Capítulo XII. Mi deber como esposo.

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[¿Dónde escuchaste ese nombre?] la voz seria del hombre se escuchó del otro lado de la bocina. Sasha se acaba de despertar y estaba cansada, nunca pensó que Shu fuese tan rudo con ella.

—Lo vi en el celular de Shu. Papá, ¿lo conoces?

[Conocí a uno, pero debería de haber muerto hace años. De igual forma, investigaré más a fondo, si tuvieras un dato más que pueda ayudar, me serviría mucho] Sasha lo pensó un poco, el mensaje no daba ningún apellido o algo relevante.

—Simplemente decía que estaba en la antigua mansión, supongo que es donde vivía el abuelo de Shu.

[Perfecto, con eso es más que suficiente, cuídate hija y asegura nuestro futuro] Sasha sonrió y respondió con un 'si'.


......


—Kay, ven a mi oficina —el hombre miraba el mensaje que su hija había enviado, lo había leído al menos diez veces hasta el momento, la imagen de esa familia llegaba su mente atormentando y torturando su paz.

—¿Necesita algo, señor? —Kay, vestido de traje negro y lentes obscuros entro a la oficina, era un hombre imponente y serio. Con el aspecto que tenía lograba intimidar a cualquiera.

—Ve a la antigua mansión Kurenai, trata de infiltrarte e investigar quien la ocupa, cuando consigas la información investiga todo sobre esa persona —Kay asintió y salió de la oficina—. Valt, Valt —susurró—. Tanta coincidencia no es posible, ¿verdad?


......


—Señor Kurenai, ¿tiene alguna relación con la señorita Guten, aparte de trabajo? —un periodista no pudo con la duda y terminó preguntando, ellos habían llegado de la mano al evento que se estaba transmitiendo a nivel nacional, tal vez sólo era una forma sutil de anunciar su relación. Además, él los había visto detrás de escena, Shu le había puesto a ella el collar que llevaba en ese momento. El periodista también los había estado siguiendo. Dos semanas atrás ambos salieron de un bar, Shu la había abrazado y besado con cariño, eso era definitivamente una relación. Extrañamente, al día siguiente Sasha fue captada por ellos en un centro comercial, ella llevaba una blusa de cuello alto, tal vez para ocultar las marcas.

—¿Una relación con esta hermosa mujer?, me sentiría honrado si ella aceptara salir conmigo, sin embargo, por el momento únicamente somos socios.

—Yo sería feliz si eso llegara a pasar —Sasha se puso a su lado y agarró alegremente su brazo. Los periodistas siguieron haciendo preguntas sobre ellos. Incluso en la pantalla del televisor aparecieron en letras grandes y blancas.

<<Shu Kurenai y Sasha Guten confirman sutilmente su relación>>

Valt sintió una opresión en el pecho, sus manos temblaron y las lágrimas amargas se desbordaron sobre sus mejillas. Miró la enorme pantalla del televisor y la sonrisa deslumbrante de Shu al estar cerca de ella le dolió como una estaca en el corazón. No podía compararse con ella. Ella era elegante y hermosa. Él era solo un huérfano del cual habían abusado. Pero Shu había dicho que sólo era trabajo.

—Sí, sólo es trabajó —se convenció entre lágrimas.

Valt abrazo sus piernas y se cubrió con la frazada completamente. El sollozo traspasaba la puerta de la habitación y John sintió pena por él. hace dos semanas lo había encerrado ahí, por órdenes de Shu no le había dejado el celular y sólo podía ver la televisión para distraerse. Quien iba a imaginar que eso le causaría tanto dolor.

El dolor de amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora