Our struggle♥¹

Capitulo 52

52. Lágrimas

PISO 2

Yang Jeon Jin

—¿Ya vas a decirme qué carajos te sucede?— preguntó Junnie en el comedor, su hermano le proporcionó un pequeño golpe en la nuca por haber dicho una grosería— Lo siento...— murmuró y volvió a dirigirse a mi— Dime, por favor...

—No me sucede nada— contesté y sonreí.

—Tus ojeras no dicen lo mismo.

Mierda...

—Siempre tengo ojeras, Junnie— intenté evadir el tema pero mi amigo me sostuvo por el brazo, no iba a dejarme ir tan fácilmente.

—¿Estás durmiendo bien?

—Por supuesto.

Me observó a los ojos y me arrastró fuera, las quejas por parte de Jisung y Changbin se hicieron notar, pero a Junnie no le importó.

Llegamos hasta una parte deshabitada del corredor y él se apoyó contra la pared.

—Habla, ahora— ordenó y resoplé.

—Te estoy diciendo que duermo bien.

—Y yo te estoy diciendo que no te creo— contraatacó.

—Junnie...

—Habla.

—Perdón por mentirte, es que...— quise llorar pero no me sentía capaz— Tengo miedo de dormir por las noches y despertar por mis pesadillas o herirme mientras tengo un episodio...

—¿Por qué no me lo dijiste?

—Porque siempre todo el mundo se preocupa por mí...no me siento merecedor de ello.

Junnie me tomó por los hombros y sonrió— Mereces eso y mucho más, no debes escuchar a los demás. Ayudas a todo el mundo y los quieres con una pasión increíble. Eres un maldito ser de luz que no se puede odiar, eres la persona que dibuja estrellas en mis cicatrices, me ayudas a sanar.

—Quiero llorar— murmuró apoyando mi cabeza en su hombro.

—Entonces hazlo.

—No puedo.

El silencio se formó por unos minutos— Yo tampoco.

Lo observé a los ojos y noté un brillo de tristeza, éramos tan parecidos, dos niños rotos que no podían demostrar lo que sentían.

Lo abracé y él me correspondió rodeando mi cuerpo con sus brazos. Su pecho subía y bajaba al compás del mío. Mis ojos picaban pero aun nada salía de ellos.

—¿Por que a nosotros?— pregunté mientras mi voz se quebraba— Quiero llorar, pero simplemente...

Se alejó un poco de mí y me tomó por los hombros— A veces le suceden cosas malas a las personas buenas...

—El mundo es muy injusto— una pequeña gota escapó por mi ojo derecho. Junnie acercó su mano y la secó.

Me sonrió cálidamente y supe que estaba haciendo un gran esfuerzo para lograrlo.

—No tienes por qué forzar una sonrisa para mi— dije y él negó.

—Eres la tercera persona por la que no me obligo a sonreír.

—¿Quiénes son las otras dos?— su rostro se puso serio— Es curiosidad, si no quieres decirme, no tienes porque...

—La primera es mi hermano, me hacía reír todo el tiempo con sus estupideces— la comisura de sus labios se elevó para luego bajar rápidamente— Y la segunda...— pareció dudar por un sueño si decirme o no— Un amigo del piso uno...

—¿Quién?

—Seungmin...Oh Seungmin.

Suspiró al decir su nombre y me limité a sonreír.

—Estás enamorado...

—¿Qué?— preguntó con gran desconcierto.

—¿Por qué te sorprendes? Se nota desde lejos.

Quiso argumentar en contra de mi lógica, pero salí corriendo mientras gritaba que Junnie estaba enamorado.

Él me siguió mientras reía y ese sonido fue música para mis oídos.