𝐓𝐫𝐚𝐭𝐨 𝐬𝐮𝐜𝐢𝐨 (𝐉𝐄𝐅𝐅𝐓𝐀)

𝐗𝐈𝐈

TA

Me tomó un par de segundos que las palabras de Killer penetraran en mi mente aturdido.

—¿Qué quieres decir?

Tenía problemas para concentrarme después de lo que acababa de suceder. Cuando Killer dijo que querría una segunda vez, no había esperado follar de esta manera desquiciada. Incluso si la palabra me hacía retorcer, era el único término apropiado para lo que Killer me había hecho, para lo que le había dejado que me hiciera. Estaba dolorido, podía sentir mi carne sensible palpitar con un dolor extraño que no podía explicar.

Killer sonrió, sus ojos repentinamente duros y crueles.

—Te quedan veinticuatro horas de vida antes de morir.

Sacudí la cabeza lentamente.

—Me pagaron para matarte, Ta. Esa es la única razón por la que incluso me molesté contigo, con este trato. —Levantó un mechón de mi cabello, dejándolo deslizarse a través de sus dedos llenos de cicatrices y relucientes. Relucientes por nuestras liberaciones combinadas, por su... semen, y de repente me sentí sucio.

Me usó, me traicionó.

—Entonces, ¿el trato fue una farsa para que así pudieras follarme? —susurré con dureza, sintiendo la prueba de lo que habíamos hecho escurrir de mí, sintiéndome contaminado y degradado por sus palabras.

Killer se enderezó con una sonrisa cruel.—Esa fue una ventaja adicional.

—¿Siquiera mataste a Gun? Tal vez eso también fue una mentira. —Aparenté valentía incluso aunque el miedo se extendió en mi pecho rápidamente.

—Lo maté tan brutalmente como me lo pediste. Fue divertido, pero no tanto como tu culo.

Me puse de pie tambaleante, completamente desnudo, dolorido y destrozado, pero luché contra el impulso de cubrirme. No quería mostrar más debilidad frente a Killer, no después de lo que acababa de revelar. 

Nunca más.

Nunca iba a durar...Mi corazón se apretó fuertemente al darme cuenta.

Veinticuatro horas. Busqué en su rostro un destello de suavidad, por una razón para esperar compasión. No había nada.

¿Era tan malo juzgando a las personas? Pensé que Killer me había mostrado su lado amable por una razón, una razón emocional, no para engañarme, para jugar conmigo.

Me tambaleé hacia mi armario incluso aunque mis piernas temblaban salvajemente. Killer había arruinado mi ropa, así que necesitaba agarrar cosas nuevas para cubrirme, y necesitaba tiempo para pensar, para encontrar una manera de salir de esto. Me vestí rápidamente, agarrando unos jeans y una camiseta, de espaldas a Killer, incluso si eso erizó los pequeños vellos en mi cuello. Quería esconder mi expresión con una de calma, quería esconder mi dolor de él. No necesitaba saber cuán conmocionado y devastado estaba.

Me giré lentamente. Killer se apoyaba contra la encimera de la cocina, con los brazos cruzados frente a su pecho, luciendo relajado y tranquilo, cuando acababa de destrozar todo mi mundo.

—¿Quién... —Me aclaré la garganta, odiando lo temblorosa que sonó mi voz—... ¿quién te pagó por matarme?

Era primo del Capo de la Famiglia, cuñado de su Ejecutor, pero eso era todo lo que había de mí. No era importante. ¿Quién me odiaría lo suficiente como para querer matarme? ¿Quién gastaría tanto dinero en eso?

O tal vez Killer había tomado el sexo como pago de quien me quisiera muerto. Ese pensamiento me hizo sentir aún más sucio. En mi mente tonta e ingenua, pensé que tal vez era especial, pero no fui más que un trabajo y un objeto de placer.

—Tal vez mañana te lo diga como último deseo —dijo, nuevamente con esa sonrisa horrible.

Me apresuré hacia la puerta, con la esperanza de escapar, pero sus pasos tronaron cerca de mí y sus brazos se cerraron alrededor de mi cintura, levantándome del suelo como si no pesara nada.

Luché como un lunático, arañé y pateé, pero él me llevó a la cama y me soltó sin ceremonias. Luego se agachó sobre mí, su cuerpo sujetándome.

—¡No me toques! —siseé.

—Hace solo unos minutos me apretaste la polla mientras te corrías, ¿y ahora te haces el difícil?

Estaba siendo cruel a propósito, y me estaba afectando. Las lágrimas brotaron de mis ojos.

—No eres mejor que el hombre al que mataste por mí. Eres un monstruo. No mereces tocarme nunca más, no después de traicionarme.

Se rio sombríamente.—¿Traición?

Lo fulminé con la mirada, incluso cuando una lágrima se deslizó por mi mejilla. Estaba luchando mucho por ser fuerte, pero era demasiado. Los ojos de Killer siguieron el descenso de mi lágrima.

—¿Cómo vas a matarme? —pregunté suavemente—. ¿Me harás sufrir porque alguien te pagó para hacerlo? ¿O lo harás rápido?

Algo cambió en los ojos de Killer y por un instante me dio esperanza, pero ¿no había malinterpretado antes sus acciones? Estaba jugando con mis emociones, tal vez eso era parte de la tortura conduciendo a mi muerte.

Killer se apartó de mí y se enderezó, mirando hacia otro lado. Sonrió una vez más. Y se vio mal en su rostro.

—Veinticuatro horas, pequeño, entonces lo descubrirás.

(¿qué taaaaaaal? me encanto leer los comentarios del capitulo anterior ¿se lo esperaban? ¿pensaban lo que estaba tramando Jeff? ¿qué otros pensamientos tuvieron? ¿qué piensan sobre Ta? ¿qué harían en su lugar? me gusta leer comentarios así que no tengan miedo de hacerlo, cuando pueda estaré contestándolos. De paso vengo a comentarles que una lectora me escribió y me compartió un "mini tráiler" sobre esta historia y me dio permiso para compartirlos con todos ustedes, les dejo su link acá abajo. También les comento que tienen mi buzón abierto para cualquier cosa que quieran decirme, alguna recomendación, comentario o si necesitan hablar con alguien, ya saben. Ya estamos pisando el final, ¡nos vemos pronto!)

>> https://www.tiktok.com/@valeria_de_chanagun/video/7214654541839584517