3.

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Narrador.

Jisung había tomado tanto cariño a la menor, que se la paso jugando con esta casi todo el tiempo; Seungmin y Felix reían al ver como su amigo se divertía con la niña, parecía que habían conectado de alguna manera ya que a la pequeña le gustaba estar con él.

Llegó la oscura noche y Seungmin preparo un par de sandwiches mientras que sus amigos cuidaban de los niños; Baek se había levantado debido al escándalo de Jisung y Suni que más tarde se puso a jugar a las traes con ellos en compañía de Felix.

— La comida está lista —.  Dijo Seungmin llamando a todas las pocas personas en su casa. Los mayores tomaron a los menores para que estos alcanzarán el lavabo y poder lavar sus manitas, luego de unos minutos se sentaron a comer los sandwiches que había elaborado el dueño de la casa.

Al término de comer; Jisung noto que las coletas de la menor estaban algo caídas y flácidas, había correteado tanto por la casa que se había despeinado. —Suni, déjame arreglar tus colitas—. Le mencionó Jisung a la pequeña; está lo miro algo apenada y con una ligera sonrisa. — ¿Puedes hacerme otro peinado—. Murmuró la menor.

— Oh, claro, se hacer pequeñas trencitas. Déjame intento hacerte una diadema con estás—.  Mencionó Jisung a lo que la dulce niña le respondió con una cálida sonrisa.

Pasaron un par de minutos y Jisung había hecho un hermoso trabajo al peinar a la menor y está reflejaba esa felicidad con sonrisas, vueltas y presumiendo su peinado. Han había quedado satisfecho que solo sonreía aplaudiendo a la menor.

— Me da miedo, paso un día y ya se puso cariñosa con la pequeña —. Dijo Felix.

— ¿Qué dicen me la robó? —. Habló Han.

Seungmin, dió un zape en la cabeza ajena, dando un gran suspiro. —Ni lo pienses, su padre me matará—.  Jisung fingió nuevamente otro berrinche que causó la gran risa de Suni.

Narra Minho.

Había pedido el favor a Seungmin de que recogiera a Suni, hoy teníamos un límite para un trabajo, así que tenía que concentrarme demasiado en ello, crear videojuegos no es tan sencillo como parece.

Al término de largas horas llegó la oscura noche, siendo casi las diez. Acabamos muy agotados y con mucho sueño. — ¡AAh! Por fin —. Grito satisfecho Changbin, teníamos la manía de gritar tan fuerte al terminar un trabajo o cuando estuviéramos estresados, esto para que el estrés en nosotros no se acumulará.

— Chris, vendrás con nosotros, ¿Verdad? Fefi está en mi casa con Seungmin—. Mencionó el más pequeño de nosotros.

— oh, claro, no quiero que se regrese solo —. Comento el mayor.

Ambos asentimos a las palabras de él y guardamos nuestro equipo. Era hora de marcharnos y los tres iríamos a casa de Changbin, el camino no duró mucho, ya que en unos minutos nos encontrábamos en la casa de esté. 

Cuando Changbin abrió la puerta mire como un joven de mejillas regordetas, arrullaba a mi pequeña, está se veía tan cómoda con su rostro apoyado en los hombros de aquel chico desconocido, era raro, Suni no solía ser tan apegada a cualquiera y no suele dormir en brazos que no sean los míos.

Él También Es Mi PapáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora