Un Destino Forjado a Fuego.

Capitulo 14: La Realeza Divina.

POV, Normal.

*TAP* *TAP* *TAP* *TAP* *TAP* *TAP*

Los pasos resonaron en el suelo, un grupo de solo dos se abrió camino por los largos puentes. de mármol prístino

Una de esas personas tenía el tamaño de un hombre común, o otro era cuatro veces más grande que un humano normal. Este último estaba envuelto en una armadura dorada, tenía un casco parecido a la cabeza de un león, tenía una cresta roja saliendo de la parte superior del casco y en una de sus manos tenía una lanza enorme.

" ... ".

" ... ".

Hefesto odiaba ese silencio tan incomodo, y lo largo que se hacía la caminata. Sabía que Anor Londo era grande, pero esta era la primera vez dentro de la ciudad. Y ahora podía ver la enormidad de todo era demasiado. Inclusive para un capital principal.

El mismo puente parecía lo suficientemente grande como para dejar que dos Tanques de Asedio pasen sin muchos problemas, y también pareció lo suficientemente resistente como para que una nave de tipo Hércules pueda aterrizar encima.

*¡Wumm~!*

Viendo arriba, Hefesto ve a un gran ser alado y definitivamente no era un ave. Era un ser con cuerpo humanoide, manos y brazos que sostienen una alabarda. Piernas que terminan en patas de bestia, una larga cola finalizada en un hacha. Su cabeza era difícil de describir, pero parecía tener un casco que cubría su cara.

Era una maldita Gárgola, uno los Jefes que cuidan la campana en Dark Souls 1. Era la octava vez que Hefesto lo veía, no sabía si era para intimidar o la criatura simplemente estaba aburrida.

"No me sorprende, aquí todos son 'reales' y conscientes. Esta Gárgola y la otra, deben de servir directamente a Gwyn". Penso Hefesto durante un momento, sintiendo las implicaciones profundas de eso. Ya habia predicho o pensando algunas cosas como estas, pero ahora eran casi seguras."Al menos espero que sean solo dos, quien sabe cuantas cosas más le sirven a Gwyn o su familia".

*¡Tum!*

Hefesto se exalta por el repentino sonido, Ornstein golpeo lanza contra el suelo. Cuando el herrero miro, noto que ya estaban a las puertas de una gran estructura. Que seguía los mismos diseños góticos de todo Anor Londo.

" ... ". Viendo al Matadragones dorado, este solo señalo con su cabeza la entrada, indicando que entre.

Hefesto solo obedece. No tenía opciones, no era bueno improvisando en situaciones con tanta presión en su cuello.

Y que todas la almas que ahora habitaban dentro de él estuvieran en pánico no ayudaban en nada.

*¡Ping!*

[¡Has Recibido una Nueva Misión!]

-Sobrevive a tu encuentro con el Rey Gwyn 0/1-

[Recompensas Bloqueadas Actualmente]

Bueno, eso pone las cosas más ... interesantes.

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POV, Hefesto.

"Que suerte de mierda". Pensé, sentía un sudor frío bajando por mi espalda. Extrañaba mi Divinidad ahora.

"Así que, tu eres el que ocupa las ruinas en las afuera". Preguntó falsamente un hombre grande, alto e imponente. Usaba una corona de oro y estaba sentado en un trono. Su barba era grande y tupida, parecía un viejo sabio.