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Al ver a Huening Kai asomar por aquel largo pasillo únicamente atiné a levantarme de donde había tomado asiento y abrazarlo con fuerza. Él me apartó para comprobar si tenía alguna herida y fue entonces cuando mi mirada coincidió con la de SooBin, haciéndome exaltar al no entender el porqué. 

Kai, te dije que a mi no me pasaba nada... Mi amigo ha tenido un accidente de moto.

Entonces la realidad cayó como un balde de agua fría sobre él: aquella vez que hablamos sobre las carreras era verdad. Huening Kai se quedó congelado mientras que SooBin nos miraba con una gran confusión, no entendía ni por qué yo estaba allí ni el shock de Kai. El menor me volvió a envolver con fuerza y correspondí acariciando su espalda para calmarle.

Creo que es mejor que os marchéis... —Habló TaeHyun mirándome y luego a Kai y SooBin de manera rápida queriendo ocultar algo, lo cual era obvio.
—Sí... será lo mejor...

Me separé de Kai para acercarme a YeonJun que era el más alterado en aquel momento. En ese momento, TaeHyun se acercó a ambos chicos entre susurros inaudibles, únicamente podía ver los rostros cargados de gran seriedad.

Es una gran chica... Tú debes ser su amigo Kai, ¿verdad? y tú debes ser el lindo peliazul.
—¿Es cierto que sois corredores ilegales?—Preguntó cambiando el tema demasiado alterado como para centrarse en algo que no fuera eso.

Aquel comentario pilló completamente por sorpresa a SooBin, apenas habían compartido dos palabras y ella ya hablaba de ellos, le hizo sentir confuso. El pelirrojo suspiró asintiendo lentamente mientras se cruzaba de brazos y me miraba con seriedad.

—Más te vale no abrir el pico o no seré yo quien vaya a matarte con sus propias manos.

Huening negó rápidamente simulando una cremallera en su boca. TaeHyun me miró de nuevo, no pude verlo porque estaba agarrando por los hombros a YeonJun mientras que este tenía la vista perdida y trataba que reaccionara a algo.

Ella no está aquí por gusto.—Asintió el escarlata.— Ella está aquí por lo mismo que yo, para proteger y cuidar a sus amigas.—Ladeó la cabeza para mirar nuevamente a Kai y a SooBin.— Soy TaeHyun.
Huening Kai. — Asintió presentándose.
—Soy SooBin.— Saludó con su cabeza igualmente.
TaeHyun, tienes que sacarla de ese lugar.—Rogó mi amigo
—No es tan fácil, si ella no quiere salir por proteger a las demás... efectivamente no lo hará.
¿Y quién la protege a ella? — Miró alrededor buscando algún chico de pintas más intimidantes que TaeHyun.
Hacemos lo que podemos, por ella y por todas.

Esa respuesta hasta cierto punto calmó al menor pero eventualmente no lo hizo del todo en SooBin, quien no entendía muy bien de que iba la cosa y se vio envuelto en aquello sin siquiera quererlo, él quería ser cercano a Kai, no estar envuelto en carreras ilegales por mi culpa. Huening Kai sentía su corazón encogerse al verme en aquella situación y su único pensamiento era que debía hacer algo por mí.

 Huening Kai sentía su corazón encogerse al verme en aquella situación y su único pensamiento era que debía hacer algo por mí

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Estábamos de vuelta a casa en el coche de Soobin. De manera inquieta comencé a jugar con los pliegues de mi ropa mientras mantenía la mirada en un lugar fijo pensando. Kai me miró con algo de lástima y apoyé mi cabeza en el cristal agotada de todas las maneras posibles.

—Tienes que salir de ese lugar...
—¿Cómo voy a hacer eso? ¿Qué hubiera pasado si yo no hubiera estado ahí para llevar a BeomGyu al hospital?

Por un momento se calló sabiendo que tenía razón, pero se negaba dejar las cosas de aquella manera. Moví mi pierna con nerviosismo... ¿Qué debía hacer? SooBin me miró a través del retrovisor, apartando la mirada rápidamente al chocarla con la mía. Huening Kai había disociado, miraba a la nada, como si en lo más profundo de su ser buscara la manera de hacerme entrar en razón. SooBin carraspeó interrumpiendo aquel incómodo silencio.

Amm... ¿Dónde vives? Voy a dejarte en casa.

Volví a mirarle a través del retrovisor y le indiqué donde quedaba mi casa. Sólo asintió y cambió de dirección hacia donde le había indicado. SooBin realmente me hacía sentir confusa, no amorosamente, nada de eso, ni por asomo. Pensaba que no le agradaba para nada, sin embargo acababa de tener un detalle así conmigo. Cualquier persona puede negarse a dar varias vueltas con el coche, está en todo su derecho, sin embargo me dejó en la puerta de mi casa y esperó a que entrara para marcharse. 

Aún sin concebir el cúmulo de cosas que habían llegado de un momento a otro me dirigí a la cama. Escondí mi rostro en la almohada mientras trataba de darme algo de consuelo, me sentía vacía y no entendía porqué, todo había sido a raíz de esa noche: comenzaría a sospechar de cualquier pequeña cosa que se interpusiera en mi camino.

Complicated.-Choi SooBin y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora