Limerencia || Universo Ramé

❂ 𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙓𝙄𝙑

Después de aquel fin de semana no quedaba mucho para la audición, así que los días siguientes Minho la paso centrado en sus ensayos, afortunadamente había resuelto casi todos sus problemas, por lo que su mente estaba clara.

Además, estaba siendo animado por todo su nuevo circulo de amigos, Seungmin pasaba a verlo dejándole snacks, Changbin también había pasado un par de veces, aunque luego supo que en realidad estaba ahí por Felix que también había entrado a la academia. Chan era quien más lo acompañaba, incluso se quedaba hasta la hora en que cerraban y lo encaminaba a casa. Se sentía bien estar de esa forma.

Así llegó el día de la audición, como le esperaba dejaron que Chan pasara con él para darle apoyo y Minho antes de presentarse le confesó que todo el tiempo estuvo esperando para que él lo viera, que fue su mayor inspiración para ese baile.

Chan no pudo evitar la forma en que su corazón se emocionó, no podía creer que Minho lograra enamorarlo cada vez más.

La audición fue perfecta, al menos eso sentía el castaño y fue lo mismo que dijo Chan al recibirlo con un fuerte abrazo, Minho creía que quizá lo hizo un poco más que perfecto ya que el rubio no lo soltó por un buen par de minutos.

—Nadie te lo va a quitar, puedes soltarlo —escucharon una voz fácilmente reconocible para ellos.

Minho soltó una risita, mientras Chan apretó más su agarre pegándose más a él. El pelirrojo que se acercaba solo rio.

—Rómpete una pierna príncipe —animó Minho antes de que Hyunjin saliera a realizar su número.

—Parece lleno de confianza ahora, pero hace unos segundos estaba llorando en el baño y ahogándome en un abrazo igual que Chan a ti —comentó Jeongin que se quedó junto al par.

Chan por fin soltó a Minho y ambos observaron el baile de Hyunjin. Minho como era usual estaba encantado con su baile, si Chan era su inspiración para lo que había realizado, Hyunjin era su motivación, de verdad esperaba poder bailar a su lado, ambos tenían que lograrlo.

Después de unos minutos el pelirrojo volvió con ellos con su omega recibiéndolo entre feromonas dulces y relajantes, incluso Minho y Chan se sentían tranquilos y arrullados por ese aroma.

—Dios, no quería admitirlo, pero estaba muerto de miedo —confesó el alfa recuperando el aliento.

Minho revolvió su cabello con una sonrisa.

—Lo hiciste increíble mi príncipe.

Hyunjin no pudo ocultar la sonrisa tímida que le provoco aquello.

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Decidieron ir a comer a un pequeño restaurante, ahora podían descansar de verdad luego de meses llenos de ensayos y estrés.

El lugar que escogieron terminó siendo el mismo donde Seungmin y Jisung habían quedado de verse ese día, el par había pasado mucho más tiempo juntos debido al estado anímico del hibrido. El par no tardó en percatarse de que Minho había llegado, aquello provocando una elevación en la ansiedad de Jisung, que no pasó desapercibida para Seungmin.

—Tranquilo, si no te sientes cómodo podemos irnos ¿sí? —habló el más joven tomando su mano para tranquilizarlo.

Jisung negó, dando entender que estaba bien.

Por su parte, Minho también notó el aroma de Jisung, no podía pasar desapercibido cuando su leopardo aun continuaba algo aferrado a él. Pensó un par de segundos en si acercarse y hablar, no sabía que sucedería, pero al menos quería quedar bien con él y apartar ese amargo sentimiento de su pecho.

—Discúlpenme, necesito ir a hablar con alguien —le habló al trio que ya estaba acomodándose en una de las mesas. Lo vieron con algo de preocupación, pero el castaño les dedico una sonrisa para tranquilizarlos.

Caminó entonces hasta donde ubicó la mesa de Jisung, se plantó frente a él viéndolo de una forma quizá mas dura de lo que planeaba, ya que notó al chico cohibirse.

—Me gustaría hablar a solas con Jisung un momento —se dirigió a Seungmin que después de una mirada a su amigo asintió y se levantó dirigiéndose a la mesa donde antes había visto a Minho.

El silencio se alargó por un par de minutos desde que el castaño se sentó frente a Jisung, no sabía como comenzar y el más joven tampoco sabía que decir, aun así por el bien de esa conversación, empezó.

—Lo siento Minho, creo que no hay excusas para lo que hice y lamento tanto el daño que cause, no era mi intención dañarte, pero fui inconsciente, no pensé en lo grave de mis actos y como estaban afectándote.

Minho lo escuchó atentamente, sintiendo la sinceridad en sus palabras y la tristeza picar en su nariz por el olor a canela.

—Realmente me heriste Han, me dolió que no fueras honesto desde un principio —habló dándole una mirada llena de aquel sentimiento.

Jisung asintió y desvió la mirada.

—Me equivoque, no pude confiar en que lo que crecía entre nosotros fuera más que la ilusión inicial de nuestras feromonas y nuestros animales atrayéndose —aceptó avergonzado. —Después de que pasaste aquel tiempo con Minhyuk, cuando regresaste y volví a verte sin todo eso de por medio, me di cuenta de que pudimos funcionar, creo que fue lo que me dolió, descubrir que tanto lo había arruinado y me asusté, me asusté porque decirte la verdad podía alejarte más de mi...

El castaño negó, aunque saber eso ahora no era consuelo para Jisung, solo había terminado de confirmar que cometió error tras error.

—Todos cometemos errores, puedo entender en parte los tuyos, lo importante ahora es que puedes reconocerlos y disculparte de forma sincera —comenzó Minho tomando la mano del contrario, no estaba enojado y podía perdonarlo, aunque tomaría tiempo volver a conectar como en un principio. —Podemos empezar de nuevo, de forma correcta ¿quieres?

Jisung elevó su mirada y asintió sintiendo que comenzaría a llorar en cualquier momento.

Después de eso Minho lo invito a su mesa para que estuvieran todos juntos disfrutando de aquella tarde.

—Changbin estaría realmente triste porque es el único de tus pretendientes que no está contigo hoy —dijo Seungmin con una risita, feliz de que podrá burlarse de Changbin después. Sin embargo una voz detrás de él le borra la sonrisa.

—Yo diría que no era el único que faltaba —escucharon todos dirigiendo su vista al par que se acercaba a ellos con una gran sonrisa.

Minho sintió algo de vergüenza cuando proceso las palabras dichas por el pecoso.

—Venimos en paquete doble, si a Changbin le gusta a mí también —volvió a hablar levantando su mano que estaba entrelazada con la de su ¿novio?

—¡Esa es mi frase! —exclamó Jeongin saludando al recién llegado con quien se llevaba un poco debido a las prácticas de baile.

—Creo que ahora tu único problema es elegir un novio ¿no Minho? —soltó Chan mientras sonreía.