Capítulo 7

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La mañana llegó bastante más fría para esas épocas, acción de gracias estaba cerca y las calles de la ciudad comenzaban a llenarse de turistas y locales desesperados por realizar las compras para la festividad. Natasha había dejado a su hija en la escuela esa mañana antes de pedirle a Skye si podían retrasar su cita una hora más pues le había surgido una reunión de emergencia que no podía posponer hasta el lunes.

Solo había recibido una corta respuesta afirmativa, lo que la confundió un poco, decidió quitar esos pensamientos de su mente pues quizás solo estaba siendo profesional o estaba ocupada. Pero comenzó a preocuparse un poco al llegar a la empresa de la castaña a la hora acordada siendo recibida por un grupo de casi 30 hombres que la saludaron amablemente, sin miradas indiscretas ni nada por el estilo, pero no había rastros de Skye.

- Buenos días, tengo una reunión con Skye en unos minutos – miró a uno de los hombres que se había acercado

- Buenos días, soy Tom – asintió estrechando su mano – creo que no ha llegado todavía – llamó a uno de los chicos – Hey, Mark ¿viste a la jefa?

- No está en su oficina, lo cual es extraño – miró a la mujer – un placer, si desea puede esperarla allí

- Hola chicos – un joven se acercó dejando unas llaves - ¿todo en orden?

- Luke ¿Qué haces aquí? – Tom lo miró confundido – tú turno empieza más tarde

- Oh...anoche llevé a la jefa por el clima – todos entendieron – vine a regresar la camioneta de trabajo, dijo que venía en taxi

- Está bien, gracias – Mark asintió mirando a la pelirroja – señora...

- Romanoff, Natasha Romanoff – asintió confundida por la interacción de los hombres - ¿está todo bien?

- Sí, por supuesto – asintió – muchachos esté lugar tiene que sentirse como un cálido día de primavera – todos asintieron – señora Romanoff, por aquí

Mark guio a Natasha hasta la oficina de Skye antes de mencionarle que podía sentarse a esperarla pues no creía que tardara mucho, le ofreció un café que aceptó al instante comenzando a sentir un poco de calor en el lugar. Quiso preguntar porque estaba tan fuerte la calefacción, pero prefirió no entrometerse recibiendo amablemente la taza antes de quedar a solas en la oficina, notó varios títulos y medallas en las paredes, no había nada fuera de lugar, un par de fotos de la familia Bishop, otras de las hermanas solas, se sorprendió de ver una a solas con Yelena, así como con el uniforme del ejército.

Por su parte, Skye se había levantado más adolorida de lo que le gustaría admitir, duchándose con agua tibia antes de colocarse su ropa de trabajo con demasiados abrigos encima, tomó algo para el dolor y salió a buscar un taxi. Sabía que estaba retrasada para la reunión agradeciendo que Natasha había pedido retrasarla una hora, de otra manera tendría que postergarla hasta el lunes pues no creía haber podido salir tan temprano con el frío y el dolor en todo su cuerpo.

Sabía que al entrar a la empresa esa mañana el equipo con el que trabajaría en la casa Romanoff estaría esperándola pues los había citado para presentarlos con la mujer, caminaba con un poco de dificultad pues su rodilla había sido la más afectada al igual que su espalda en el accidente. Todos la saludaron animados y preocupados, agradeciéndoles silenciosamente por la temperatura que había en el lugar, Mark le mencionó que ya Natasha ya la estaba esperando en la oficina antes de dirigirse hacia allí aceptando el café, pues no había tenido tiempo de desayunar.

- Hola, siento mucho la demora – entró con pasos lentos antes de extender su mano a la pelirroja que la miraba curiosa – una complicación

- Hola, ¿estás bien? – miró a la castaña algo preocupada pues lucía pálida – parece que estuvieras a punto de desmayarte

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