Me enamoré por error ©

Capítulo 20

Capítulo 20: Sin motivo

Narra Jeremy

Luego de haber esperado a que Johnny llegase iniciamos la conversación tan esperada por mí.

— Necesito decirles algo respecto a la apuesta.

— ¿Aún no te follas a Emily? — preguntó Franco con tono burlesco.

Sonreí triunfante. Mi querido Franquito, no sabes lo que estás apunto de oír.

— De eso quería hablar.

— Vaya, pensé que ibas a cancelar como la vez que gané — dijo Johnny con una mano en su barbilla, me miró feo cuando le tiré un cojín a la cara.

— Sin rodeos, yo por lo menos tengo el primer lugar asegurado si es que ustedes no lo han hecho aún.

— Hijo de la gran puta — se quejó el moreno.

— Así es —mi sonrisa mostraba lo ''winner'' que me sentía— ¿Cómo van ustedes?

— Aun nada pero de seguro que Johnny será mi chófer y nos invitará cervezas en cada fiesta —rió Franco.

— ¡Hey!... eso aún no está confirmado, además no es fácil. Con Melina no hemos estado solos ni siquiera por cinco minutos — Johnny rodó los ojos y sacó su teléfono.

— Se nota que aún es inocente — bebí un poco de mi cerveza.

Franco se atragantó con la suya y se alargó a reír. Pequeñas gotas salían de sus apretados labios, hijo de puta como abra la boca y me salpique una sola gota, me encargaré de que nunca más vuelva a pasar del puñetazo que le daré.

— ¿Y a ti que te pasa? — preguntó Johnny molesto. Últimamente todo le arde a la señorita Hoover.

— Nada, nada -paró de reír pero aún así sus hombros se movían donde aguantaba la risa.

— Lo otro que quería mencionarles es que apostaron con Emily en la última apuesta, digo, con Bruce pero aún así Emily estuvo involucrada ahí.

— ¿Así que hablaremos de Emily? Bueno, Emily no está nada mal, un poco flaca pero... —comenzó a decir Franco pero lo interrumpí.

— Ahórrate lo que sea que ibas a decir si no quieres que te rompa la mandíbula —dije amargado señalándolocon la lata de cerveza.

Franco hizo que tenía un cierre en la boca y la cerró. Es casi imposible enojarme con él por lo infantil que es.

— Díganme por qué mierda no me lo comentaron antes.

— ¿Es que ahora te importa la muchacha? Te recuerdo que es una apuesta, así que no te tienes que encariñar de la víctima —canturreó Franco.

Ahora si me está sacando de las casillas. Mi paciencia es del porte de una hormiga.

— Dejando las bromas de lado, ya hice mi parte, uff ni se imaginan cómo fue —Franco hizo un guiño.

Ahora Johnny tuvo problemas con la cerveza. ¡¿Qué mierda pasa con la puta bebida?! No compraré más de esta mierda.

— Cabrón, soy un hombre de palabras ¿recuerdas lo que iba a pasar luego de que te follaras a mi prima? — asintió— creo que tu lado es el derecho así que por obviedad te daré en el pómulo izquierdo —dije mientras arremangaba las mangas de mi camiseta.

— Espera, estaba bromeando — Franco rió y me uní a él. Bajé las mangas y me volví a sentar.

— Sigamos con el tema. Franco una más y no respondo.