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Se despertó de golpe luego de que una nueva ola de calor golpeara su vientre, producto de ello comenzó a sacarse las prendas para disipar el calor que producía su organismo, es aquí donde Jaehyun iba entrando hacia su habitación con suma preocupación

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Se despertó de golpe luego de que una nueva ola de calor golpeara su vientre, producto de ello comenzó a sacarse las prendas para disipar el calor que producía su organismo, es aquí donde Jaehyun iba entrando hacia su habitación con suma preocupación.

El omega sintió su presencia e inmediatamente se abalanzó hacia él en un abrazo tratando de sentir su olor lo más que pudo. Taeyong tenía los ojos color miel, indicando que su omega seguía ahí controlando su cuerpo. Sin embargo, Jaehyun estaba consciente y no recordaba mucho de lo que sucedido, más que las vagas imágenes de su papá preocupándose por él y el momento en el que llegó a casa con el omega dormido entre sus brazos.

- Por favor cálmate, sé lo que quieres, pero no voy a ceder. No esta vez, apenas nos conocemos - mencionó Jaehyun tratando de zafarse de los brazos del omega para evitar que su lobo salga y las cosas empiecen a salirse de control

- Alfa ~ tómame, ¿si? - rogó el omega rozando su rostro contra el pecho del más alto - Alfa~ me duele mucho, hazme sentir bien

-Taeyong estás cegado esto no está bien

El más bajito se limitó a no responder, así que liberó más feromonas para despertar al lado animal del chico, este aroma le indicaría al alfa que aquel omega que tenía en frente es fértil y está listo para procrear.

Es así como el lobo de Jaehyun, deseoso por salir, logró tomar control del cuerpo humano y dejó totalmente cegado a su lado más racional.

- ¡Alfa! - chilló el omega al notar como los ojos contrarios habían cambiado a un rojo intenso, dando a entender que era ahora el alfa quién estaba controlando aquel cuerpo humano - Te extrañé tanto

- Yo también, mi pequeño omega - Jaehyun tomó suavemente el mentón del más bajo y empezó a besarlo, siendo inmediatamente correspondido por el contrario

Entre besos, la pareja se dirigió a la cama de la habitación de Jaehyun, y este no tardó en posicionarse encima de Taeyong cuidando de no aplastarlo, para luego seguir besándolo.

El alfa quitó la remera que tenía Taeyong con suma desesperación con la sed de acariciar la suave piel de aquel chico de mirada dulce.

Ante el toque, el omega gimió, ya que pudo sentir cómo su piel se erizaba. El más alto se sentía embelesado al notar que las mejillas de su compañero estaban rosadas, sus pupilas yacían dilatadas y sus labios se encontraban ligeramente entreabiertos, una total maravilla que solo él podía disfrutar en aquel momento.

El omega quitó la remera de aquel chico, a quién ya veía como su alfa, y no pudo quedar embelesado por la belleza del cuerpo al que solo vio una vez hace unas horas. Posó su mano en el marcado abdomen una vez que la prenda estuvo completamente fuera de él.

El alfa daba cortos besos por el cuello de Taeyong haciéndolo jadear y gemir por los toques en aquella zona erógena.

Pronto quitaron el resto de sus prendas, quedando completamente desnudos a la vista del otro.

Sus miradas reflejaban deseo y amor uno por el otro, y no era para menos aquellos destinados no se habían encontrado en siglos así que disfrutarán esa nueva oportunidad que la luna les estaba otorgando.

El alfa trató de acercarse para besar nuevamente la boca de su amado y justo en ese momento sus miembros se rozaron por accidente, en consecuencia el omega abrió la boca para dejar escapar un gemido agudo.

Es así que, Taeyong atrajo del cuello a Jaehyun para besarlo rozando una vez más sus entrepiernas, logrando que el omega jadee y el alfa suelte gruñidos complacidos por aquel acto.

