CAPÍTULO 6 "ARREPENTIMIENTOS"

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La tire en la arena y no reaccionaba.

-Señorita. -La sacudí despacio. -¡Ari!.

Acerque mi oreja a su pecho y no respiraba. Comencé a hacerle la maniobra de Heimlich.

-¡Reaccione!. -Grité desesperado.

No lo podía creer, mi primer día y mi jefa estaba al borde de la muerte.
Al ver que no reaccionaba, la miré y no muy convencido le acomode la cabeza y me acerqué para darle respiración de boca a boca.
Apenas me acerque y le di respiración, entonces sentí como con sus manos me agarro de la nuca con fuerza, y con ayuda de sus piernas hizo un movimiento en el que quedó encima de mí.
La lancé a un lado y me senté en la arena, entonces ella comenzó a reírse.

-¿Es un chiste?. -La mire enfurecido.

-Debiste ver tu cara. -Dijo entre risas. -Te dije que entrarias.

-No lo puedo creer. -Tape mi rostro con ambas manos.

Me levante y junte mis cosas de la arena y fui al auto.

-¡Vamos Nick, no puedes ser tan amargado para no divertirte un poco!. -Exclamó.

(...)
Íbamos camino a casa y yo estaba molesto. No le dirigí la palabra a Ari, pues realmente me asuste por lo que pasó.
Entonces, recordé que no acabe la llamada con Josh, así que saque mi celular rápido y lo llamé.

Llamada telefónica
-Hola.

-Hola, señor Parker. Perdón, pero es que perdí un poco la señal y apenas logré comunicarme con usted.

-No hay problema Nick. Solo quería sabes como iba todo con Ari.

-Todo va bien, de hecho nos llevamos bien, por el momento.

-Perfecto, entonces nos vemos en la noche.

-Hasta la noche.
Fin de la llamada telefónica

Narra Ari
El camino de regreso a casa fue aburrido, pues Nick no me dirigió la palabra para nada.
Llamó a Josh y por un momento pensé que me delataria con él, pero no, de hecho al oír que mintió me sorprendí y me acerque un poco.
Esperé a que terminará la llamada, intente hablarle, pero no supe que decirle, estaba apenada con él.

-¿Por qué le mentiste a Josh?.

Me miró por el retrovisor y suspiró.

-No tengo porque delatarte con él, además... No creo que me crea, sabrás mentirle para ponerlo en mi contra.

-Tampoco lo digas así. Me haces ver como la mala y como si te odiara.

-¿Y no es así?. -Frunció el ceño.

Lo miré apenada y solo me recargue en mi asiento.

-Yo no estoy aquí por gusto. Necesito el dinero, no tengo nada ni a nadie. Solo este traje y unas cuantas prendas más de ropa. Mi hermana esta en Chicago, así que aquí estoy por mi cuenta... Mientras que tú tienes todo lo que Josh te da a manos llenas... No sabes cuanto he batallado para poder conseguir un empleo, y ahora que lo tengo no dejaré que me lo quites.

Bajé la mirada y analice lo que dijo.

-Si no quieres hablarme, no lo hagas. Solo déjame hacer mi trabajo... Sé que mis necesidades no son tú problema, pero solo te pido que no me arruines esto. -Añadió con la voz un poco cortada.

El resto del camino a casa fue un silencio incomodo, y me sentía mal por lo que había hecho. Sabía que le había causado un gran susto y que probablemente eso fue lo que lo hizo molestarse conmigo.
Yo sabía lo que era trabajar duro, por tener unos cuantos centavos, aunque sea para comer, comprendía su situación a la perfección, pues antes de Josh yo tenía una vida muy diferente a la que tengo ahora.
Debía disculparme con Nick, sabía que debía hacerlo, pero no sabía cómo hacerlo.

(...)
Llegamos a casa y Nick me abrió la puerta del auto, me ayudó a bajar y no me miró a la cara. Me sorprendía que apesar de eso el seguía siendo un caballero.
Me cedió el paso y entramos a casa.

-Si quiere salir o necesita algo más me llama, estaré en la cocina con Edna. -Dijo mientras iba a la cocina.

Subí a mi cuarto y lance mi bolsa a mi cama, para después lanzarme y recostarme.

Narra Nick
Entré a la cocina y Edna estaba probando la cena.

-Hola. -Sonrió. -¿Cómo les fue?.

-Pues digamos que excelente. -Dije sarcástico.

Me senté y tomé una manzana para comerla.

-¿En serio?. -Frunció el ceño.

-La señorita Sullivan fingió ahogarse, para que entrará al agua, y le tuve que hacer primero auxilios... Para después reírse en mi cara.

Edna negó con la cabeza y se acercó a mí.

PROTEGEME (LIBRO 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora