─ mimos con sabor a chocolate ᡣ𐭩

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El día de hoy era un día lluvioso, de esos en los cuales te quedas en casa, arropado en tus cobijas mientras tomas una taza de chocolate caliente con galletas y miras una película.

Eso era justo lo que hacia el pequeño omega, el cual puchereaba triste debido a que su alfa no estaba en casa por su trabajo en la empresa.

Necesitaba el calor que los brazos de su alfa le brindaban, aparte que también estaba muy preocupado ya que hacía un frío terrible, aunque su novio seguramente tiene la calefacción de su oficina prendida, eso no evita que el omega se preocupe por él.

Escuchó el sonido de una notificación en su teléfono, pero no cualquiera, ya que tiene personalizado el sonido para cuando MingHao le mande mensaje o lo llame. Rápidamente tomó su celular y lo desbloqueó, para ver lo que su alfa le ha mandado.

Minggie 🙊💕

Bebé, ya voy camino
a casa ♡

5:19 p.m.

Minggie¡!

Ya lo extrañaba mucho
hyung :( Te prepararé
chocolatito caliente para
cuando llegues, alfa💖

5:21 p.m.

Minggie 🙊💖

Gracias mi amor,
te veo ahorita bonito 💓

5:22 p.m.

SoonYoung dio un saltito de emocionado en su cama y se quitó las miles de cobijas que lo envolvían, arrepintiéndose al momento en que su piel se erizó por el cambio de clima tan repentino.

Sin más, bajó a la primera planta en dirección a la cocina, puso un poco de música en el estéreo, para luego preparar un chocolate caliente para su alfa y para él mientras bailaba y soltaba pequeñas risitas.

MingHao estaba entrando a su casa mientras colocaba su abrigo en el perchero y se quitaba sus zapatos.

Escuchó el ruido de la música y también la hermosa risa de su bebé que provenía de la cocina, así que sin más comenzó a caminar a la cocina mientras en el transcurso se desajustaba su corbata.

Cuando llego a la puerta de la cocina vio como su niño estaba dándole la espalda mientras hacía unos pasos de baile, sonrió por eso y se acerco a él, abrazándolo por la cintura desde atrás y agachándose para colocar su cabeza en el espacio de su cuello y hombro para olfatear el rico aroma de su omega, provocando que este diera un pequeño saltito del susto. 

—¡Me espantaste! ¡Minggie malo! — dijo SoonYoung, tratando de sonar enojado con su alfa por el susto que este le dio.

—Lo siento,bebé— se disculpó—, ¿qué hacias, cielo? — le preguntó en un susurro cerca de su oído.

—Y-yo estaba preparando el chocolatito caliente y como tenía frío me puse a b-bailar para que me diera calor— respondió, tapando su carita con sus manitas a causa de la repentina ola de timidez que lo invadió.

—Bailas excelente cariño, serás un gran bailarín— lo halagó, para después plantar un besito en la regordeta mejilla de su omega, SoonYoung sonrió tiernamente.

—Alfa, vamos arriba, quiero que me abraces y me des muchos besitos por que te extrañé mucho, también para tomar el chocolatito que preparé— dijo, girándose para estar cara a cara con el alfa, a pesar de que este le ganaba por muchísima diferencia de altura.

El alfa después de asentir ayudó a su omega en lo que faltaba, preparando el chocolate y tomando unas galletas de chispas de chocolate que tenían en su despensa.

Subieron a su habitación y mientras el alfa se cambiaba el traje de oficina a una ropa más cómoda y abrigadora; el omega se encargó de poner otra película, acomodar las cosas y luego acostarse para poder taparse con las mantas.

Cuando MingHao estuvo listo, se pasaron la tarde viendo la película que SoonYoung escogió, tomaron su chocolate y por supuesto también comieron sus galletas.

Ahora SoonYoung se encontraba con su cabecita en el pecho de su alfa escuchando los tranquilos latidos de su corazón.

Alzó un poco su carita para ver a su alfa y le dijo lo siguiente con un pucherito en sus labios. —Cariñitos— pidió mirándole con ojitos brillosos.

El alfa no se hizo de rogar y rápidamente recostó a SoonYoung en la cama y comenzó a llenarle su carita de pequeños besitos y acariciar su tierna pancita, sacándole risitas a su bebé.

Dejó un beso en su naricita y después paso a sus labios para fundirse en un lento y cálido beso, sintiendo ambos rápidamente el sabor a chocolate en sus bocas.

Pasaron un rato así, dándose mimos, demostrándose cuanto se amaban.

Sin duda, SoonYoung disfrutó de sus mimitos con sabor a chocolate.

𝗜𝗻𝗼𝗰𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗕𝗲𝗯𝗲  ୨୧  𝖧𝖺𝗈𝖲𝗈𝗈𝗇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora