Complicated.-Choi SooBin y tú.

18.

Finalmente allí nos hallábamos nuevamente, frente a la puerta de Huening Kai. Estábamos nerviosas, atemorizadas de que no nos abriera nuevamente la puerta. Bahiyyih fue quien se acercó hasta el albugíneo botón de la entrada y lo pulsó. Y de nuevo. Y de nuevo.

Y finalmente un despeinado y somnoliento Kai abrió, logrando que mi corazón diera un gran vuelco y que mi primer instinto en ese momento fuera el mismo que el de su hermana: tirarme a sus brazos. Lo abracé con fuerza sin llegar a creerme que estaba bien y que estaba allí

—¡Kai Kamal Huening!—Gritó una agitada Bahiyyih.— ¡¿Se puede saber dónde estabas?!

El chico cayendo en cuenta de que era su hermana la que le estaba hablando nos separó a ambas de aquel abrazo y la miró con los ojos abiertos como platos mientras que su boca se convertía en una perfecta "o", misma vocal que imité al ver que SooBin se encontraba allí con él.

—¡¿Y tú qué haces aquí?! —Le miré atónita al darme cuenta de que SooBin estaba con él.— ¡¿Y tú por qué no me has avisado de nada?!
—¡Era muy tarde para llamarte de que ya habíamos llegado a casa! 
—¡Un mensaje no me hubiera hecho daño, Choi SooBin!

SooBin bajó su mirada, mordisqueando su labio, sabía que yo tenía razón. Un confuso Kai cerró la puerta de su casa para acercarse de nuevo a ambas en un intento de disculpas.

—Bien, lo siento chicas, me quedé en casa de SooBin a dormir y no avisé-
—No es así.—Le interrumpí cazando su mentira rápidamente.— SooBin vino a por mí anoche.

Huening Kai abrió sus ojos como platos y ladeó su cabeza buscando a SooBin para ayudarle, acabando por suspirar pesadamente mientras miraba al suelo.

—Está bien, está bien... Conocí a una chica y... pues tuvimos una cita que se alargó de más.

Ahora eran Bahiyyih y SooBin quiénes tenía su boca en una perfecta "o" mientras que algo dentro de mí se había encogido, haciéndome sentir una enorme incomodidad frente a Kai, y es que quizá y solo quizá pensaba que me trataba especial, distinta a las demás. Pensar aquello me hacía ciertamente ilusión, y me sentía ridícula en ese momento, recordando aquella discusión mental que había tenido la noche anterior por ambos chicos. Rasqué mi nuca sin saber que añadir en aquel momento y una molesta Bahiyyih chasqueó la lengua en aquel momento.

—Y yo que ya tenía elegida...

Tras eso, la fémina se adentró en el salón, dejándonos a un confuso Kai, a un incómodo SooBin y a mí solos en la entrada. Kai me miró y estiró sus manos hacia mí, tomando mis brazos y revisándolos de manera curiosa mientras intercalaba su visión con mi rostro igual.

—¿Pasa algo...?—Alcé una ceja cuestionando.
—Oh, no, nada... sólo se me hizo verte un tatuaje y tenía curiosidad.

Tras eso asentí dando un par de pasos hacia atrás para luego ondear mi mano en señal de despedida, en realidad no tenía las palabras exactas para aquel momento y ambos se dieron cuenta, creo que SooBin se sentía de igual amnera. Soobin se despidió sintiendo el ambiente de igual manera y haciendo una tierna mueca estirando sus labios en una sobrepuesta y recta sonrisa.

SooBin's POV:

Kai se acercó hasta Bahiyyih para hablar con ella ya que le sorprendía su repentina aparición y ella únicamente le miró con los brazos cruzados.

—Oye mocosa, ya me he disculpado. De verdad, ni siquiera sabía que vendrías.
—¡Pero te fuiste de cita!—Habló como una hermana pequeña celosa, ciertamente lo que era.
—¿Y qué pasa con eso? Tendré derecho a salir y entrar ¿no?

Bahiyyih siguió con el ceño fruncido mientras negaba rápidamente y señaló el aire con un dedo mientras sus agujeros nasales se abrían un poco.

—¡No me gusta esa chica para ti! ¡______ es mejor! ¡Me ha hecho tortitas!

Algo en mi interior se encogió ante aquella afirmación: por supuesto, cómo me iba a elegir a mí, yo sólo era el amigo de su hermano el cual acababa de conocer, ¿A dónde llegas con un pensamiento tan infantil, Choi SooBin? Una pequeña risa resonó en mis oídos y me sacó de mi ensoñación.

—¿Por qué sonríes? ¿Qué te pasa? ¿Eres tonto?—Gritó Bahiyyih.
—¡Oye, venga! ¡En ningún momento te he insultado! Solo recordé algo...
—No, me da igual, deja a esa chica, he dicho que me gusta _____.
—¿Estás celosa? —Le miró divertido a lo que ella rodó los ojos, levantando una mano como si fuera a darle un golpe, sintiéndome algo aviolentado por aquella acción.
—No lo estoy, pero tú sí estás ciego.

La miré frunciendo el ceño esta vez yo y ladeé mi cabeza. ¿Estaba ciego por qué? ¿De qué tenía que darse cuenta? ¿Acaso debía acabar con ______ sí o sí? ¿No había cabida para ninguna opción más? Mis hoyuelos se mostraban llenos de sentimientos arrugados e incómodos. Me levanté del sofá y esperé a que terminaran de discutir, jugando con los padastros de mis manos.

—Cuando seas capaz de pensar me avisas. A veces me pregunto cómo es que has sido capaz de entrar en una carrera universitaria.

En cuanto la menor subió las escaleras a modo de berrinche dando un portazo, Kai se acercó a mí, retrocediendo yo un par de pasos sin darme cuenta, ciertamente dolido por mis propios pensamientos ya que en ningún momento había dejado muestra alguna de mis sentimientos a ninguno de ellos. El rostro de Kai palideció en confusión y eso sólo me hizo sentir peor.

—Yo... creo que voy a irme... No hemos dormido mucho esta noche así que... Eso. Creo que debo descansar, tengo la cabeza llena de porquería.

Tras eso me despedí con la mano y salí de la casa sin dar una sola explicación más. Algo bastante infantil por mi parte teniendo en cuenta que yo era incluso mayor que él, pero había algo en nosotros que me hacía sentirme adolescente de nuevo: un adolescente que vivió su adolescencia con su corazón roto.