- Te quiero de-dentro mío, po-por favor - rogó - No puedo esperar m-más - Taeyong sentía que su cuerpo estaba quemando y el único que podía apaciguar aquella llama de deseo, era nada más ni nada menos que Jaehyun

Es así que, el alfa concentró toda su atención en la entrada perfectamente lubricada para poder recibirlo, por lo que no tardó en alinear la punta de su pene, adentrándose en el cuerpo ajeno de una sola estocada.

En ese momento, el omega sintió una sensación de plenitud y felicidad, aunque un poco de dolor debido a la fuerza ejercida por su compañero.

La vista que tenía el más alto lo excitó aún más pues frente a él se encontraba el hermoso quién se aferró a sus piernas en la cintura en la cintura ajena

El alfa daba fuertes estocadas dentro del cuerpo del omega, estaba muy descontrolado por el celo del contrario, por lo que sus estocadas no tardaron en ser cada vez más profundas, tanto que el pequeño omega podía notar el pene de su pareja se notaba bajo vientre plano.

Por un muy buen tiempo, la habitación se encontró en una sinfonía de gemidos, gritos, gruñidos y golpes entre la desnuda anatomía de aquella pareja de amantes.

El omega al fin se sentía completo y feliz al sentir como aquel pedazo de carne podía ocasionar las sensaciones que por siglos no había sentido.

De la misma forma, el alfa se sintió pleno al lograr encontrar esa pieza que le faltaba a su corazón y a su alma.

Por fin estaban juntos.

- Alfa~ más~ - rogó Taeyong en medio de su delirio

Y fue en ese preciso instante cuando el más alto empezó a embestir mucho más rápido provocando que aquel pedazo falo alcanzaba perfectamente a tocar su útero, causándole dolor.

Sin embargo, el lado animal del omega deseaba tanto a los cachorros de su alfa que aguantaría ese y cualquier otro dolor.

Unos minutos más y los movimientos seguían, Jaehyun era todo un animal y parecía no cansarse de penetrar el pobre agujero del omega.

- Alfa~ estoy a punto de correrme - anunció Taeyong agitado y lleno de sudor por el caluroso momento en el que se encontraba.

- Espera un poco más, mi pequeño cachorro. Mi nudo no tardará en formarse - El alfa besó tiernamente los labios suaves de su amante y siguió moviéndose dentro de él dando estocadas lentas, pero certeras, provocando gritos en Taeyong

Unos minutos más tarde, el nudo empezó a expandirse dentro del omega, mientras los caninos de Jaehyun crecían.

Al notar aquello, el omega ladeó la cabeza hacia un lado, dejando a la vista del alfa su blanquecino cuello.

Jaehyun no espero más y se acercó dispuesto a perforar la suave piel de su omega.

Y sucedió...

Le había dado su marca.

Taeyong no pudo evitar soltar algunas lágrimas por el dolor que sentía en ese momento, entretanto el alfa no tardó demasiado en quitar sus caninos para empezar a lamer la herida recién formada para evitar infecciones o algo parecido.

Ahora aquel enlace ya se había dado y no había vuelta atrás

El más bajo no tardó en sentir dolor cuando el nudo se crecía aún más, por lo que no pudo evitar clavar sus uñas en la espalda de su alfa para poder canalizar todo lo que estaba sintiendo en ese momento.

- Mi omega, mío y solo mío - repitió Jaehyun besando el cuerpo de aquel omega que gemía de bajo de él.

- Solo tuyo, alfa

Taeyong no tardó mucho en correrse sobre su abdomen, mientras sentía que el nudo de Jaehyun comenzaba a crecer dentro suyo, estirando cada vez más el orificio de músculos que tenías atrás y aquello dolió mucho más que cualquier cosa.

- Alfa, duele~ - si bien el omega había recibido a su alfa en otras vidas, siempre tenía el mismo problema, y es que nunca se pudo acostumbrar al nudo.

- Respira y relájate, mi amor - Jaehyun repartió suaves besos en la nuca contraria tratando de apaciguar de alguna manera el dolor de su pareja - No tarda en bajar, cariño

Cigarettes et cerisesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora