War is not Over (Partypooper)

Nivel 11 - La Ciudad Interminable

Quito la mirada cuando me voltea a ver y me sonrojo. Su aroma corporal se quedó adherido a mi blusa, llegaba a apreciarlo cada vez que me acercaba a a ella. Él nada más está ahí intentando volver en sí.

-¿Estas bien? - le pregunto colocándole una mano en el hombro. No sé porque me encuentro tan nerviosa de estar a su lado. Él se pone de pie y se sacude el polvo en sus pantalones, me da una mano para que yo también replique sus acciones,la tomó sin pensarlo y lo copio sacudiendome mi pantalón.

-¿Cuál es el plan?

-Hay que ir al nivel 11, primero hay que buscar cualquier camino.

Yo asiento entendiendo la situación, nos ponemos manos a la obra y caminamos a través del trigo buscando algún camino, no sé cómo deberá ser el camino, pero me da miedo perderlo de vista así que estoy todo el tiempo casi pisando sus talones mientras él sí está buscando. Aprovecho para apreciarlo mejor, observo lo alto que es y como su cabello se mueve de un lado para el otro mientras caminamos, veo como sus manos van al zipper de su abrigo y lo abre, la verdad si esta empezando a hacer calor, quisiera verlo de frente, pero me limito a verlo de esta forma, noto como una gota de sudor se desliza por su cuello, continúa con la piel morena, al parecer. Voltea a verme de la nada interrumpiendo mis pensamientos, aprovecho la oportunidad para verlo mejor, lleva una camisa negra con mangas cortas, sin ningún estampado, su cuerpo no es no es muy delgado, pero tampoco muy musculoso, aunque se nota que hace esfuerzo físico, bueno, aquí todo mundo lo hace.

-¿Me estas escuchando? - me pregunta interrumpiendo de nuevo mis fantasias locas.

-Err... Disculpa, todavía vengo un poco mal de cuando llegamos a este nivel -miento y descaradamente la verdad, me daria vergüenza admitirle que es lo que pienso realmente.

-Lo hemos encontrado - me dice mientras aparta un poco de trigo al frente y nos topamos con un pequeño camino de tierra, caminamos hasta estar caminando en el y noto que cada vez se va haciendo más grande hasta que se pierde a la distancia.

-¿Hacia dónde debemos ir?

Jacob observa ambos lados y camina hacia la derecha, yo lo sigo sin pensarlo. Veo que Jacob tiene como un tipo de cordón en la mano y se lo amarra en la trabilla de su pantalón, luego de dirige a mí, colocándolo de la misma manera. Quedando los dos amarrados. Yo lo observo con duda de lo que esta haciendo.

-Para no perdernos cuando lleguemos al otro nivel - me dice respondiendo a la pregunta que no hice, pero me imagino que por mis facciones lo comprendió. Le sonrío, creo que él me devuelve la sonrisa y luego procedemos a continuar.

Trigo, trigo y más trigo, no sé por cuánto tiempo hemos caminado, pero se me ha hecho eterno y solamente veo el mismo panorama, el mismo lugar donde estamos caminando, no ha cambiado del nada, creo que hasta me estoy empezando a resignar que esta manera de salir no nos va a llevar a nada, pero veo a Jacob muy confiado, así que intento hacerle platica.

-¿Ustedes saben cuando nacieron o algo así? - pregunto curiosa, una pregunta tonta, pero para pasar el rato.

-Sí, nosotros sabemos, pero no lo celebramos como ustedes.

-¡Cómo que no! - exclamo indignada, significa que no ha tenido una fiesta nunca.

-El tiempo aqui es relativo, no sé sabe cuando pasan los días o en qué año estamos, además dependiendo de dónde estemos todo coincide, pasado, presente y futuro. Yo ahora soy el mismo que fui y el mismo que seré.

Wow, que profundo, pero intento ser empatia y desviar la conversación.

-Yo tengo 22 años humanos, aunque no sé cuanto tiempo he estado encerrada aquí. Yo te calculo unos 26.

-¿26? - se ve dudoso - Sí, puedo creer que tengo 26 - escucho una pequeña risa, creo que es la primera vez que lo escucho reír y mi felicidad se desborda. Para de caminar y como siempre lo sigo.

-Llegamos - dice impresionado, observo a mi alrededor y ya no es el campo de trigo que antes nos encontrábamos, de hecho, el único rastro que anduvimos ahí son mis zapatos llenos de tierra seca. El lugar dio un giro completamente, ya no es el campo, es en medio de una ciudad, con esos edificio es gigantes, pareciera como si estuviera en el centro de Nueva York.

-Es increible - dijo sorprendida y observo a Jacob, creo que esta igual que yo de asombrado.

-Nunca había estado en este nivel.

Me asustó un momento ¿eso quiere decir algo malo?

-¿Eso es algo malo?

-Se supone que este es un lugar seguro, hasta hay personas viviendo aquí -dice mientras continúa caminando, estoy sorprendida como parecen haber tiendas del frontroom y restaurantes. Observo a un restaurante japonés, de esos que aparecen en los animes que tiene una isla pegando con la calle y es completamente abierto.

-¿Quieres comer algo japonés? - me pregunta Jacob sacándome de mis pensamientos, yo asiento, él toma mi mano dirigiéndome al lado. Siento como su toque caliente casi traspasa mi piel, se siente como una chimenea en invierno. Jacob ingresa y yo me siento en las sillas altas de afuera mientras veo que esta totalmente equipado.

Me rio cuando veo que Jacob saca uno de esos gorros y delantales de chef, se los coloca, se ve tan adorable que mi corazón se derrite.

-No sé cocinarlo, pero voy a seguir este libro de recetas -dijo mientras abría un libro en un idioma sumamente extraño, comenzó a cocinar, la verdad no podría definirlo porque no conozco ni la mitad de cosas que puso, pero sé que estaba haciendo un tipo de sopa con pelotitas blanca adentro. La verdad yo solo conozco el ramen y esto no parece nada a eso, pero no me importa me pierdo en verlo cocinando. Que hombre.

-¡Listo! - exclama feliz y me saca de mis pensamientos, huele tan deliciosa que no espero ni que llegue a mi lado para comenzar a comer. Siento los sabores tan diferentes explotando en mi boca.

-Esto está maravilloso - digo sorprendida volteando a ver a Jacob que se encuentra a mi lado. Mi boca cae al verlo comer tranquilamente sin la máscara. Como dirige la cuchara a sus labios y sorbe sin hacer sonido la sopa, sus rasgos inclusive se ven hermosos de medio lado. Sostengo el plato con fuerza, lo que no quería sucedió, creo, creo, que me gusta...