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𝚋𝚎𝚜𝚝 𝚏𝚛𝚒𝚎𝚗𝚍𝚜

Tomé la camioneta de mi papá y comencé mi trayecto hasta la casa de Taehyun.

Ni siquiera me había molestado en escoger una buena ropa, sólo tomé una ducha y me lavé los dientes. Eso ya era mucho para un puto depresivo como yo, me puse un suéter negro y unos pantalones del mismo color que encontré tirados en una esquina de mi habitación, que, por cierto, estaba del asco.

Mientras conducía me iba fumando un cigarrillo que quizá el décimo de ese día y el treintavo de esos tres días que llevaba hundido en un puto círculo depresivo. Tenía un hambre horrible que había tratado de saciar fumando y tomando un puto vaso de agua al día, una rutina demasiado mala pero no es que me pusiera a pensar muy a fondo sobre las cosas que me hacían mal, podía hacer una lista pero no las cambiaría, así que no serviría de nada.

¿Cómo se llamaría la lista?

¿"Cosas malas para mí que he hecho o hago"?

La primera sería fumar, después beber, no dormir casi nada, pasármela postrado en mi cama, arrojar y romper cosas sin ninguna razón podría ser otra, haber tenido sexo sin protección igual es una, es decir pude haber terminado embarazando a alguien y arruinar mi vida y la de esa persona, pero gracias a que Dios me ama no pasó nada.

Cuando llegué a la casa de Taehyun, estacioné la camioneta y antes de salir saqué las llaves y me miré en el retrovisor, me veía fatal y mi condición física parecía ir en decadencia. Afuera de la casa había varias personas y la música se escuchaba claramente, suspiré y me encaminé hasta la puerta.
Antes de entrar tiré mi cigarrillo y me acomodé el pelo.

Adentro la música se escuchaba aún más fuerte y había luces de colores dándole una vibra fiestera al lugar. Caminé entre la gente mientras buscaba a Taehyun con la mirada, recibí varios empujones y miradas entre disgustadas y coquetas que terminaba ignorando. No estaba ahí para buscar problemas, estaba ahí para resolver los.

Cuando salí de esa bola de gente pude respirar con normalidad, mi mirada se posó en una cabellera plateada que se me hizo familiar.

Por mi mente paso una idea que la descarte al instante, ni de broma podía ser quien yo estaba pensando, él nunca se vestiría así.

No, era imposible.

Me acerque más a esa persona que se veía bastante relajada bebiendo quién sabe qué cosa. Cuando estuve lo suficientemente cerca, mi idea dejó de ser estúpida a ser la más lógica.

— ¿Tae? — lo llame y el chico se dió la vuelta, rompiendo cualquier tipo de argumento encontra de mi hipótesis.

No era broma cuando decía que nunca me imaginé a Taehyun usando maquillaje y encima vistiendo un croptop blanco de cuello alto y sin mangas, con una camisa verde a cuadros, que se deslizaba parcialmente por sus hombros dejando ver su piel, también tenía un pantalón grisáceo que le llegaba a la cadera y dejaba ver parte de su abdomen.
Salí de mi mundo de incredulidad cuando sentí un ligero golpe en mi mejilla.

— Hey, mis ojos están arriba, imbécil. — me dijo Taehyun. Yo parpadeé varias veces y luego ladié la cabeza mientras fruncia el ceño.

— ¿Qué te...? ¿Fue Huening?

— Algo así, él me ayudó.

— ¿Cómo? ¿Él no fue el de la idea? — Tae negó mientras le daba un sorbo a su bebida.

— ¿Me veo bien?

— Demasiado bien diría yo — él me dio una de sus sonrisas arrogantes.

— ¿Verdad? Creí que sería peor pero no. Por cierto, Beomgyu creo que está en el segundo piso — me dijo justo cuando planeaba preguntarle eso, yo asentí y no supe cómo despedirme sólo me quedé ahí unos segundos y Tae me miró extrañado — ¿Qué haces aquí? Ve a verlo, corre — me dijo haciéndome un ademán con su mano.

Ékstasi | yeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora