Gritar.
Eso era lo único que podía hacer.
Gritar.
Hasta el momento, el hacerlo le había funcionado bien. Neo seguía sobre él pero el intento de querer tenerlo había pasado al olvido, el mayor se preocupaba más en acallar al menor que, a pesar de los golpes, no paraba de gritar con la esperanza de que alguien pudiese oírlo, gun se movía sin parar debajo de Neo, lo mordía cuando intentaba besarlo y lo pateaba cada vez que podía para lastimarlo y defenderse.
-¡Cállate, maldita sea! - Las manos de neo dejaron de jalar las piernas de gun y se concentraron en taparle la boca, ante esta acción Atthaphan intentó morder la mano de su agresor al mismo tiempo que movía su cara a todos lados para que lo dejara en paz, ninguna parte de su cuerpo se encontraba quieta y esto a nei ya lo había desesperado desde minutos atrás, ya había hecho de todo, le había gritado, amenazado y golpeado, sin embargo gun no se callaba y mucho menos dejaba de resistirse ante su tacto.
-¡BASTARDO, ANIMAL, POCO HOMBRE! ¡SUÉLTAME AHORA MISMO, MALDITO DESGRACIADO! - gun se había zafado de las manos de neo de tanto mover su cabeza, el de ojos verdes se veía realmente furioso, su rostro era desfigurado por una expresión llena de odio por la desesperación que el menor le estaba haciendo pasar.
-¿Sabes qué? - neo se paró y miró al menor que seguía gritando insulto tras insulto pero sin dejar de escuchar a su agresor -Grita todo lo que quieras, pero eso no impedirá que haga lo que quiera contigo -Una sonrisa aterradora adornó las facciones de neo, gun lo miró y por un momento se quedó callado, sintió en el aire que algo malo iba a pasar, aún sabiendo esto, no se dejó intimidar, neo se acercó a la única cama que había en ese lugar y alzó el colchón para sacar unas sogas gruesas, el peliblanco tenía planeado dejar completamente inmóvil a ese pequeño para por fin hacerlo suyo, sin embargo, unos golpes en la puerta le interrumpieron -¿Y ahora qué sucede? - neo frunció el ceño mientras caminaba hacia la puerta, preguntó quién era y AJ y JJ dijeron sus nombres al mismo tiempo, con algo de desgana, neo tuvo que abrir.
-Al parecer ya saben que Atthaphan está con nosotros, fueron a buscarte a tu celda pero no saben que esa es la celda de nosotros desde hace unos días - neo guardó silencio mientras se sumía en sus pensamientos, gun al escuchar lo dicho por los gemelos por un momento se emocionó para terminar recibiendo un balde de agua fría, el mayor había planeado bien todo a pesar de haberlo hecho con prisas, neo sabía que off y todos los demás no eran unos tontos y por lo mismo tenía que encontrar un lugar donde mantener a gun, tomando en cuenta de que no habían muchas opciones estando en la cárcel, decidió cambiar su habitación con los gemelos AJ y JJ, quienes eran los únicos de los cinco, además de él, que tenían una celda especial.
-AJ, duerme a gun mientras le digo a tu hermano que es lo que harán ahora - neo salió junto a JJ y AJ sacó un frasco junto a un pequeño trozo de tela blanca de entre su ropa, puso un poco de aquel desconocido liquido en la tela, dejó caer el frasco y con una sonrisa se acercó a gun, quien en el momento en que vió a neo irse, se había pegado a la pared como si quisiera hundirse en ella, su mirada era retadora pero dentro de él se preguntaba cuanto tiempo tendría que estar a merced de aquellos sujetos hasta que off y todos los demás se dieran cuenta de los planes de Neo.
-No hagas que me enoje y no te resistas - gun miró aquellos ojos que le recorrían el cuerpo entero, AJ se acercó y claramente gun no se dejó tocar por aquella tela que despedía un olor extraño, sin embargo, después de varios minutos y con AJ sobre él dejando caer todo su peso para poder inmovilizarlo, gun sintió la presión de la mano del mayor sobre su boca y su nariz para tapar sus únicos orificios respiratorios con aquella tela y así, dejarlo inconsciente.
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Cárcel de Amor •Off-Gun•
Fiksi PenggemarSu vida era monótona, todos los días era lo mismo, él tenía una rutina que se repetía día a día y en conclusión: Su vida era aburrida. Hasta el día en que él llegó... -¡Vamos mocoso, esta es tu nueva casa!- -¡Suéltenme! ¡No pueden encerrarme aquí! ¡...