Herida sin cura

arco 2- capitulo 14

HA....

HA... HA...

Gotas de sudor iban recorriendo lentamente por su frente, la gota de sudor se deslizo por su mejilla roja y esta luego se encontró con su barbilla. Su mirada que estaba en hacia el suelo se levando de nuevo y lo miro.

Era una mirada dulce y encantadora. Veía al chico de ojos de color bronce con una mirada que podía derretir a la mayoría de los hombres.

Su respiración se agitaba y sus ojos resplandecían levemente.

Estos parecía brillar como si estuvieran dando una luz purpura sobre ellos.

Lentamente su lengua danzo levemente por sus labios. Se mordió levemente el labio inferior y con mejillas rojas y una mirada seductora camino lentamente hacia él.

Lo sabía instintivamente. él era su presa.

Ese pensamiento inundaba su mente cuando se encontraba en ese estado.

Era su oportunidad, los dos era los únicos en el parque a altas horas de la noche.

La brisa serena no calmo su piel caliente, y su temperatura iba aumentando más mientras se acercaba a la persona que tenía enfrente.

Los ojos de el eran los mismo desde el comienzo. No podía ver ninguna abertura o alguna inquietud cunado sus miradas chocaron.

Su cabello suelto parecía mecerse con la brisa. Cuando llego solo a pocos centímetros de él. No pudo evitar sentirse algo amargada y enojada porque no sacaba ninguna reacción del chico.

Levanto levemente su mano, para poder tocar su hombro y acariciar su brazo lentamente, pero.

*puk*

-Ahh!!

Su expresión cambio completamente y lágrimas salían por las esquinas den sus ojos mientras ella caía sentada y se tocaba la frente con dolor.

Levanto la vista y con una mirada de protesta. vio al chico con su brazo extendido que le acababa de dar un golpe en la frente.

-Shirou! ¿¡Porque lo hiciste!?

Haa....

Solo pudo suspirar mientras se masajeaba el área entre sus ojos.

-Aika..., por quinta vez, con excepción a tocarme, todo lo demás está permitido. Esta la quinta vez que te lo digo y siempre lo olvidas.

Recalco de nuevo al ver que ella no dejaba sus intentos de alcanzarlo.

Aika se sorprendió por lo que le dijo y una expresión avergonzada floreció en su cara.

-e-enserio?, ¿o-otra vez?, lo siento, es mi culpa.

Shirou la miro.

Ella estaba con su ropa empapada de sudor.

Si bien no habían hecho alguna actividad física que lo ameritaba. El uso constante de su sacred gear la hacía cansarse rápidamente, junto con algunos otros cambios.....

-no te preocupes, soy en parte responsable por lo que te sucedió, y esto es parte del entrenamiento. Solo me preocupa tu cambio de comportamiento al usar de manera excesiva tu sacred gear.

-l-lo hare mejor, gracias.

Aika desvió su mirada recordando los intentos de acercarse y pensamientos que tenía cunado entraba en ese estado.

Ya era casi media noche. era una pequeño centro lleno de césped de varios metros de diámetro, Estaban en una parte de un bosque, al lado del parque donde se encontró por primera vez a Tsuchida.