Anatomía de Jeon [Taekook]

Capítulo XVIII

Jin miró su móvil una vez más, suspirando cuando no había ninguna notificación. Desde que Jungkook había hecho una parada a mitad camino y le había enviado un mensaje diciéndole que "sin novedad", no sabía nada más de él.

Tenía constancia de que los dos Doctores habían llegado al hotel porque Namjoon había comprobado que la reserva había sido activada. Imaginaba que habían llegado tan tarde al final, que se habrían ido directamente a dormir. Pero no podía evitar preocuparse.

Namjoon dejó una taza de café recién hecho delante de él y le quitó el móvil de las manos para dejarlo sobre la encimera.

-Jin - le dijo suavemente - estará durmiendo todavía. Dale tiempo mientras te tomas el café que en nada tenemos que salir para el hospital.
-Pero es que había tanta tensión entre ellos. Egoístamente, como director me preocupa que se distraigan en el tema de la operación, pero además me preocupa Jungkook, ya sabes.
-Lo sé, pero también sé que Jungkook es un profesional y no va a dejar que sus relaciones interfieran en su trabajo. Ha estado meses tonteando con Mingyu y no ha afectado en nada a sus casos.
-No es lo mismo, Nam. La forma en que miraba a Taehyung durante la gala, luego aquí en casa. Cómo le brillan los ojos cuando habla de él, aunque sea como profesional. Y los ojos de Jungkookie nunca mienten. Es la primera vez que veo que alguien le importa de verdad en años.
-Me encanta como te preocupas por el chiquitín – le contestó su prometido haciéndole reír por fin – Pero estoy seguro de que hablarían por el camino, y se fueron a descansar para estar listos para hoy. Seguro que en cuanto se levante te manda algún mensaje.

Como si las palabras de Namjoon fuesen mágicas. En cuanto terminó de hablar el móvil de Jin vibró sobre la encimera. Leyó el mensaje sonriendo:

¡Buenos días! Vamos a desayunar y hemos quedado con el Doctor Park en el hospital en una hora para conocer el caso antes de entrar al observatorio del quirófano.

¡Ya era hora! ¿Qué tal el viaje? ¿Todo bien?

Sí, señor cotilla. Hablamos y... bueno, llegamos tarde por eso no te dije nada más, pensé que ya estaríais durmiendo o quizá ocupados en vuestra primera noche de prometidos sin nadie en casa.

¡Ja! Con el resacón que llevaba me vino justo llegar a casa. Quiero saberlo todo en cuanto vuelvas.

Es lo que tiene ser mayor, que el cuerpo no responde. Y síiii, papá.

Maldito malcriado.

XDD Luego te cuento cuando lleguemos al Hospital.

Ok. Hacedme sentir orgulloso.

Miró la pantalla del móvil y volvió a sonreir. Jungkook estaba de buen humor lo que significaba que todo había ido mejor que bien con el Doctor Kim durante el viaje.
Iba a contárselo a Namjoon cuando vio que este ya no estaba en la cocina. Miró su reloj, tiró el resto del café en el fregadero y fue hasta el baño donde su prometido ya estaba terminando de arreglarse.

-Te doy 5 Minutos o me voy sin ti – le dijo con tono serio, pero los hoyuelos en su reflejo en el espejo le indicaban lo contrario.
-Perdón, era Jungkookie – dijo mientras empezaba a asearse para no hacerle esperar.
-Te lo dije, ¿bien?
-Bien – le contestó – Listo. ¿Nos vamos? – le dio una palmada en el trasero y Namjoon dio un respingo.

Salió del baño antes de que el otro pudiese reaccionar recogiendo el resto de sus cosas de la habitación. Se dirigió a la puerta, donde Namjoon ya le estaba esperando y salieron juntos hacia el hospital.

...

Hobi se dejó caer en la silla de su mesa favorita en la cafetería. No podía más. Se había pasado el día anterior metido en todos los casos posibles para compensar la ausencia de Tae y Jungkook tal y como Yoongi le había pedido. Quería ayudar, pero, además, le había servido para mantenerse ocupado. En cuanto paraba, como en ese mismo momento, el nerviosismo de pensar en esa cercana cena con los otros dos Doctores y lo que pudiese salir de ello, le atacaba. Iba a ser una semana muy larga.
Sacó su móvil y vio que tenía un par de mensajes de Tae.