Vamo' a portarnos mal

29. Bokuto

¿Será que la suerte sólo se tiene una vez en la perra vida? Bandamax, yo ocupo ver esos ojitos azules y pispiretos de nuevo.

Arg, pinche morro bonito me trae cacheteando las calles y banquetas y se hace del rogar o bueno no, porque si quiera lo he visto. Me da muchísimo coraje y perra envidia porque el puñetas del Oxígeno ya anda en buenos términos con su güerito y todo el día anda en las nubes y no sólo eso... hasta el perro de Hinata le sacó el número al amigo de Sugawara.

¿Qué como enteré? Ps ese fue el chisme que nos contó la vez pasada. Taba re emocionado ese wey, hasta los ojitos le brillaban y todos quedamos impactados por sus grandes habilidades para ligar y no conseguir una orden de alejamiento en el proceso. El pedo comenzó cuando nos dio la descripción del vato fresilla y casi se arma un desvergue porque weee, imagina que estás tranquilo chupando, disfrutando de este dato y te dicen que el chico es pelinegro con los ojos azules más hermosos que nadie podría haber visto.

Ps me desconoci, gente. Yo lo vi primero alachingada.

Que se vaya a la verga el Hidrógeno. Ese hombre es mío.

Ps ya total, estuvieron a punto de armarse los putazos para defender mi honor y territorio hasta que el bastardo dijo ya todo encogido y con los huevos en la garganta que se llamaba Kageyama Tobio.

Por ahí hubiera empezado... ya me había espantado, porque yo pensé que era mi varón Akaashi y están de acuerdo que no puedo dejar que me coman el mandado ¿Verdad?

Total, ps ya se me bajó la rabia y le di una chela al Hinata para que se le pasara el susto, después lo felicite y le dije que se equivocaba, que para ojitos bonitos los de Keiji, hecho que se le hizo un chiste al cabron de Kuroo y Oikawa, pues entre los dos se empezaron a reír como si hubiera dicho lo más gracioso del condado. Según ellos me dijeron que nomas les daba gracia como estaba yo tan enculado, pero ps el amor nos vuelve tontos según mi compa Pancho Barraza y yo le creo fielmente, más que nada porque con sus rolas me he puesto una señoras pedas muy dignas de recordar. Pero eso es harina de otro costal.

—¿Qué onda Don Pepe?— le digo al señor de los helados aquí en el parquesito, porque jijuesu, hace un calor bien macizo y ps ya necesito algo para quitarme el bochorno.

—Ps aquí andamos mijo— me contesta —¿Va a querer un helado— me pregunta y yo suelto un chiflido en forma de afirmación.

—Tendré reumas, Don pepe— suelto y enseguida el don saca su cuchara para servirme en un conito mi helado de chocolate.

—Aquí tienes— lo tomo y empiezo a buscar entre mis bolsas mi cartera, pero no la encuentro.

Ora que pedo.

Me meto la mano en la bolsa trasera y encuentro un agujero en el mismo

Hijo de su perra suerte.

Me navejearon y ni senti. Fui víctima de la delincuencia.

Puta inseguridad de mierda y putos rateros de mierda.

Seguro fue en el metro...

—Eh...— me quedo mirando al señor de los helados y sonrió nerviosamente —Creo que me bolsearon, Don Pepe— me llevo la mano al cuello —¿Cree que se lo pueda pasar maña...

—¿Me puede dar un helado de fresa y pagar el del joven por favor?— alguien me interrumpe y me saco de pedo.

Nononono. No quiero que me miren como un hambriado

—No, hace falta y...yo— pero mis palabras quedan a medias cuando veo que es el otro de ojitos más bonitos de todo el mundo. Siento mis mejillas arder y ahora más que nunca puedo permitir que pague por mi —Kaashi...— murmuro y niego con la cabeza —No es necesario. En serio, Don Pepe sabe que soy buen pagador ¿verdad?—

—Por supuesto mijo. Nunca nos has quedado mal— afirma mientras sirve el otro cono de helado

—Por favor, permiteme pagar — vuelve a pedir con amabilidad que alchile no puedo creer como una persona tan recta y elegante, hermosa y perfecta este hablando con un pendejo como yo.

Es que ustedes no lo entienden. Akaashi es tan bello que no parece de este mundo, es... tan sublime.

¿Qué que es sublime? No tengo ni perra idea, pero cada que Kuroo anda extasiado dice eso, así que yo creo que es algo bueno y de difícil compresión.

—N...no...— trato de decir chiveado. Pero es que la neta mi cerebro se volvió estúpido y ya no sé cómo decirle que no.

—Por favor y cambio pediré tu compañía durante la tarde— ofreció y me quedo atónito

¿El acaba de pedirme que me quedé con él? Nambre, soy capaz de quedarme toda la vida si quiere.

Ladea su cabeza y me sonríe dulcemente y siento que eso acaba conmigo porque es la expresión más linda que he visto en toda mi alcohólica y bastarda vida.

Asiento con timidez y paga los helados.

—Vamos...

No sé a donde me lleva, pero este momento es muy valioso para mi que no quiero que la tarde acabe.