𝑇𝑜𝑑𝑜 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒 𝑢𝑛 𝑖𝑛𝑖𝑐𝑖𝑜 [Los Cullen]

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Evaline camino con lentitud hasta el Instituto sintiendo la miradas de todos puestas en ella.

Suspiro al ver al grupo de chicas, fans de los cullen's.

Y los cuales siempre se le acercaban diciendo que no sabían cómo los cullen's se habían interesado en ellas.

No era nadie.

Solo una huérfana sin amigos.

Eran detestables.

Siguió caminando intentado seguir su camino pero obvio que un empujó de una de ellas hizo que cayera sobre su propio brazo generando un grito de esta.

Todos se reían con sutileza claro hasta que el auto de los cullen's se detuvo frente a las chicas bajandose preocupados al ver a evaline en ese Estado.

—¿¡Que Diablos hiciste?! –grito Rosalie haciendo que la chica temblará de miedo– ¡¿A caso sabes lo que provocaste?!

Alice tomó con terror a evaline quien sollozaba mientras Jasper la afirmaba intentado calmar su dolor.

—¡¿Señorita Hale no se meta en...

—¡A ella no le gritas! –le grito Emmett parándose frente a el– ¡Vio como estas alumnas empujaban a evaline, le quebraban el brazo! ¡¿Y juzga a mi novia?! –gruño mucho más molesto que antes– Pero no se preocupe areglaremos esto a la manera de los cullen's

El hombre retrocedió varios pasos ante la impotente mirada de Emmett quien lo miraba fijamente sin apartar la mirada.

Jasper ignorando a todos los demás tomó a evaline subiendola al auto con Alice conduciendo, llevandola a una gran velocidad (muy alta puesto que evaline se volvió a marear).

Evaline apesar del dolor miro como se hayaba en el hospital tampoco pudo decir nada pues Jasper ya la había llevado hacia adentro.

Los doctores se acercaron con rapidez siendo un hombre Rubió, de ojos dorados y tez pálida su última imagen antes de desmayarse.

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Emmett sonrió escalofriantemente ante el sudor del hombre que no sabía que decir.

—Solo fue un juego –se defendió la joven– Ella sola se tropezó

Emmett gruño aburrido ante el falso lloriqueo de esa joven como el de las demás.

—Yo les creo –sonrió el inspector del Instituto– Y el señor cullen igual les...

—No me meta a mi lame botas –le interrumpió molesto– Ustedes la empujaron, quebraron su brazo eso es suspensión por agresión pero como el inspector de aquí es un chupa medias

—¡no me diga así! –grito levantándose molesto– ¡esta suspendido!

Emmett río con fuerza mientras Rosalie entraba con una mirada totalmente fría.

—no se preocupe, les diremos a nuestros padres el problema y ellos vendrán a hacer la demanda

El inspector sintió su mandíbula caer ante las palabras de la rubia, busco en su mirada burla pero no había nada.

—N-no puede...

—Claro que podemos, defender el bullying es un caso muy serio y más si el mismo inspector se burla, Emmett levantate

Emmett ignoro los llamados del hombre y ambos siguieron su caminata claro hasta que una joven más baja que ellos se paró frente a ellos con lágrimas.

—Por favor perdonen a mis amigas, evaline simpre las a acosado y...

Rosalie sin soportarlo más tomó de la camisa a la menor estrellandola contra la pared generando el silencio de todos.

—Vuelve a abrir tu boca para hablar mal de evaline y lo siguiente que sentirás es que cortare tu lengua, no me das lastima –le aclaro al verla llorar– No siento nada más que asco al verte y me encargaré que todos los que hicieron sufrir a evaline lo paguen muy caro

Y sin más Emmett y Rosalie se fueron de allí, directos al hospital.

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Evaline miraba a los lados confundida, estaba en el hospital y en su mano tenía un yeso.

Sin evitarlo lloriqueo al ver que nuevamente había salido lastimada por su cobardía.

Aunque todo pensamiento se detuvo cuando de la puerta entró el mismo doctor que vio antes de desmayarse.

—¿Y el doctor Jones?

Evaline tapó su boca con rapidez al decir aquello, como pudo ser tan grosera con el hombre que la ayudó.

Y más por qué pudo ver el tic en el joven doctor Rubió aunque también pudo ver una sonrisa Embobada.

—Deberás pasar al menos 2 semanas en el hospital –dijo el aclarandose la voz

Evaline lo miro con el ceño fruncido antes de negar rápidamente ante aquello dicho.

—Le agradezco que me haya ayudado pero no, en serio –dijo levantándose.

Aunque fue que en menos de dos segundos que el doctor volviera a ponerla en la camilla con el ceño fruncido.

—Debes permanecer en cama

—Y lo haré pero no aquí –dijo molesta.

—¿Haber por qué no? –le preguntó de la misma forma.

Evaline apretó sus labios mirando con obviedad al doctor, al parecer era nuevo.

—No puedo pagarlo –negó frustrada al verlo confundido– Ni el yeso, ni el quedarme aquí

—Pero tus padres...

—Debes ser el padre de los cullen ¿no? –pregunto burlona– Por qué en serio pareces no conocerme

—Pues no...

—Dios –bufo– Soy huérfana Doctor Cullen, vivo en un orfanato el cual no está dispuesto a siquiera pagar para que vaya en locomoción al Instituto así que por favor puede...

—Lo pagaré –le calmó– Todo lo que pases en el hospital, nuevo yeso, medicamentos, la estadía

—No, yo no... –se alertó al instante.

—No deberás pagarmelo –le calmo al saber que pensaba– No te preocupes evaline, estaras bien

Antes de que pudiera decir algo más este se fue de la habitación dejando a evaline completamente sola.

Y sin saber que hacer.

°Editado°