Volver a empezar

Capítulo 21

Luego de que terminaron de cenar y pagaron, salieron del restaurante antes de que Lena dejara a su hermana en el departamento de Skye...ninguna tenía idea de si estaría allí o si estaría durmiendo, afortunadamente la pelirroja no salía de casa sin la llave extra.

Cuando entró se sorprendió de ver todo a oscuras pensando que quizás la castaña ya estaba durmiendo y su aparición probablemente la despertaría, camino intentando hacer el menor ruido posible hasta que estuvo fuera del estudio en casa que tenía Skye, dándose cuenta de que se encontraba allí dibujando con una taza de té junto a ella.

- ¿Skye? – la castaña se giró sorprendida de ver a la pelirroja allí – lo siento, no quise asustarte

- Natasha – se levantó para acercarse a la mujer – no me asustaste, ¿está todo bien?

- Sí, yo...quería venir a pasar un rato contigo – se rascó la nuca algo nerviosa – espero no te moleste

- Claro que no – besó su mejilla con suavidad – me gusta que estés aquí ¿quieres un té? ¿una copa de vino?

- Una copa estaría bien – asintió mirándola a los ojos - ¿en qué estabas trabajando?

- Oh...no es nada – se encogió de hombros – solo estaba dibujando, puedes ver si quieres en lo que regreso con el vino

Natasha se acercó a la mesa de trabajo notando un hermoso dibujo de un paisaje que desconocía, era increíble lo delicados y definidos que eran los trazos casi parecía una fotografía...a pesar de que ya lo sabía se sorprendió más por lo hábil que era Skye con las manos. Notó un banco acercarse a su espalda y una copa de vino en su campo de visión, se sentó agradeciéndole a la castaña antes de que esta comenzara a mostrarle lo que había estado dibujando antes.

- Son increíbles – estaba sorprendida – parecen fotografías, ¿Dónde es?

- Es un acantilado en Islandia, fue uno de los primeros lugares a los que viaje – le pasó el dibujo – sin dudas estar ahí se siente como volar

- Es un lugar que tengo pendiente visitar – miró primero el dibujo y luego a la mujer - ¿hay algo que no sepas hacer?

- Cantar desde luego – ambas se rieron – así como otras cosas en las que soy un desastre

- Hasta ahora eres más que increíble, Bishop – tomó su mano - ¿has dibujado retratos?

- No es lo que más me gusta, pero sí – asintió buscando entre los dibujos – aquí

- ¿Esa es Lena y Kate? – vio el dibujo de ambas sorprendida por la cantidad de detalles que tenía – es impresionante, ¿lo vieron?

- Aún no – sonrió un poco sonrojada – es su regalo de aniversario, o bueno parte del regalo

- Sin dudas lo van a amar – asintió – sí Lori descubre que dibujas así de bien seguro te pide que le enseñes

- Bueno, sí quiere no tengo problema en enseñarle – sonrió entusiasmada con la idea – podría ser divertido

- ¿De verdad? – notó que asentía – gracias, Bishop

- Nada que agradecer – sonrió - ¿cómo estás?

- Relajada – dio un sorbo a su copa – el día de hoy fue especial, hace mucho tiempo no veía tan feliz a Lori y eso me pone feliz a mí

- Sin dudas amo el día de nieve – sonrió mirando a la pelirroja – es de las cosas que más extraño sentir sin sufrir las consecuencias después