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Narra Jisung

Al despertar volvió a pasar la misma rutina, este día no tenía clases por lo que yo pasaría dejar a Suni y Minho directo a su trabajo, así vería a Seungmin y Felix un rato.

Así que así pasaron nuestros planes; ahora mismo nos encontrábamos en una cafetería hablando tranquilamente.

— ¿Te pasa algo Felix? Últimamente luces raro ¿Ocurrió algo con Chan? —. Él resopló mirando al cielo — Chan hace unos días dijo de querer formalizar nuestra relación e ir más allá... Quiere tener un hijo conmigo —. Ambos caímos en sorpresa al escuchar lo que Felix dijo.

— Pero no estoy seguro, aún no me miró cuidando a un bebé —.

— Si no te sientes listo, diceló, no puede obligarte a tener un bebé —. Mencionó Seungmin.

— Tiene razón, tener un hijo es una responsabilidad grande, no es como cuidar a una planta —. Dije, me sentía ya una persona responsable, no podía creer eso de mi.

— Cierto, estoy hablando con padres de bendiciones, debo hacerles caso —. Bromeó Lee a lo que yo negué.

— Suni no es mi hija —.

— Se están tardando, eh, hasta la foto de perfil de ambos es como si lo fueran —. Seungmin mostró el contacto de Minho y Felix el mío, dónde teníamos fotos con ambos y la mía era peor, ya que Minho besaba mi mejilla.

— La clase dice que Jisung tiene patrocinio  —. Exclamó Félix de manera burlona.

Empezaron a contar sobre aquellos rumores, dónde decían que desde hace tiempo había comenzado una relación con él, me había emocionado, ojalá fuera real.

El día acabo, recogí a Suni y está vez quisimos ir a visitar a su padre, cuando llegamos los abuelos de Suni estaban con Minho afuera de su oficina ellos me miraron con cara de pocos amigos pero su expresión desapareció al ver a su preciada nieta correr hacia ellos. Me acerque a Minho que se veía algo molesto.

— Jisung ¿Por qué vinieron aquí? — Me hablo el mayor. — Suni quiso venir a verte ya que te extrañaba mucho ¿Vinimos en mal momento? — respondí.

— Minho, espero ya no sigas con estás cosas, en verdad que es lo más bajo posible... Nos vemos preciosa, abuelita debe irse —. Dijo su madre despidiendose junto con su marido de la pequeña Suni, en ningún momento me dirigieron la palabra ni porque quise saludar es más ni las miradas me cruzaron.

Al pasar un rato íbamos a irnos pero Minho decidió ir con nosotros, este día fue complicado. Paso como todos los demás pero era diferente, él estaba preocupado y con la paciencia corta.

Pasaron los días y sentí como Minho se alejo un poco de mí, pero no solo de mí, también de su querida hija, me sentía como madre luchona.

Al pasar unos días me di cuenta de algo, era de noche y estaba leyendo un manga mientras que Minho leía sentado una novela, me levanté para avisarle sobre una junta que iba a ver en la escuela de Suni pero ví un chupetón, este si era uno ¿Cómo lo sé? Me detuve a mirarlo hasta que él sintió que lo observé, tapando con su mano aquella zona y apagando la luz de su lado; no dijo nada ni me explico algo, solo dijo que estaba cansado e iría a dormir. Hoy solamente me sonrió y no me dió un beso en la mejilla, que tristeza.

Los días pasaron y Minho usaba abrigos con cuellos altos o se mantenía en manga larga, pensaba que era muy exagerado de su parte pero un día que entre por accidente sin avisar a la habitación, ví como este se cambiaba y sí, culpable me sabrosie un poquito el cuerpo de mi jefe... Poquillo; pero también ví más chupetones por su pecho ¿Tenía alguien en su vida?

El tiempo pasó, se lo conté a los chicos pero ellos no decían nada, más bien Seungmin, parecía que el sabía algo pero no quería decirme; solo me explicaban que debía dejar las cosas en claro o al menos respetar mi posición como amigo y niñero de Minho.

Cada noche que quería sacar el tema inevitablemente el se quedaba dormido o se ocupaba en otras cosas, estaba tan triste de esta situación.

— ¿Papi ya llegará? —. Me preguntó Suni quien no podía dormir porque su padre no llegaba, por más mensajes que le envié el no atendió ninguno hasta que la puerta sonó entrando Minho con una mujer pelinegra muy bella, aquel vestido rojo resaltaba la figura de la dama y su hermosura.

Suni freno de golpe viendo a esa mujer aparecer de repente. No le agrado por lo que ví, ya que se puso detrás de mi empezando a llorar, esas acciones eran las que había comentado Minho que hacía Suni cada que conocía a alguien y por ello esa vez estuvo tan impresionado con el cariño que me había tomado Suni.

Acosté a la menor que no quería ni ver a su padre y después me dirigí a la sala donde la chica estaba como sanguijuela en el cuello de Minho, ella era la razón de esos chupetones... Sentí que en mi garganta se hizo un gran nudo cuando ella pasaba sus manos por el pequeño Minho y conectaba sus labios a los de él. Ya era mucho acto casi sexual enfrente de mis narices. Fingir estornudar para arruinar momentos románticos era mi pasión, así que eso hice, logrando que vieran mi presencia y que la chica me rodará los ojos. Calma ese fuego señora, pensaba.

— Disculpa, Jisung, ella es mi novia Sihyeon.. Sihyeon, él es Jisung mi... Amigo y niñero — . Murmuró bajando su cabeza al final, ¿Por qué lo hacía? Si se había casi comido con la chica enfrente mío.

— Él... Oh, es él que está en tu foto, encantado Jisung —. Misteriosamente la joven me abrazo susurrando que dejara en paz a su novio, que solo me metía por los ojos de él.

¿Me acaban de decir rompe hogares sin darme cuenta?

Minho volvió a salir con ella ya que la pasaría a dejar a su casa, yo estaba algo triste. Mis ilusiones se rompieron así que solo me quedé en la habitación de Suni hasta quedarme dormido.

Él También Es Mi PapáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora