𝐋𝐞𝐭𝐭𝐞𝐫𝐬 『ˢᵘⁿᵏⁱ』

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Sunghoon lo soltó con brusquedad una vez llegaron a su casa, murmuraba maldiciones en tono bajo y él solo se quedó en el sofá sin saber que hacer o decir para que se calmara pero si de algo estaba seguro, es de que no era la persona indicada para decirle que estuviera bajo control.

— Me lleva a la-.. ¡Tú!— lo señaló con el ceño fruncido, acercándose hasta él con enojo y Sunoo quería llorar porque tenía miedo ya que nunca lo había visto tan enojado— No te importa el tiempo que yo desperdicio en tí. Quedamos en que dejaríamos esos errores de lado pero no..— negó con una sonrisa distorsionada, luego se acercó para tomar su brazo con fuerza, sacándole un quejido el cual ignoró—Sabes muy bien lo que hicistes así que dime de una vez, Sunoo. ¿Acaso ya no me quieres? ¿Porque tienes que hacer esto sabiendo que soy tu novio? ¿O solo soy un títere para tí al igual que él?

— N-no, s-suéltame.— balbuceó con una mirada suplicante por que las uñas del pelinegro se habían clavado en su piel.

Lo soltó a duras penas y con los ojos cristalizados porque él de verdad quería a Sunoo y lo que estaba haciendo le afectaba en demasía. Se dió vuelta para cruzarse de brazos, sintiendo un nudo formándose en su garganta.

— No es lo que pensabas.

— ¿Y la vez que los vi abrazarse en el patio de su casa, tampoco es lo que yo creí? ¿O cuando te desapareciste todo un día con él? Solo por que eres un berrinchudo que quiere ser el centro de atención en todo.

— Ya te lo dije.— rodó los ojos con cansancio— ¡Tu eres el único que se forma un escenario en su mente!

— Sunoo, decídete de una jodida vez porque no me gusta andar con rodeos.— se acercó hasta él para obligarlo a que se levantará, tomando su muñeca— ¿Es él o yo?

Su mente se quedó nuevamente en blanco ante el miedo que embarcó sus sentidos. Mordió su labio inferior para observar los ojos fríos pero decepcionados del más alto y otra vez la culpa invadió sus sentidos.

Tanto tiempo deseando estar con Sunghoon. Tanto tiempo escondiéndose detrás de la mano de Ni-ki con pena a que lo viera y ¿Para terminar así?

Ni-ki..

— Es mi amigo.

— ¿Y porque siento que tú y tu amigo me esconden algo? Se directo conmigo de una vez por todas.— murmuró está vez más calmado pero con el corazón partido— No quiero que un día de estos alguien me diga que vio a mi supuesto novio demasiado cerca de su amigo.— suspiró.

"Te quiero, Sunnie."

"Me estoy cansando de ser siempre tu segunda opción.."

"¿Te he dicho lo bonito que eres?"

"Solo se feliz con Sunghoon hyung."

"¿Acaso ya no me amas?"

Suspiró profundamente, bajo la mirada atenta del chico de cabellos negros que lo miraba ciertamente perdido y decaído.

"Lo siento, Nini."

Se inclinó para dejar un beso suave y dulce en sus labios, subiendo una de sus manos al cuello del chico mientras éste se aferraba a su cintura. Quería saber si los besos con su actual novio causaban ese destello en su ser pero por más que lo buscaba, solo comenzaba a despertar un calor infernal en ambos.

Soltó un quejido bajo en cuanto fue levemente empujado en el sofá antes de que el otro se encontrara encima suyo, guiando sus labios por su nuca para ir bajando por su cuello.

— E-espera-.. Hoonie.— intentó apartarlo pero era casi inútil ya que el mayor tenía más fuerza y era más fácil para él tenerlo ahí, acorralado contra su cuerpo— H-Hoon.— se comenzó a asustar con su corazón latiendo a mil en el momento en que sintió como una de las manos ajenas tanteaba sobre la piel de su abdomen— Sunghoon.. N-no..— otra vez sus palabras fueron ignoradas y no le quedó de otra más que empujarlo lejos de él— ¡Sunghoon!— lloriqueo, abrazando sus piernas encima del sofá.

El pelinegro recapacitó sobre sus acciones y un sonrojo avergonzado inundó su rostro, chasqueó su lengua para acercarse al pelirosa manteniendo una distancia prudente.

— Perdón, me deje llevar.

— N-no importa. S-solo no vuelvas a-..

— Lo siento.— rascó su nuca antes de acercarse poco a poco hasta el más bajo, quien dejó que lo abrazaran pero aún estaba algo tenso— Solo-... Olvídalo.— sacudió su cabeza— Perdón por lo de él... Es que..— apretó sus puños con enojo.

— Ya lo sé.— asiente.

— Sun, si te pide que por favor dejes de reunirte con él, ¿Lo harías?

Entonces Sunoo recordó que no había llegado para hacer eso sino para ser honesto con él. Así que asintió con detenimiento y se giró para otra vez encontrarse con la sonrisa apenada del chico de lunares.

Otra vez olvidando lo que venía a hacer.

— Hoon, Ni-ki es-...

— Por favor, hazlo por nosotros. ¿Si?

— ¿Porque sigues pensando en que tenemos algo?

— Lo vi besarte el día en que creías que yo no estaba aquí.

El mundo de Sunoo se comenzó a desmoronar en pedacitos ante su confesión, apartó su mirada avergonzado y apenado. ¿Como iba a ver a Sunghoon a partir de ahora cuando fue él quien beso a Ni-ki?

— Quizás tus sentimientos también han comenzado a cambiar pero.. Sun, de verdad me gustas mucho y me costaría dejarte ir.— tomó su mano para dejar un pequeño beso en sus nudillos— Quiero estar contigo un tiempo más... Pero si has tomado una decisión, la aceptaré cueste lo que cueste.

— También te quiero..— atinó a decir y fue entonces cuando sintió como los brazos del otro lo envolvían en un abrazo cálido.

Haciendo que se sintiera la peor basura por estar jugando con los sentimientos de los dos chicos que la única culpa que tenían es el haberse interesado en la misma persona.

En la tarde cuando ya se iba a su casa, no pudo evitar mirar a la casa de al lado pero no vio a nadie, cosa que en parte agradeció pero le disgusto porque quería ver al chico ya que Sunghoon fue muy agresivo con él.

Pero escuchó la voz del otro acercarse y no tuvo de otra que dejar un beso en sus labios e irse junto a él, entrelazando sus manos a la par que Sunghoon le decía como le fue en la universidad ese día.

A lo lejos, Ni-ki los veía con una sonrisa triste y Jungwon decía que quería matar a Sunoo por ser un menudo idiota pero Harua hablaba de algo que ninguno le prestaba atención por andar pensando en el chico que fingía estar hipócritamente feliz con alguien a quien dejó de querer.

— Ni-ki, ¿Enserio? ¿No vas a hacer nada?

— No puedo cambiar algo que no me corresponde. De todos modos, yo ya sabía que esto pasaría, Won.

— Chicos..— intentó llamarles para que uno dejara de ser tan terco y dejara de hacer la tarea como si estuviera perfectamente bien y el otro dejara de morder su lápiz fuertemente o se lastimaría la boca.