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Las esperanzas se estaban perdiendo, la castaña no podía encontrar al gemelo menor por más que deambulase por toda la academia. Aún estaba muy enojada con Amane, pero de apoco lo iba "perdonando". Se veían de vez en cuando en el límite de _____, pero ella no quería estar siempre con él, quería encontrar a su chico tan infantil y tierno que le alegraba las mañanas con solo verlo, pero ya no sabía donde buscar. Según Amane ellos ya se habían encontrado varias veces en esos más de cincuenta años, pero nunca sabia el paradero exacto de Tsukasa.

Se detuvo en el patio del colegio, se sentó debajo de un árbol y con nostalgia comenzo a recordar cosas que había hecho en vida con aquellos dos gemelos.

💫cap2 time is gold and by your side a moon of diamonds.💫

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Tsukasa estaba muy frustrado, las notas no le salían bien y el profesor no paraba de regañarlo. Él iba a clases de piano, a obligación por que no le gustaba nada ese instrumento, y hoy, gracias a estas clases que no quería tener, Amane estaba pasando tiempo con _____ y eso le ponía de los pelos. Sin la promesa ahora podría tener a la castaña para él solo, pero eso también implicaba para su hermano. Los celos se apoderaban de su cuerpo y de su mente, siendo que no se podría concentrar.

A la salida de esas clases el profesor le contó a su padre lo mal que lo había hecho ese día y Tsukasa se tuvo que aguantar todo el camino hacia su casa siendo regañado por su padre.

Por otro lado Amane y _____ estaban mirando una película, de hecho las tardes solían ser de Amane y ella solamente, ya que Tsukasa casi siempre tenía clases de piano, muy pocas veces iba a casa de _____ y esto hacia que Amane pase mucho tiempo con ella al no querer quedarse solo en casa.

Una vez terminaron de ver la película charlaron por un rato hasta que Amane se fue a su casa.
Su madre había muerto hace ya varios años por un incendio en la casa roja y su padre era muy estricto con ellos, ha llegado a golpearlo por no sacarse una nota mayor a 87 puntos.

Los gemelos dormían en habitaciones separadas y casi nunca entraban a las del contrario, no lo necesitaban, pero esta vez Amane necesitaba ir a buscar a su hermano para cenar. El mayor entró en la habitación del menor y quedó impresionado; su cuarto era más ordenado que el suyo apesar de ser el más inquieto, pero lo que lo impresionó no fue eso, sino que tenía un mural entero dedicado a fotos de _____ y Tsukasa, fotos en las que ni siquiera Amane se acordaba que se habían sacado... Fotos en las que él no salía, en momentos donde él no estuvo. Fruncio el ceño levemente.

Tsukasa estaba tarareando una canción mientras pegaba otra foto al mural. Una de su amiga, una especie de selfie con una camara instantánea que tenían en el club de fotografía.

— ¿T-Tsukasa..? –lo menciono incómodo y ciertamente celoso, no tenía ninguna foto con la chica que no sea de niños, y por sobre todo la gran mayoría de fotos del mural era cuando ellos estaban solos, sin él.

— ¡Oh, Amane! –corrió a abrazarlo.

— ¿Q-Que es todo eso?

— ¿Mm? Pues fotos Amane, ¿acaso no ves bien? ¿Necesitas lentes?

— Sabes muy bien que no me refiero a eso. –el menor solo achino los ojos y sonrió inmensamente.

— ¡Chicos se enfría la comida! –grito su padre.

Amane no pudo dormir esa noche, no sabía por que le molestaba tanto que Tsukasa tenga tantas fotos con ella, tampoco sabía el por qué tenía un mural dedicado a ella. Estaba inquieto en su cama, no podía encontrar una posición cómoda para dormir y su mente le hacía pasar un mal rato.

☆Es una promesa☆ [Hanako x Tsukasa x Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora