Encendí mi laptop y me puse los audífonos, abrí la app videollamadas y le empecé a marcar a Bee.
-Ya encontraste un bello italiano con el cual perder tu virginidad? -fue lo primero que me preguntó cuando contestó, siempre me hacía la misma pregunta y yo siempre le daba la misma respuesta.
-Que nooo. -¿Acaso no hay chicos en Italia?
-Claro que hay chicos en Italia, pero no es así de sencillo. -evoqué en mi mente mi intento fallido con Marcelo y me dieron ganas de llorar.
-Me decepcionas Eli -fingió que se sacaba una lágrima.
-Pequeña manipuladora.
-Al menos dime que tienes algo bueno para mí.Cada semana, nos poníamos al día, tenía tantas cosas que contarle que no sabía por dónde empezar, al final empecé por lo primero que se me ocurrió.
-Pues... Aún lo estoy asimilando, pero algún día te contaré mi odisea con los Cacciatori, te juro que parece salido de Wattpad
-La estaré esperando, aquí sentadita -dejó pasar unos segundos y entonces volvió al ataque- ¿Ya me vas a contar?
-Pensaba en algo más lejano, como cuando nos tomemos un café en persona.
-Yo ya estoy tomando café, así que puedes empezar. -dijo Beatriz, del otro lado de la pantalla, estaba abrazada a su peluche favorito, un enorme conejo que le había regalado su primer novio y el cual tras diez años aún conservaba.
-De acuerdo. -reí-Mi hermana y yo fuimos a Tivoli y cuando regresamos los vimos tomando el sol en la cancha de fútbol. ¡Sin camiseta!
-¡No me jodas!
-Te lo juro. Nos quedamos en shock. El caso es que me dije no desperdiciaré la oportunidad y les haré una foto, para mostrársela a Bee.
-Tú siempre pensando en mí. -me hizo un corazón con los dedos, yo le devolví el gesto haciendo el finger heart.- Dime que tienes esa foto mujer.
-Había tomado tantas fotos y videos en Tivoli que el cel no tenía más espacio.
-Nooooo.
-Estaba toda frustrada, esa no era una oportunidad de todos los días y menos aquí que hace más frío que calor.
-¿Y entonces?
-Mi hermana me dijo, tendrás esa foto, no mejor un vídeo -reí recordando su determinación.
-Amo a tu hermana -los ojos de Bee brillaron de emoción.
-Nos dimos la vuelta en el vehículo. Me dio su cel y volvimos. Ahí estaban ellos todos hermosos y los grabamos.
-Así desvergonzadamente,
-Así, desvergonzadamente -confirmé toda orgullosa.
-¡Esa es mi amiga!
-¡Oh Bee! -gemí al recordarlo- Debiste ver sus caras, eran un poema, pero...
-No, los peros nunca son buenos.
-Justo entonces, un vehículo después estaba el marido de mi hermana.
-¡Oh rayos, Eli!
-El caso es que su esposo nos siguió en su vehículo y nos regañó.
-Uy, pero que deje observar el arte de las madres europeas, aunque sea.
-Después que discutieron, mi hermana me envió el vídeo y luego le dio a borrar para todos en WhatsApp y se me borró también a mí. Al final perdimos el vídeo.
-¿Quéeee?
-Siii esa también fue mi cara, cuando me di cuenta de lo que había pasado.
-¿Por qué me torturas así Eli?, sabes las ganas que tengo ahora de ver ese video y me dices que ya no existe.
-Lo sé. -nos quedamos en silencio un momento, entonces continué.- pero mi hermana se sentía tan culpable que al día siguiente, sin decirme nada volvió a Tivoli y se pasó la tarde buscando a alguien que pudiera recuperar el archivo.
-Siiii, ¡lo sabía! -me reí al ver cómo agarraba su laptop y la agitaba como si fuera mi cabeza.- sabía que no podías hacerme esta maravillosa historia y no darme al menos un dulce.
-Al final recuperamos el vídeo, aunque no en la misma calidad.
-Dame, dame, dame- me apuró.
-Te presento a Los Cacciatori -le envié el archivo, había hecho un edit en cámara lenta para que se pudiera apreciar mejor a los chicos.
-Santo Dios, es como entrar a una carnicería de puro filete.
-¡Bee! No los cosifiques, son personas.
-Sí, tienes razón, son personas... -bajo la cabeza en señal de vergüenza, para luego añadir -y también son unos jugosos filetes.
-¡Bee...! -la miré de forma reprobadora.
-¿Qué? Ya sabes cómo me pongo, ¿para qué me invitas?
-En fin, esa es la anécdota. ¿Verdad que es digno de Wattpad?
-Totalmente, hahaha. ¿Quién es el bombón del pelo oscuro?
-Se llama Vittore.
-¡Wao! Vittore Cacciatori, -enmarcó sus palabras con las manos.-suena potente, ¿De dónde salieron estos Cacciatori?
-Fueron invitados por un sujeto al que llaman El arquitecto, junto al Sindaco quieren entregarle el pueblo porque son una familia poderosa.
-¿Te das cuenta de que eso suena a mafia por dónde lo mires?
-No, Bee, deja de llenarme la cabeza con tus locas teorías.
-¿Locas teorías? ¿Ya sabes qué pasó con aquel muchacho rumeno?
-No, aún no lo sé, pero eso no significa que mi cuñado sea un mafioso que manda a la gente a dormir con los peces, aquí ni siquiera tenemos cerca el mar.
-Un río o un lago también sirve. -Se encogió de hombros.
-¡Bee! -Bueno, ya, pero después no digas que no te lo dije.
-En fin, él y sus amigos, que están hermosos también, van todos los días a tomar el café al Mamamia. El rubio es bien extrovertido, pero el de pelo oscuro es tímido e introvertido.
-Ay Eli, ¿por qué esas cosas a mí nunca me pasan? -se quedó embobada mirando la pantalla- y bien hecho que está ese hombre ¿eh?... Pero para la próxima, te consigues más almacenamiento y me mandas más contenido. No queremos más sustos como estos.
-Eres terrible Bee
-Por lo que veo... La estadía en Italia está muy buena con muy buenos monumentos para admirar. (guiño, guiño) Un tip: Cuando veas más hombres como Dios manda, sin miedo, pídele que posen para la cámara y sácale fotos, (para mí) como si no hubiera un mañana y si preguntan diles que es para una clase de la universidad.
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Il bel caffè
RomanceElena es una joven de veinticuatro años, que está decidida a perder su virginidad de una vez por todas, por razones personales se muda a italia y empieza a trabajar en el bar cafe de su hermana. Elena nunca se imaginaría que allí en aquel pueblito...