𝙾𝚗𝚎 𝚜𝚑𝚘𝚝 || 𝚃𝚘𝚔𝚢𝚘 𝚛𝚎𝚟𝚎𝚗𝚐𝚎𝚛𝚜 || Reescribiendo

Baji Keisuke 2

|Ámame de nuevo|

La chica se había quedado atónita, no podía mover ningún músculo al ver los ojos negros de Manjiro, quien la miraba con tanta intensidad.

—. Saiko, ¿No quieres agua? — pregunto Baji con una sonrisa, mostrando sus atractivos colmillos —. ¿Pasó algo?

—. Y-yo.

El chico no entendía el porque tanto pánico en ella, hasta que dirigió su mirada hacía dónde ella veía, con una gran curiosidad giro su cabeza hasta ver la ventana. Dónde su amigo se encontraba.

—. Mikey... — dicho eso caminó rápidamente hacía la puerta principal.

—. ¿Que haces? —. Preguntó la mujer con un nudo en la garganta.

—. Voy a hacer lo que tuve que hacer hace meses — dicho eso abrió la puerta enojado —. Hacer pagar a ese hijo de puta.

Bajo finalmente salió de la casa, cuándo el lo hizo Manjiro dejo de mirar la ventana. Algo malo estaba por suceder, algo realmente malo, pues el sentimiento de la Saiko la invadía aún más cuándo escucho el comentario de Baji, que la hizo estremecerse al instante.

—. Tengo que hacer algo —. Decía la cabeza de la mujer, mientras está se encontraba sentada, esperando alguna respuesta de aquellos dos.

El aura fue incómodo, al no sentir ningún ruido pensó que se había calmado la situación, aunque elma jamás había escuchado algo salido de lugar, solo los grillos quienes se encontraban cerca de su casa.

Salió inmediatamente, sentía que algo andaba mal y eso la ponía inquieta, al salir pudo apreciar que no se encontraba nadie, pero notó que se encontraba la chaqueta de Manjiro tirada a un lado de la casa... Ella se acercó, no tuvo más remedio que agarrarla y dejarla adentro de su vivienda.

—. ¿Dónde están? —. Se preguntó, temiendo que algo les pasará.

Volvió a caminar más allá de su casa, hasta ver un callejón "vacío" pero notó una persona.

¿Baji?

Ella corrió de inmediato a dónde el se encontraba, estaba contenta al verlo sano y sin ningún golpe en su cara, pero se veía enojado, muy enojado.

—. ¿Keisuke? —. Saiko susurró, estando a centímetros de su cuerpo.

El giro de inmediato, encontrando la cara de Saiko, quien se encontraba llena de temor y miedo.— ¿Por qué estás aquí? —. Susurró acariciando el cabello de la nombrada.

—. No, ¿Tu que haces aquí? —. Ella dijo, dando dos pasos más a el, encontrándose a Manjiro mirando a otro lado.

—. Estaba hablando con el, no tiene importancia —. Baji hablo, restándole importancia a la presencia de su amigo.

—. ¿Por qué no dices la verdad? —. Manjiro susurró, volviendo su mirada aquellos dos que se encontraban adelante de el.

—. ¿Que puta verdad? Que eres un infiel de mierda verdad —. Baji exclamó con el ceño fruncido, mientras agarraba el cuerpo de Saiko con delicadeza.

—. Lo hice por presión —. Manjiro lo miró con odio, mientras sus puños estaban listos para aventar un golpe.

—. No entiendo, ¿Lo hiciste por presión? —. Saiko preguntó, confundida y afectada.