Me enamoré por error ©

Capítulo 17

Narra Chloe

Estaba silenciosamente contemplando las facciones de John. Aún no logro asimilar que dormí con él, Melina debería estar en mi lugar. Por palabras que salieron de su boca, es verdad que no está interesado en mi amiga, por el contrario él no sería así conmigo y no me andaría diciendo que le gusto. Un parpadeo me hace volver a la realidad, John me estaba mirando con una sonrisa.

— Una foto dura más.

— No necesito una foto tuya, no quisiera traumarme —sonreí con arrogancia.

— Oh claro que sí —me dio un corto beso en la comisura de mis labios, torpemente me corrí de él.

— Deja de hacer eso.

— ¿Hacer el qué?

Otra vez lo mismo, le gusta hacerse el tonto.

— Esto, John —traté de no alzar la voz—. Estoy siendo una mala amiga y tú un mal novio.

— Pero...

Lo interrumpí

— Lo siento por no corresponderte. Melina no se merece esto.

Agarré mi falda junto con mi polera y salí hacia el baño para cambiarme, luego regresé para ir en busca de mi suéter y lo vi de espalda acomodándose el pantalón.

— Las tengo que ir a dejar — respondió de mal humor a lo que ni siquiera le había preguntado.

— Sí estás con ese ánimo no me quejaría en irme en taxi — salí dando un portazo de la habitación. A ver si logro despertar la perezosa de Emily.

Narra Emily

Un ruido me hizo despertar de golpe. Abrí los ojos lentamente... pues... reconocí que esta no es mi habitación precisamente, es más bien de un chico y que yo sepa (y por obviedad) no creo que esté en la de mi hermano y menos que me esté abrazando, él no lo hace desde hace años. Descartando la posibilidad de que fuera él, un nudo empezó a crecer en mi garganta, hay alguien que está muy apegado a mí y con su respiración en mi cuello. Tengo miedo porque de verdad que no reconozco esta habitación. Lentamente comencé a girar mi cabeza como el exorcista... hasta que veo a un tierno, guapo y durmiendo ¿Jeremy?...

El susodicho despertó a los segundos y miré hacia otro lado.

— Hola — dijo con la voz más ronca de lo normal ¿qué toma para no oler tan mal en la mañana? ¿se habrá levantado antes para lavarse los dientes o aunque sea haber comido algo?

En mi caso, me tuve que alejar para no aturdirlo con mi aliento mañanero.

— Tengo que irme —me levanté y estiré mi vestido, dormí muy incómoda con esto.

— Duchémonos -sugirió.

— No.

Gruñó por lo bajo y se levantó, mientras me miraba por el espejo que colgaba al lado de su cama, de reojo vi que se adentraba al baño. Oí el agua de la ducha. Suspiré agotada, no sé qué hacer con mi cabello, parezco a Beetlejuice de lo chascona. Lo peiné con mis manos y logré bajarlo un poco. Unos brazos rodearon mi cintura y me arrastró hacia el baño.

— ¡Jeremy te dije que no! — carcajeé tratando de pegarle patadas.

— No permitiré que te vayas sin ducharte.

Me metió debajo de la regadera y ahogué un grito cuando el agua helada bajó por mi espalda. Jeremy tomó el envase de champú y lo aplicó sobre mi cabeza, comenzó a frotar cuando caí en cuenta que estaba con el vestido.