Capitulo 33

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—Bueno, su atención por favor —habló Zack, entre todo el bullicio.

—¡¿Quieren callarse?! —me sobresalte al escuchar el grito de Chris—. Por fin, gracias.

—Te lo agradezco, Chris. Aunque casi me dejaras sordo.

—Fue un gusto ayudarte amigo.

Zack se aclaró la garganta y continuó hablando, esta vez en un tono más tranquilo pero aún lo suficientemente alto para que todos pudieran escuchar.

—Como decía, quiero agradecerles a todos por estar aquí. Hoy es un día especial, no solo porque estamos celebrando el éxito de nuestro último proyecto como equipo, sino también porque mi querida novia y su hermano tienen muy, pero muy buenas noticias esta noche.

El ambiente se llenó de expectación y curiosidad. Todos los ojos estaban puestos en mi y en Cooper mientras esperaban ansiosamente nuestras palabras.

—Ehh... Bueno, como todos saben, ha pasado un tiempo bastante largo desde que tuve el accidente junto con mi madre. Gracias a algunos tratamientos ahora yo estoy mejor, y ahora mi mamá también lo está.

Toda la habitación se quedó en silencio y esperaban a que yo terminara de hablar, sobre todo mis amigas.

—Esta mañana, los médicos nos informaron que ella por fin despertó.

La sala estalló en vítores y aplausos. Las lágrimas llenaron mis ojos mientras miraba a Cooper, quien me sostenía la mano con ternura y emoción en su rostro.

—Mi mamá ha pasado por un largo camino de recuperación, y aunque todavía queda mucho por hacer, su despertar es un gran paso adelante. Gracias a los que estuvieron conmigo todo este tiempo.

Los abrazos y las felicitaciones sucedieron, mientras los miembros de nuestro equipo nos rodeaban con alegría y admiración. Era un momento de celebración y esperanza, y sentí una gratitud abrumadora por todos los que nos habían apoyado en este camino.

Zack se acercó y me abrazó con fuerza.

—¿Por qué no vamos a visitar a mi mamá más tarde? Seguro estará encantada de verte, de nuevo.

—Me parece una gran idea.

Después de terminar con la pequeña reunión, me preparé junto con Zack para ir a visitar a mi madre. Empezaba a hacer frío ya que el invierno se acercaba, así que en el auto encendí la calefacción.

Mientras esperaba a que Zack se subiera para irnos, alguien dio dos o tres golpes en el vidrio, llamando mi atención.

Cooper al otro lado me pidió que bajara la ventanilla y así lo hice.

—Oye, Summer... —empezó diciendo bastante nervioso—, quería ver si podíamos ir juntos... Digo, los tres a visitar a tu madre. Nuestra... Tuya.

Ese era uno de los puntos a los cuales aún no nos habíamos acostumbrado por completo. Y aunque no me molestaba, parecía que iba a ser un largo camino para relacionarnos por completo.

—Claro, sube —Cooper sonrió y rodeó el auto para entrar.

—Si vas a venir, que sea rápido, el tráfico empeorará más tarde —Zack intentó apurarlo.

Encendimos la radio y el camino fue corto, los dos chicos iban en silencio y yo miraba por la ventana, esperando llegar pronto.

—¡Summer! —me saludó una de las enfermeras qué me había comentado la noticia esta mañana—. Ven por aquí linda, ella te está esperando.

(NO) Podrás Amarme © [COMPLETO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora