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— ¡Sueeeeeeeeeeeeeegra!

— ¡Yeeeeeeeeeeeeeeerno!

Eso no podía estar pasando. Toda esa situación era total, absolutamente irrisoria, estúpida y sin sentido, porque no era posible que su querida madre le hubiera pagado a un chico para que fuera su novio.

¿Cierto? ¿CIERTO?

Observó al chico que pretendía ser su novio entrar a casa, yendo a abrazar a su mamá mientras ambos gritaban de la emoción, y estaba seguro de que pronto se suicidaría.

— ¿No te escogí un lindo novio, Jisung? —dijo su mamá de pronto, dando vuelta a Minho para que quedara frente a su hijo.

Oh, mierda.

El chico frente a él sonrió como si nada, mostrando todos sus dientes y sintió de pronto su rostro ruborizado.

No. No. Mil veces no.

— ¡No! —chilló horrorizado—. ¡Mamá, ¿acaso le pagaste a este chico para que sea mi novio?!

Su mamá lo miró con una expresión obvia.

— ¿Sabías que hay una página llamada unnovioparamihijo.com? —dijo su mamá como si nada—. ¡Hubieras visto el catálogo, Jisung!

— ¡Por Dios, mamá! —se giró hacia el desconocido—. ¡Devuélvele el dinero a mi madre!

— No se puede hacer reembolso —dijo Minho de pronto, sin dejar de sonreír.

— ¡No me importa! ¡No quiero un novio!

— Claro que quieres —replicó su mamá cruzándose de brazos—. Es solo que eres demasiado tímido para admitirlo. ¿Qué opinas de mi hijo, Minho? ¿No es lindo?

— Es muy bonito, suegra —concedió Minho antes de estirar su mano y apretar una mejilla de Jisung como si nada—. Es como un linda ardillita.

Jisung iba a cometer un asesinato pronto, y no le importaba ir a parar a la cárcel si con ello detenía todo ese circo. Pero primero, tendría que pensar en un buen lugar donde ocultar los cuerpos.

— ¡Fuera de mi casa! —le ordenó a Minho yendo a abrir la puerta.

— ¡No puedes echarme, somos novios! —protestó Minho.

— ¡Mierda!

— ¡El lenguaje, Jisung!

— ¡No somos novios!

— ¡Si lo somos, tu mamá me contrató por seis meses!

— ¡Devuélvele el maldito dinero!

— ¡Esa boca!

— ¡No quiero un novio!

— ¡Tu mamá me alquiló, así que lo soy!

— ¡Vuelve a la caja de donde saliste, chu, chu!

— ¡Jisung, no trates así a tu novio!

— ¡OH, POR EL AMOR DE– ¿QUÉ ESTÁS HACIENDO?! —se tensó inmediatamente cuando Minho, sorpresivamente, lo abrazó por la cintura y lo apretó contra su cuerpo.

— Tenemos que arreglarnos, ardillita, no peleemos en nuestro primer día de novios —dijo Minho como si nada.

Definitivamente cometería homicidio ese mismo día, para luego suicidarse dejando una nota donde explicaría sus motivos.

Respiró profundamente y estuvo a punto de chillar cuando Minho se arrebujó más a su lado, escalofríos recorriendo su espina dorsal.

— Bien, entonces —trató de calmarse un poco—. Mamá te pagó para que seas mi novio.

— Sí, cuchurrumín.

Rodó los ojos al escuchar el estúpido apodo, tratando de no lucir más avergonzado de lo que ya estaba.

— ¿No hay forma de que le devuelvas el dinero a mi madre?

— No, la empresa no permite reembolsos.

Quería frotar su cabeza con irritación, pero debido al abrazo que Minho le estaba dando, le resultaba imposible.

— Luego de seis meses, quiero que desaparezcas de mi vida.

— Prometido, capitán —Minho se alejó un poco, sin dejar de sonreír—. ¿Te puedo hacer una pregunta, Jisung?

—¿Qué?

—¿Eres pasivo o activo?

—¡MAMÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁ!

—¡MAMÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁ!

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Novio de Alquiler.《 Hanknow 》ᵃᵈᵃᵖᵗᵃᶜᶦᵒ́ⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora