logró, además de lograr un sonrojo por parte del chico ante la suavidad y delicadeza de su tacto, como si el fuese lo más preciado que tuviese en la vida.

– Shin, ¿quieres una taza de café? ¿o prefieres chocolate caliente?

El ambiente frío se prestaba para una buena taza de chocolate caliente, a pesar de tener la calefacción encendida, la mujer insistía en mantener una ventana en cada cuarto abierta para la circulación de aire, lo que volvía al ambiente más fresco que en su taller, pero más cálido que en la calle.

– Una buena taza de chocolate me vendría bien– dijo con una gran sonrisa sonrojada.

Desde lo sucedido aquel día con ella, se había vuelto más unidos; Takeomi y Benkei solían pasar a verla dos veces por semana, por otra parte Wakasa se había rendido de tener oportunidad alguna con la chica tras ver lo apegados que estaban ella y Shinichiro, reconociendo que por fin, su amigo le había ganado una chica; por otra parte tanto Mikey y sus amigos, quienes finalmente crearon su pandilla y con ayuda de la peli____ crearon los uniformes, la visitaban diariamente tras enterarse de su situación, para hacer sus tareas en el salón mientras ella cuidaba de las pequeñas Mitsuyas. Por las noches, Shinichiro la visitaba tras una jornada de trabajo.

– Uyyy, la parejita ya está acá.

– Que rápido eres Nii-san.

– ¡Así se hace Shin-san!

Los comentarios por parte de los niños no se hicieron esperar apenas cruzaron la puerta, desde que él era más abierto respecto a sus sentimientos por su vecina, sus hermanos y los amigos de estos no paraba de burlarse cada vez que los encontraba juntos. Mas dos chicos pelinegros, uno con un lunar bajo uno de sus ojos y otro con colmillos, se aferraron a las piernas de la mujer y parecía que gruñían al hombre.

– Nos caes bien, Shin-san, ¡no te metas con Nee-chan!

Otro día, otra escena de hermanos menores por parte de Keisuke y Kazutora, la tarde recién comenzaba.

La Chica de al Lado (Shinichiro x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora