Ser correctos o no serlo. La delgada línea que existe entre lo que debe ser y lo que se desea.
Hasret y Zaffar lo saben.
Una princesa heredera y un guardia real.
Sentimientos reprimidos y un deseo intenso.
Todo depende del camino que ambos decid...
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— Alteza, ¿por casualidad sabe dónde se encuentra el príncipe Hasid? —pregunta Zedd. Luce nervioso al estar de pie a mi lado. Mira en todas direcciones.
— No. No lo sé —respondo.
— Ok. Eso es malo.
Los guardias reales están en toda el área del jardín botánico de la ciudad principal de Kyriem. Es un lugar inmenso rodeado de árboles, arbustos y flores de todo tipo. Está perfectamente arreglado. Es de noche, pero el lugar está totalmente claro e iluminado con luces blancas.
— Creo que a Zedd le va a dar un ataque nervioso —comenta Cleo a mi lado con diversión.
— Si sobrevivió a la época en la que aún éramos unos jóvenes adolescentes, creo que estará perfectamente bien ahora —menciono.
— Los chicos tampoco han llegado aún.
— Seguramente están todos juntos —asume Nevaeh.
Hemos asistido a un evento de una familia muy poderosa entre los Clanes. Jade y Lucien han viajado por esa razón. Ya que la reunión de éste año ha sido en Kyriem. Hay demasiadas familias con poder entre los clanes. Demasiados miembros. Todos reunidos en un solo lugar. Mis padres y mis abuelos están ocupados conversando con los líderes de los clanes. Todos los demás simplemente disfrutamos de la gran reunión. Ya que Hasid y yo aún no hemos sido presentados cómo herederos y príncipes, pasamos totalmente como cualquier otro miembro de los clanes.
— Juzgando la situación, parece lo más probable.
— Oh, sí. Es así. Allí vienen —señala Cleo.
Veo a Hasid saludar carismáticamente a vários conocidos de los clanes, los chicos hacen lo mismo. Ellos siempre parecen ser amados por quienes los rodean. Y no es para menos, tienen grandes habilidades para desenvolverse socialmente.
— ¡Hasid, hola!
Cuando están a punto de llegar a dónde nos encontramos los demás, una chica a quién reconozco como la hija de un jefe secundario de un clan, se posa en su camino para saludarlo.
— ¡Hola, Megan! ¿Qué tal estás?
— Genial —ella suena muy enérgica—.¿Tú cómo estás?
— Mejor que nunca —responde Hasid con entusiasmo.
— Hace mucho que no te veía. Por eso pensé que sería agradable si saliéramos a algún lado a divertirnos un rato. También hace tiempo que no venía a Kyriem.
«Algo atrevida. Interesante.»
Sé hacia dónde va ésto. Hace tiempo ella confesó sus sentimientos por mi hermano. Pensé que luego de tanto, lo Habría olvidado. Pero... No parece el caso.
«Después de todo, hay más gente que mantiene sus sentimientos sin importar el tiempo que pase.»
— Megan, eso sería increíble. Pero me temo que no puedo. Tengo muchos asuntos pendientes. Y algunos compromisos con mi pareja—responde.
