Oiga, Mi Reina'.

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En este capitulo se desarrolla la historia del Pipe y el diego, también saldrán los protagonistas pero ellos se robaran la película hoy, si no les gustan pueden pasar. Xoxo

2 semanas después.

Diego.

Vamo' a la playa, oh, oh, oh, oh
Vamo' a la playa, oh, oh, oh, oh
Vamo' a la playa, oh, oh, oh, oh
Vamo' a la playa, oh, oh...

La canción retumbaba por mi cabeza, y como no?

Si por fin, nos íbamos a la playa.

Por fin tenía amigos con los cuales ir, con los cuales ser yo, sin sentirme juzgado.

Sonreí triste.

Pero me iba a la playa y nada iba a dejar que mis ánimos bajaran.

Arregle las últimas cosas y puse mi bolso en el auto.

Mi camiseta bastante acorde a la situación, roja con flores blancas.

Pero cuando di un paso afuera me arrpenti al instante.

Hacia un frío de mierda, y un viento heladisimo, más helado que el corazón del Pipe.

Pero bueno, si un respiro profundo y salí igual, el frío es mental.

Mental va a ser el resfriado que te va a dar, weon.

Prendí el auto y emprendí mi viaje.

La radio marcaba las 08:00 A.M

¿Hay que aprovechar el día o no?

Mientras iba manejando me preguntaba si, los chiquillos estarán despiertos, o estar durmiendo.

Igual si, osea ellos no saben que vamos a la playa pero..

Igual es tarde a esta hora, debí haber salido más temprano.

Mis pensamientos se esfumaron cuando una canción sonó.

Le subí la música hasta el tope, y empeze a cantar, es qué sing of the times se grita.

Hasta lágrimas me salieron, pero no es que sea llorón ¿¿ya??.

Me toco un semaforo en rojo y casi no había nadie, pero un caballero estaba vendiendo rosas.

Se acerco al auto y pregunto:

—¿Quiere una joven? A su enamorada le a puesto que le gustan.

Sonreí, ¿Enamorada?

—Yo creo que si, deme todas las que tiene ahí.

Su sonrisa se ensanchó y me las dio con mucho gusto y se las pague.

—¿Sabe? No tengo una enamorada—la cara del caballero paso a ser una confusa—Pero si tengo un enamorado, muy lindo. Espero que estas rosas lo conquisten.

El caballero me sonrió con ternura.

—Así será joven.

Y el semaforo dio verde y partí.

Con la media sonrisa.

[...]

Ya afuera de la casa del Pipe, no andaba ni un alma, igual como que daba miedo, pero a darle nomas.

Me peine un poco y toque la puerta.

¿Como había conseguido la dirección del Pipe?