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Extra:
Habian pasado algunos dias desde el festival, lo que significaba que se aproximaba el cumpleaños de Dizzy, o mejor conocida como Diana.
Nunca entendí porque Alexa le puso ese apodo tan absurdo, pero a ella parecia agradarle de más, por ende los chicos y yo no dudamos en "consentir" de esa manera a nuestra integrante más pequeña.
Pensar que cuando conoci a Diana tenia ocho y yo diez, esa fue la primera vez que la vi, habia entrado a un salon para estudiar mi partitura, ella entro minutos despues cuando ya estaba practicando.
Me miro fascinada, mientras se acercaba con algo de temor a ser rechazada.- Como siempre.- Diana tenia miedo al rechazo y eso era evidente, pero quien podria rechazarla siendo ella tan carismatica.
Cuando se acerco a mi hace años, me pregunto si podia quedarse a oir, le ofreci un espacio en mi banqueta y se sento admirando como movia mis dedos por el piano de cola.
Cuando termine la pieza ella se levanto, me agradecio por dejarla escuchar y se marcho, luego no la vi mas hasta que Alexa la trajo con nosotros, Diana siempre ha tenido carisma, es una persona que siente mucho, quiere a lo grande y eso es una ventaja pero a la ves una desventaja.
Aun siendo grande, a Diana le sobre carisma, incluso cuando no esta de humor, antes solia pensar que era linda y conforme fue creciendo lo confirme, ahora, ese dia en que la vi en la oficina de aquella institucion de idiomas no logre reconocerla.
Pero cuando ella lo hizo por mi, me senti especial, habia confirmado que el tiempo y la pubertad hicieron su lavor con ella, sin embargo, siempre ha tenido algo que no ha podido evitar.
Sus expresiones.
Pese a que no es buena expresandose con palabras su cara lo dice todo, por ende, supe desde la primera semana que algo no iba bien con ella.
Cuando la invite a por el cafe, que termino siendo una cena la senti algo incomoda, sin embargo no me atreví a preguntar, pero cuando empezamos a hablar y el ambiente tenso se disipo lo supe.
Diana siempre ha sido muy conversadora, todo lo contrario a mi, por ende me negaba rotundamente a hablar a la hora de la comida, y creo que alli estuvo mi error.
Pensar que cuando la conocí, era una niña y ahora estaba apunto de cumplir los diecinueve.
Cabe destacar que ella y yo nunca fuimos cercanos, no tanto como ella lo era con Alexa, ambas vagaban por los pasillos del conservatorio parloteando, podian pasar horas haciendolo, por ende cuando Diana se fue, Alexa cambio, casi no hablaba y dejo el Violinchelo.
Solia gustarme como me miraba mientras tocaba, me hacia sentir como si ella fuera mi publico, cuando se fue no hubo nadie mas quien me mirara, viendo al pasado, reconozco que me enamore de ella, y ahora que la habia vuelto a ver no iba a perder mi oportunidad como lo hice en nuestros años de adolecencia.
