Pesadillas Al Acecho ||Stranger Things - Harry Potter (Crossover)||

23

Ahora, todos estaban reunidos en la casa de Steve...

Eran, según Remus, las tres de la mañana, aunque no le dieron gran importancia. Habían hecho algo así como una pequeña tumba en el patio trasero de Steve.

En realidad fueron los niños los creadores de la placa. Era parecida al cartel que Steve tenía en su habitación, solo que menos colorida y con la frase 'Murió por Vecna, nosotros mataremos a Vecna por él'.

La frase fue idea de Dustin, dando a relucir la ira que llevaba dentro. Y pobre Vecna si se encontraba cara a cara con Dustin o acabaría hecho trizas.

Y Robin estaba a punto de leer la carta de la madre de Steve para todos. Se sentían un poco mal por hacerlo, pero aunque Steve ya no estaba entre ellos, tal vez podría escuchar los pensamientos de su madre.

—Uh... Está bien —Susurró Robin, antes de suspirar y comenzar a leer:

Querido Steven
Lamento no haber estado ahí para tí cuando más me necesitabas y lamento no haber sido una buena madre. —Dijo tristemente.— Me enteré por una de las vecinas chismosas que adoptaste a un pequeño grupo de niños —Robin soltó una risita la igual que los otros jóvenes.— Estoy feliz de que lo hayas hecho, necesitas una mejor familia de lo que nosotros fuimos.

—Lo único que quiero que sepas es que te amo y nunca dejaré de hacerlo, aunque vayas a una universidad genial o si sigues en un trabajo cualquiera del pueblo.

Estoy orgullosa de ti por lo que has hecho.
Con amor,
Mamá

—Eso es bastante lindo —Dijo Jane, que tenía su cabeza recargada en el hombro de Will. Todos rieron con cariño a la niña.

—Lo es, Ce —Dijo Carol, sonriéndole amablemente, aunque también se había limpiado una lágrima de la cara con tristeza.

Y entonces todos dejaron la conversación, gracias a los niños que comenzaron a hablar sobre algo de calabozos y dragones, con Will explicándole a su hermana y a Max las cosas que se perdían.

Habían encendido una fogata. Jonathan y Argyle, por fin, tuvieron permitido drogarse (Sirius les dio el permiso con la condición de que se mantuvieran alejados de los niños y que también le dieran) según ellos en honor a Steve.

Los niños estaban quemando malvaviscos en la fogata, la señora Mayfield abrazando a su hija cariñosamente. Jason propuso cocinar algo, por lo que él y sus amigos estaban en la parrilla o en la cocina, realmente no sabía dónde, haciendo unas hamburguesas.

Nancy, Robin, Carol y Tommy habían encontrado un paquete de cartas y estaban jugando algún juego. Eddie no tenía ni idea de lo que estaban jugando, porque parecía que no se ponían de acuerdo en que juego y cada uno estaba haciendo lo que quería.

Era un ambiente extrañamente entrañable y familiar, lo que lo hizo sonreír. Él y Remus estaban sentados en el suelo, mirando a todos en el lugar.

—¿Un dólar por tus pensamientos? —Dijo Remus con una sonrisa divertida. Eddie le devolvió la sonrisa, se sentía mejor que hace horas.

—Eso es extrañamente 'doméstico', ¿Sabes? —Dijo, su voz haciendo eco a sus pensamientos.— Espero que desde donde Steve nos esté viendo, si es que lo hace... Esté feliz. —Susurró, mirando a las estrellas.

—Lo sé... Que no daría por volver en el tiempo —Respondió el hombre castaño. Eddie asintió.— Le robaría la fortuna a Sirius solo para que alguien invente los viajes en el tiempo largos —Eddie soltó una suave carcajada y Remus lo siguió, ambos comenzando a reír.