》Dedicado a ▶▶▶ DayGaspar 《
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La batalla seguía. Ellos no querian creer en lo que estaban viendo.
Para cada uno era algo distinto. Su amiga. Su compañera. Su aliada. Su sensei.
Ella estaba en la batalla si. Pero no hacia lo que una amiga, compañera, aliada o sensei, haría.
Ella estaba del otro bando. Ella estaba protegiendo a los Akatsukis.
Sus intentos por salvar al Kazekage. Gaara. Estaban fallando. Aquel pelirrojo y aquel rubio no eran nada débiles. Y Ella tampoco lo era. Las cosas se le complicaban a los de Konoha.
Todavia estaban algo shokeados por la aparicion repentina de la pelinegra. Hace un año, para ser exactos, no sabian nada de ella. La utima vez que se había ido era a una simple misión que solo duraba una semana. Pero nunca volvió. No supieron nada. Pareciera como si la tierra la hubiera tragado.
Al principio estaban sorprendidos y contentos, por fin la volvían a ver. Pero luego la sorpresa fue mayor cuando esta defendio al pelirrojo y al rubio.
Ella ya no era una de ellos...
- ¿¡PORQUE ATSUMI-SENSEI!? ¡USTED ERA UNA DE NOSOTROS!- Gritaba el rubio de vestimenta naranja y negro. Por su cara se podria decir que le faltaba poco para ponerse sentimental.
Deidara se habia sobresaltado al escuchar el nombre de su ahora compañera en bocas de uno de konoha. Kakashi quizo aprovechar el descuido de aquel rubio con coleta y atacarlo por detrás. Pero eso no paso. Atsumi lo habia golpeado por un costado y lo habia atrapado en un genjustu.
El peliplata estaba amarrado a un árbol, por mas que intentara soltarse no lo lograba.
- Vaya, ¿pero que tenemos aqui? ¡Bha! Pero si no es más que un idiota. Cobarde.- dijo la pelinegra hacercandose más y más al ninja copion.
- /¿Porque tu... Atsumi... que sucedió? / - Kakashi no decia nada. Solo estaba tratando de decifrar en su pensamiento el ¿Porque? De lo que hacia Atsumi.
- No lo pienses demasiado idiota - expuso la ninja poniendo un kunai en el cuello del peliplata. - Todos sabemos que en algún momento el amanecer caerá.
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- ¿¡Como es posible eso!? ¿¡Ella!?- Exclamó la sannin.
- Si. Tsunade-sama. Ella esta con los Akatsukis.- Repitió por segunda vez el ninja copion.
- ¿Y se supone que nos quedemos de brazos cruzados mientras ella se convierte en una... - No termino la frase. Solo solto un suspiro muy profundo.
- Lady Tsunade...- Hablo la pelinegra con la cerdita en brazos. - ¿Que haremos?
- No lo se Shizune. No lo sé. Si Jiraiya estuviera aquí, él sabria que hacer con aquella mocosa. - Contesto la rubia de coletas con el ceño fruncido.
- ¿Llamas mocosa a alguien que tiene la edad y fuerza suficiente para patearte el trasero, Anciana?
Aquella voz los dejo sorprendidos a los tres presentes que se encontraban en el despacho de la quinta hokage. Sus vista fueron hacia la ventana de donde provenia aquella voz que conocían muy bien.
- ¿Atsumi? - Shizune estaba sorprendida. Aquella chica a la que habian dado por muerta, estaba allí de pie junto a la ventana de brazos cruzados con aires despreocupados.
- No. Soy un fantasma. Claro que soy yo Shizune. No hagas preguntas tontas. Ademas...- No pudo terminar de hablar ya que un fuerte golpe se escucho. Unos puños se estrellaron en el escritorio de la sannin. Siendo esta misma la que golpeo, fulminando con la mirada a Atsumi.
