perfectos imperfectos

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Iba de camino a la casa de Ivan ya que este no se digno a contestar mis mensajes ni llamarme.

Cuando llegue golpee a la puerta con la esperanza de que abriera.

Pase como 8 minutos esperando hasta que recordé que yo tenia una llave de su casa.

Cuando abrí la puerta no pude creer lo que estaba viendo.

Estaba todo desordenado.

Vodka por todos lados.

La navaja que nunca olvidaría.

Y un Ivan acostado en posición de estrella en el suelo.

No me malinterpreten.

No estaba muerto, solo estaba ahí.

Aproveche que estaba durmiendo para revisar sus muñecas.

Esta ves no tenía en las muñecas nada más.

Había en todo su cuerpo.

Y apestaba a vodka.

Quería hacer algo por el pero que podría hacer.

Al notar que estaba todo muy desordenado opte la opción de ordenarle la casa y prepararle algo de comer.

Si era la última ves que pretendía hacer algo por el no iba a dejarlo ahí.

3 horas después

Recién termine de ordenar.

Estaba preparándo capelletinis cuando Ivan despertó.

Se despertó como un gato que durmió todo el día.

Se veía adorable.

Traía una polera blanca que le cubría hasta los muslos y tenia el pelo demasiado desordenado.

Me acerque para ver como estaba.

-Hey, estas bien?- queria sonar amigable para que no me apartara.

-Que haces aquí?.

Estaba muy adormilado y sonó muy adorable.

-Venía a verte y como vi tu casa así la ordene un poco.

Se había levantado sin mirarme y se fue directamente al baño, no sin antes agarrar la navaja.

Suspire pensando que fue a cortarse de nuevo.

Veía en mi mente a Ivan sentado en el baño cortándose hasta la pija.

En ves de eso lo vi limpiando la navaja y sus muñecas con alcohol desinfectante.

Tenia el pelo desordenado y los ojos medio cerrados.

Se veía muy tierno así.

Me mordí los labios mientras el seguía con su tarea.

-S-Son nuevas?- le pregunte en referencia a los cortes.

El miró sus muñecas de forma dolorosa.

-Si... antes de que llegaras paso, olvidé limpiar los cortes... si no se desinfectante.

-Eres adorable amigo.

Pude notar un sonrojo y como apretaba más sus labios.

Pude percibir que se ponía nervioso.

-Que?, te pongo nervioso?.

Me acerque mucho más a él.

-Que pasa?.

El apago rápidamente el agua y se alejo de mi topandose con la pared

-estoo, ehmm ah, v-vamos a comer a-algo?.

Si había algo que podía distinguir con facilidad de Ivan era la dislexia y los nervios.

-Bien, vamos.

Le respondí con dulzura.

-Carre!.- Estaba alto alterado Ivan, se le notaba en la voz.

Me di vuelta para verlo.

Y el se abalanzó sobre mi a besarme.

Pude sentir la luna apenas mis labios tocaron los suyos.

Era tan perfecto, era como si estuviéramos destinados el y yo a estar juntos.

Nuestras bocas se movían en un vals lento.

No era ni atrevido, ni tierno.

Estaba en la altura perfecta.

Cuando se alejo de mi nuestras narices podían sentir la respiración de ambos.

-Emhh, lo si-siento.

Lo agarre de las mejillas coloradas que tenia y lo apoye en la pared para seguir besandolo.

Fue tan perfecto.

Nosotros éramos perfectamente imperfectos.

"Irme lejos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora