Cap 9

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De pronto desperté y ya estaba llegando a mi ciudad. Revise mi celular y tenia un montón de mensajes de mi mamá diciendo que ya estaba fuera de la terminal esperando.

-Holaaa mamá.- saludé.- Hola Emiliooo.- abrace a mi hermano.

-Ya tenemos un montón aquí, ya me iba a ir, verdad Emilio.- dijo mi mamá

-Si, ya nos íbamos a ir... mira te hice un dibujo.- sacó de su mochila una hoja arrugada y me la entrego.

-Ayyy que bonito está. ¿Tú lo hiciste?.- Emilio asintió y luego yo lo guardé en mi bolsa.
Mi mamá me ayudó a subir mi maleta y luego nos dirigimos hasta la casa.

-Si van a venir tus amigos, hija?

-Si, de hecho mañana ocupó que me ayudes a venir por ellos. De que no van a caber todos, entonces para que te traigas la mitad y yo la otra mitad. Como vez?

-Si, está bien si no puedo yo, que venga tu hermana. ¿Como te fue? Te vez muy cansada.- me dijo con algo de preocupación.

-Pues bien.... Si estoy muy cansada, pero nada que no quite un baño y una siesta.

-Bueno, está bien, nada más llegamos y comemos. Tu abuela dice que ya tiene mucho que no te ve, hizo pozole verde.

-Ayyy que ricooo, muero por comer.... Y pues si fíjate que ya tiene muchísimo que no la veo y que no voy al rancho. Pero bueno.

El camino a casa se me hizo muy corto, por la buena plática que estaba llevando con mi madre; la extraño muchísimo después de pasar muchos días sin verla, ella siempre va a hacer mi lugar seguro...

-Holaaaaaa abuela ¿como estas? Te extrañe mucho.- dije saludando a mi abuela que estaba sentada esperando mi llegada.

-Hijaaaa, que gusto verte. Siempre es un placer verte mi chiquita.- correspondió a mi abrazo.- te hice pozole verde, sé que te encanta.

-Gracias abuelaaaa, eres la mejor. Pero déjame subir mis cosas y ahora bajo para comer todos juntos.

Subí a mi habitación con mis maletas, cuando llegue me recosté sobre la cama, de verdad estaba demasiado cansada, tanto que podría saltarme la comida y dormir todo el día.  Recuerdo que antes podía pasar toda la noche estudiando para algún examen, irme a la escuela todo el día y volver a la noche o irme de fiesta y yo estaba como si nada. No cabe duda que los años se están apoderando de mi, ya no estoy para esas cosas.
Con más fuerza de voluntad que nada, baje a comer, la mesa ya estaba puesta y toda mi familia estaba sobre ella, esperándome para poder comenzar.
Empezamos a hablar de nuestros días, cada uno de nosotros, nos reímos un poco y luego como por arte de magia la energía la tenía por el suelo, trataba de tener los ojos abiertos, pero me era muy inevitable, así que pedí disculpa y subí a mi habitación para poder descansar un poco.

.....

Desperté por los lloriqueos que tenia Emilio por no querer meterse a bañar. Mire hacia la ventana, aún tenía las cortinas abiertas o más bien nunca las cerré, así que podía ver que el sol estaba casi por la mitad del cielo.
Me asuste un poco ¿ya era otro día?. Revise mi teléfono y tenía como 1000 llamadas de Alexis, así que volví a entrar en pánico, de inmediato le regrese la llamada.

-Holaaa?.-

-Ayyy hasta que por fin, gracias a Dios que contestas. Te estoy marque y marque.- alcancé a escuchar su risita.

-Perdon, perdón. Me quedé súper dormida, desperté hasta hoy, pido mil disculpas. ¿Ya vienes?

-No mames Darin, como que si ya voy?. Ya hasta voy a llegar y tú ni tus luces.

Imán de preciosa energía-Quackity-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora