(XXV) La Sombra de Coruscant

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"Cuando entramos al apartamento estaba impactado al ver tal desastre. Estaba más que claro que algo malo había pasado. Comencé a buscar dentro de cada una de las habitaciones pero algo no cuadraba.

La cocina tenía marcas de quemaduras, y varias cazuelas estaban quemadas. Cómo si se hubiesen quedado al fuego hasta que el sistema antiincendios se hubiese activado por sí solo. El cuarto de Hina tenía el suelo lleno de ropas de ella, pero por tal cantidad pude saber que no había empacado nada. Las computadoras eran insalvables y no fui capaz de reconocer los diferentes equipos.

Las marcas de blaster eran pequeñas, pero lo suficientemente cómo para freír los circuitos de las consolas. Tal vez un arma con silenciador.

Kilo: - Oh no. Esto es un desastre. -

Rage: - Debemos buscar una pista algo... y pronto. -

Miré por todos lados y vi una terminal cerca de la puerta principal... pero había un problema. Quienquiera que haya sido. Sabía muy bien lo que hacía. Le disparó a todos los sistemas de la casa y las interfaces eran irreparables. Me acerqué y removí las piezas de maquinaria que obstruían el paso. Finalmente, removí la tapa de la interfaz de la terminal. Al hacerlo, varias chispas salieron y pude ver el panel destruido.

Rage: - ¡Demonios! - Reaccioné al ver las chispas que me saltaron hacia mi rostro. - Mmm. Esto se ve muy mal. Kilo. ¿Crees poder hacer algo al respecto? -

Kilo: - Veré que puedo hacer. Pero no prometo nada. -

Mientras Kilo intentaba acceder a algún archivo digital que nos diera una pista. Comencé a revisar el interior del departamento con más detalle. No parece que hubiera habido una pelea. De hecho. Salvo los cristales de los dispositivos electrónicos, toda la decoración del lugar estaba en perfecto estado. Revisé el resto de las habitaciones, pero con excepción de la habitación principal y el cuarto de Hina, todo parecía estar en orden.

Busqué en el cuarto de Hina una vez más. Revisé los cajones vacíos y busqué entre las prendas que estaban en el suelo. Busque debajo del colchón y de los muebles, pero en vano. Recuerdo que estaba distraído en mis pensamientos cuando Kilo entró en la habitación.

Kilo: - Señor Rage. Ya tengo la información de los responsables. -

Rage: - Entonces si pasó al aquí pero cómo las obtuviste La consola estaba frita. -

Kilo: - Las interfaces estaban fundidas pero pude acceder a los registros de la propiedad a través del refrigerador. -

Rage: - ¿Es una broma? -

Kilo: - No. No lo es. Estos apartamentos tienen cientos de circuitos conectados. Está más que claro que los que irrumpieron en el departamento no lo sabían. -

Rage: - ¿Sabes que paso? -

Kilo: - Las cámaras grabaron cómo cinco individuos encapuchados entraron al departamento. Es difícil ver sus rostros. Pero pude obtener la imagen completa de uno de ellos. Al parecer aturdieron a Hina con un blaster y se la llevaron. Luego destruyeron todo y dispararon a la cámara. -

Rage: - ¿Y en el dormitorio? -

Kilo: - Al parecer, la única cámara de seguridad está en la entrada del apartamento. -

Rage: - Mmm. De seguro buscaban algo. No lo sé, Kilo. Esto es muy extraño. -

Kilo: - Concuerdo. Igual me parece extraño que nadie hubiese revisado. teniendo en cuenta que este es un bloque residencial de ex-militares. De cualquier forma... puedo rastrear al secuestrador. Sólo necesito conectarme a una terminal. Una civil bastará. -

Rage: - No puede ser. ¿Tendré que hacer otro drama? -

Kilo: - Afortunadamente no. Tengo la ubicación de varias terminales públicas en mi memoria. Podemos llegar a una a pie. -

Rage: - Bueno escucharlo. -

A varios minutos de donde estábamos, encontramos una terminal de acceso público. Al parecer una variante para turistas o algo similar. De todas formas era el sector lujoso de la ciudad. Kilo se conectó y se tomó bastante tiempo en intentar localizar a nuestro objetivo. Yo comencé a preocuparme y los nervios me estaban matando. Por suerte no había muchas personas a esas horas. Y finalmente:

Kilo: - Tengo los datos. Pero tengo la sensación que no te gustará oírlo. -

Rage: - Sin rodeo, Kilo. ¿Qué ocurre? -

Kilo: - Al parecer nuestro objetivo se llama Tunk-Pilsa, es un trandoshano. -

Rage: - ¿Un trandoshano? ¿Aquí? ¿En Coruscant? -

Kilo: - Más de uno... de hecho. Al parecer se establecieron cerca de un basurero en el nivel 1. El nivel más bajo de Coruscant. -

Cuando Kilo mencionó el basurero quedé en shock. ¿Acaso era el mismo que tuve en mi visión en Moraband? ¿Dudo que haya sido una coincidencia? De cualquier modo. No teníamos tiempo que perder.

Descendimos lo más pronto posible a los niveles inferiores. Lo peor de lo peor. El nivel 1 era simplemente desgarrador. Las calles apenas podían definirse de tanta suciedad y basura. Los pocos residentes se reunían cerca de tanques redondos o antiguas unidades R2 donde una leve llama los calentaba. La temperatura era increíblemente baja. Sentía cómo mis huesos se congelaban.

Tomé varios harapos cuando tuve la oportunidad. No importaba que tan sucios estaban simplemente debía mantenerme caliente. El traje de neopreno ayudaba pero no era suficiente. Caminamos lentamente hasta que hallamos el lugar. Una extendida valla de metal rodeaba un basurero. Y a lo lejos, una especie de almacén.

Avanzamos lentamente... pero algo se activó en mi. Recuerdo pensar: "ya he estado aquí antes"... y con razón. Reconocía los pasadizos y las paredes rotas. Comencé a sobresaltarme al darme cuenta que era el lugar de la visión. Mi corazón comenzó a apretarse. Me di vuelta lentamente y lo vi. El mismo contenedor de basura en el mismo lugar. Me acerqué lentamente y ahí estaba. Un cuerpo envuelto en papel y plástico. No sólo uno. Cintos de ellos. Cómo si estuviesen esperando para ser incinerados.

Reconocí al instante el cuerpo de un kaminoano. Me acerqué lentamente... rezando para que no fuese verdad... para que mi visión no fuese más que una horrenda pesadilla. Tomé el sable de luz y abrí el envoltorio y era ella. Era Hina. Con el rostro completamente desfigurado. Pero pude reconocer los dos pendientes que llevaba siempre en el lado izquierdo de su cabeza.

La imagen me desgarró el alma. Comencé a sentir un fuerte dolor en el pecho. Mi ya perturbada respiración producto del frío comenzó a acelerarse. Me temblaban las manos... y finalmente todo se volvió oscuro.

Eso es lo último que puedo recordar."

La grabación se interrumpe con el rostro perturbado de Rage.

Star Wars Fanfic - El Clon JediDonde viven las historias. Descúbrelo ahora