Llamada/pt2/

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Como putas se fue todo a la puta mierda de nuevo.

Estaba llorando, en el baño.

Dudando sobre todo y sobre mi.

Estaban entrando llamadas desde las 2:19 de rodrigo y de tomas quienes solo llamaban como nunca.

No me parece que esto sea justo, si yo no volví a ver a rodrigo porque el seguía llamando eh insistiendo.

Esto es tan injusto.

Quería parar de llorar pero no podía, estuvieron llamando desde las 2:19 de la mañana y ya son las 3 putas de la mañana.

Y siguen llamando...

Estando ya harto decidí contestar una llamada valiéndome pija que estuviera hecho mierda.

-Ivan?... estas ahí?.- mi voz se rompió en llanto dejando escucharse notablemente como lloraba.

-Quiero ir a verte Ivan.- Sus palabras me caían como espinas en la garganta y aun mi boca sin poder formular una sola palabra.

-Puedes venir cuando quieras rodri...- Por pocos segundos el pequeño agujero de cariño que tenía mi destrozado corazón se abrió.-Te quiero y no quiero perderte.

Me sentía mal y bastante cansado.

Me senté en el piso de la sala con la vista en blanco sin esperar realmente que rodrigo venga a verme, es decir.

Porque el querría verme.

Luego de todo lo que ha pasado porque el tendría la molestia de venir a verme.

Mire nuevamente los cortes que tenia en mis manos pero ya sin estar orgulloso, quería abrirlas.

Es decir?, que es lo peor que pasaría?.

No quería...

No quiero...

No debería...

Aun así fui al baño a buscar las pequeña cuchilla que guardaba.

No...no debería, guarde nuevamente la cuchilla.

Si tienes problemas no hagas esto, solo llama a alguien para que te ayude.

Me quedé quieto mirándome al espejo preguntándome que hacía con mi vida, estaba hecho mierda y seguía fingiendo que estaba bien, mintiendo, mintiendome a mi mismo.

-Este no es Ivan buhajeruk, y mucho menos es Spreen.- y era verdad, Ivan es alguien amable que se toma las cosas encerio, Spreen es un personaje divertido que flashea todo.

Si no soy ninguno de ellos quien soy?.

Moví mi brazo por inercia para abrir el cajón mientras veía las lágrimas brotar por mis ojos reflejado el el espejo.

Saque la cuchilla y sin pensar la posicione sobre mi cuello, quería hacer un leve corte a ver si con eso podría desahogarme de alguna u otra forma.

Ya dispuesto a hacer el corte la puerta del baño se abre.

Tal ves...

Tal ves no debí hacer tanta presión.

Y tal ves tampoco debí mover muy rápido la cabeza....

"Irme lejos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora