Capítulo Siete.

80 13 2
                                    




Aunque Felix llevaba más de tres horas echado en su cama, estaba lejos de quedarse dormido. Todo porque cierto mocoso estaba justo cruzando el pasillo. Felix tiró su brazo sobre sus ojos y dejó salir un gemido. ¿Qué diablos le estaba pasando?

HyunJin no era del tipo de Felix en lo absoluto. Sin embargo, desde que puso sus ojos en el Petauro por primera vez, Felix estuvo perdido. La ironía se le escapaba. Felix era un leopardo , y se suponía que él no se llevaba bien con otros cambiaformas. Pero Felix no podía negar su incontrolable atracción por HyunJin.

Entonces Felix pensó en ello. ¿Cómo podía decir que era un solitario cuando vivía en un hotel lleno de cambiaformas? Claro que algunos de ellos fastidiaban a Felix a veces, pero eso pasaba porque eran unos idiotas.

La única ocasión que Felix se volvía territorial o feroz era cuando otro leopardo se acercaba demasiado. Felix tampoco era el único leopardo en Flint, estaba YoonGi. El gran y malvado YoonGi de la coalición felina. El que se creía el soberano del mundo.

¡YoonGi! Cómo deseaba Felix, estrangular al tipo con su propia cola.

No es que YoonGi le hubiera hecho algo a Felix alguna vez, tampoco.

De hecho, los dos habían trabajado juntos en algunas misiones. Era solo que el leopardo en Felix no le permitía trabar amistad con los de su propia especie.

Pero tal vez, solo tal vez, eso significaba que Felix era un poquito más como YoonGi para comodidad del propio Felix. Claro, ser el mejor amigo de otro leopardo no estaba en las cartas, pero era muy buen amigo de otros cambiaformas. YoonGi había encontrado un compañero, así que quizás él también podría encontrar a su compañero. Tan pronto como su leopardo vio a HyunJin, hizo de todo menos reclamarlo.

Esa idea debería haberle dado un gran susto a Felix. Sin embargo, por alguna razón, lo hacía sentir cálido. También lo hacía sentir, si se atrevía a decirlo, feliz.

Entonces, con la misma rapidez, Felix frunció el ceño. El nuevo descubrimiento de Felix podía ser por nada. Aparte de la erección de los dioses que HyunJin había lucido la noche que se conocieron, se había mostrado distante.

Aunque cuando Felix lo había tocado en el vestíbulo, HyunJin no se había alejado. De hecho, pareció disfrutar de las manos de Felix sobre él. No tenía dudas de la necesidad, la pasión, que había ardido en la mirada de HyunJin.

Felix finalmente se dio por vencido de su intento de dormir. Se levantó y dejó su habitación, enfilando hacia la cocina. No tuvo que pararse a ponerse ropa, ya que dormía con el uniforme puesto. De esa manera estaría listo para luchar si el lugar era atacado. Felix no había agarrado el hábito por Ride. Sino que era algo que Felix había hecho por años.

Olió a HyunJin aun antes de verlo. Felix apoyó su mano contra la pared justo afuera de la cocina e inhaló profundamente, saboreando el dulce aroma. Sin embargo, tan deseable como el olor era, Felix no podía esperar a cubrir a HyunJin en eau de Léopard.

Una vez que Felix "marcara" a HyunJin como suyo, no habría más coqueteos. Todo el mundo sabría que, aunque HyunJin pudiera ser una follable fantasía, estaba fuera de los límites. Felix tenía la sensación de que si estaban en una relación estable, HyunJin no se descarriaría. La prueba estaba en la lealtad que HyunJin le tenía a San. A pesar de que San era un perfecto imbécil, estaba claro que HyunJin haría cualquier cosa por protegerlo.

Finalmente, Felix cruzó las puertas corredizas. Esta vez era HyunJin quien estaba sentado en la encimera. Debía haber pedido prestado el iPhone a alguien, tenía los audífonos en las orejas mientras comía un pedazo de torta tan grande como su cabeza. La manera en que se las arreglaba para comer mientras cantaba suavemente en voz baja, era increíble.

Felix tiene una golosina.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora