The butterfly effect [HunHan]

002

Sehun había dejado de sentarse atrás solo por sentarse junto a Luhan adelante, las horas se pasaban como minutos cuando estaba a su lado. Apesar de aun mantener su apariencia hostil con todo el resto de la clase con Luhan habia una pequeña chispa imperceptible para ellos.

Ya casi no se desconcentraba en clase si no era regañado por Luhan y lo veía inflar sus mejillas. Cuando no entendía algo le pedía que le explicara y es que mientras le explicaba un problema básico en química se quedó perdido en sus facciones perfectas, su piel tan nivea y sus labios, sus labios jugosos perfectamente humectados.

— ¿Hola? ¿Estas escuchándome? — Preguntó Luhan con sus mejillas un poco rojas ya que le ponía nervioso la mirada tan intensa de Sehun. — Oh Sehun, no volveré a explicártelo nuevamente... Préstame atención.

— Toda mi atención esta en tí. — Le dijo agarrando suavemente una de sus muñecas ya que había previsto que este le daría un pequeño golpe de descargo por estar jugando con él. — No se si creeras que soy muy directo, pero no me había fijado en lo lindo que eras.

— Aish ya deja de jugar. ¿Me tendrás toda la mañana intentando explicarte esto? — Luhan respondió con un ligero puchero en sus labios intentando ignorar lo que este le decía, pero era claro que su corazón se aceleraba cuando Sehun le hablaba de esa forma. — Respeta mi tiem... — No pudo terminar esa frase ya que su compañero había sido lo suficientemente rápido como para robarle un pequeño besos de sus labios. Sehun simplemente le sonrió como un sin verguenza mientras el rostro de Luhan se volvía rápidamente en un tomate de la verguenza.

— Bueno, puedes continuar. Prometo no distraerme esta vez. — Luhan podía ser inocente, pero no era nada tonto por lo que después de aquel acto, no se iba a quedar con los brazos cruzados. De manera suave puso sus manos en la camisa de este y lo jaló con delicadeza nuevamente uniendo sus labios con los suyos en un beso un poco lento y largo. Tenía tantas ganas desde hacía tiempo por lo que el beso no tardó en volverse ligeramente acalorado.

Si tuvieran que contar las veces que los botaron de la biblioteca no podrían recordarlo, pues aquella vez tampoco fue una excepción. Apenas la bibliotecaria los encontró besándose fueron expulsados, y amenazados con presentar una queja al rector por comportamientos inapropiados.

[. . .]

No había manera de definir esa relación, pues al inicio solo estaban juntos por apoyo mutuo. Las cosas habían escalado hasta el punto en el que ni Sehun ni Luhan tenían idea de que eran. Unían sus labios fugazmente en un momento y al siguiente simplemente se la pasaban estudiando o investigando cosas por su cuenta. A veces iban a la piscina local en donde Luhan aprendía a nadar a un ritmo acelerado.

De todos modos, no les importaba tener ningún título mientras pudieran seguir juntos.

Aquella tarde Sehun se encontraba descansando en su dormitorio mientras miraba Instagram, le parecía increíble como Luhan no tenía redes sociales. Definitivamente es un nerd sin vida social pensó para si mismo, cuando escuchó un par de golpes conocidos en su puerta.

Al abrir se encontró con ese pequeño de ojos brillantes, y como de costumbre este entró sin preguntar si podía pasar y se sentó en su cama.

— Hoy... Varios de nuestra sección... Vinieron a quejarse conmigo. — Le dijo cruzando las piernas dándole una mirada un poco acusadora, pero al instante cambió esta por una sonrisa. — Dicen que ya no soy apto para ser el delegado, que no cumplo bien mis funciones porque olvidé pasar un comunicado del profesor de fisiología. Pero bueno, también excusaron mi falta de compromiso con mis compañeros... Dijeron que todo era tu culpa. — Extendió su mano al otro que lo veía confuso y lo jaló a sentarse a su lado. — Dijeron que como somos novios, yo he perdido la cabeza y optaron por informarle a los profesores para hacer un cambio de delegado.

— Vaya, entonces... Lo siento mucho.— Comentó Sehun antes de que el dedo índice de Luhan acabara sobre sus labios silenciándolo.

— No me importa, nunca me gustó ser delegado. No me gustaba tener que preocuparme por todos a fuerza y hacerme cargo de tantas quejas. — Ágil como un felino se subió sobre las piernas de Sehun sentándose a horcajadas sobre él.— Me gusta el cambio que puedes llegar a ocasionar con el simple hecho de existir.

— Pensé que vendrías a decirme que me odias y luego estudiaríamos o algo por el estilo. — Confesó Sehun incorporándose un poco jalando a Luhan de las caderas, pegándolo más a su cuerpo. Se acercó a sus labios pero este desvió el rostro de manera juguetona. Sehun dió una risa suave y dejó un pequeño beso en su cuello y otro en su clavícula.— Bueno, ¿Ahora cual es el plan?

—¿El plan? No lo sé, pensaba en que quizás tu y yo... Podíamos seguir divirtiéndonos juntos. — Le dijo en un susurro suave antes de darle un pequeño beso en sus labios que terminó con una mordida. — Ahora solo me preocuparé porque Oh Sehun apruebe todas las materias con la mejor nota.

— Ahhh.... No me hables de estudiar ahora, cariño. Es domingo en la noche. — Se abrazó más al cuerpo de Luhan escondiendo su rostro en su pecho como un niño.

— Bueno, solo porque hoy es domingo... Podemos hacer lo que tú quieras hoy. — Infló sus mejillas empujando de los hombros a Sehun tumbándolo a la cama mientras lo veía desde arriba demandantemente.

— Quiero una cita. — Dijo Sehun sin rodeos ni ningún pelo en la lengua.

— ¿Una cita? — Luhan se sorprendió increíblemente ya que no tomaba en serio la relación que tenían ¿Que clase de juego era ese? Pensó internamente.

— Quiero salir contigo, sin nada que hacer, sin nada establecido. Quiero una cita normal.— Sehun posó sus manos en los muslos de Luhan recorriéndolos lentamente hacia arriba hasta su trasero el cual agarró sin ninguna verguenza.

El rostro de Luhan nuevamente estaba rojo cuando sintió las manos de su compañero recorrerle de esa manera. Aquella reacción sólo provocó una sonrisa en Sehun.

— Sabes que... No podemos hacer ese tipo de cosas en el campus de la universidad ¿verdad? — Comentó tímidamente Luhan subiendo las manos de Sehun a su cintura.

— ¿Y tú sabes que siempre he violado las reglas de la universidad? — Preguntó de manera sarcástica levantándose con Luhan en brazos cambiando se posición dejando a este acorralado contra la cama mientras se acercaba a besar sus labios en un beso un poco fogoso. Sus caderas se encajaron por la naturaleza de aquella posición y Luhan dío un pequeño salto en su lugar al sentir "algo" en su trasero. Definitivamente Sehun había perdido la cabeza si planeaba hacer algo así en los dormitorios de la universidad.