(NO) Podrás Amarme © [COMPLETO]

Capítulo 17

—Antes dijiste que íbamos muy rápido, pero acabas de decir que me quieres y compartimos el sentimiento, créeme.

—Déjame pensarlo —coloqué un dedo en mi barbilla e hice una mueca pensativa-. Listo. Podrás llamarme así, solo si aceptas una de mis reglas.

Parpadeó y antes de arrepentirme le dije mi condición.

—Nada de cosas exageradamente cursis en público. ¿Me escuchas?

—Eso será difícil, Bellota. Si te prometiera algo como eso, te estaría mintiendo. Y no quiero eso.

—Me da nauseas ver a parejas besarse y darse muestras de afecto en público, no pienso ser una de esas, Zack. Ahora, lo tomas o lo dejas. Es tú decisión.

—Te empezaré a llamar mi novia y no me detendrás cuando de abrace o te bese en público, apuesto que va a terminar gustándote.

—No lo creo. ¿Qué vas a apostar?

Parecía estar disfrutando de nuestra conversación, y del reto que le estaba proponiendo.

—Dime qué es lo más valioso o importante que tienes y eso podrías apostar —sugerí.

—¿Después de ti? Mi familia y mi carrera.

—¡Da igual! —exclamé, después de que hablara—. Solo, no te excedas con las muestras de cariño. ¿Si?

Asintió como un niño pequeño y yo salí de la habitación, fui a despertar a Maggie de su profundo sueño. Dormida me dijo cosas que yo no entendí, pudieron haber sido insultos porque molesté su magnífica hora de relajación, todo eso se esfumó cuando le conté que los chicos y Liz compraron comida rápida y sushi.

Quitó su mascarilla y bajó corriendo por las escaleras, tropezó un par de veces pero no se cayó.

—Pero miren quién está aquí. El ogro dormilón. ¿Ya tienes hambre y por eso saliste de tu cueva?

Maggie le ofreció una de sus sonrisas más sarcásticas a Chris y se sentó en el sofá con fuerza, haciendo que los cojines se movieran y por poco caen al suelo.

La cena fue tranquila y no dijimos nada mientras comíamos, aún tenía que resolver una duda que tenía, por eso me reuní con las chicas en una de nuestras habitaciones para poder conversar.

—Es increíble que llevemos más de un mes y medio aquí. El tiempo pasa volando.

—Ha sido una nueva experiencia —le respondió Liz a Olivia.

—Querías hablar de algo, Summer. ¿Qué es?

—Seré directa —inhalé un poco del aire frío, no quería que esto se volviera motivo de discusión—. Me enteré de lo que está pasando con la empresa.

A Maggie se le fue el color de las mejillas, Olivia suspiró y Liz me miró con el ceño fruncido.

—Queríamos decírtelo, pero...

—¿Qué pasa con la empresa? —Liz parecía no tener la menor idea de lo que sucedió.

—¡¿Ella tampoco lo sabe?!

—Es difícil de explicarlo —tartamudeó Maggie.

Tardamos un poco más de tiempo en explicarle a Liz lo que sucedía, ella casi reacciona tirando puñetazos a Maggie y Olivia, pero se contuvo y se limitó a asesinarlas con la mirada.

—¿En qué loco momento se les ocurrió que sería buena idea ocultarnos este asunto?

—Nunca dijimos que pensamos que era una buena idea.