PRINCESA ATRAPADA

CAPITULO SEIS

CAPITULO SEIS

USAGI

Me tiemblan las manos en el momento en el que tomo el sobre de las manos de Endymion-sama.

Puedo escuchar el latir de mi corazón en mis oídos, esta latiendo tan rápido que siento que se me va a salir del pecho.

Abriendo con lentitud el sobre, saco la gruesa hoja, lo sellos y las elegantes letras son lo primero que veo y estoy llena de sorpresa.

Pero lo que más me llena de asombro es mi nombre.

Usagi Schilder.

Desde un inicio yo no tenía nombre ni apellido. Y ser nombrada como Usagi por Endymion-sama ya era lo suficiente para mí. Ver el apellido real plasmado en papel a un lado de mi nombre es sorprendente.

Con esos pensamientos en la mente hice una reverencia con la cabeza gacha mirando al suelo y las manos estiradas mostrando con orgullo el documento ante la mayor persona que tiene todo mi respeto y adoración.

-O-sama, me he graduado, ha sido gracias a usted que he podido vivir una vida llena de felicidad, estoy realmente agradecida con usted mi rey, este logro es de usted.

Porque lo es, sin él sin su apoyo no sé donde estaría yo. Tal vez estaría muerta en un callejón, en el mismo callejón de donde me encontró.

-Usa, ponte de pie-lo escucho decir.

Pero yo no levanto la mirada.

-No, como su fiel sirviente es mi deber agradecerle.

Ese es mi debe, demostrarle mi gratitud, me dio un nombre, un apellido, una familia.

-Que te pongas de pie –él toma mi mano con fuerza, no hago muecas y mucho menos me quejo -Maldita sea, ningún miembro de la familia real debe de arrodillarse frente a nadie.

-No soy un miembro de la familia real, mi rey, solo soy una humilde chica a sus servicios.

-¿Qué acabas de decir?

-Discúlpeme, no quise insultar a la familia real, O-sama –me disculpo inmediatamente.

Mis intenciones no eran ofenderlo, lo que yo quería era simplemente poder demostrarle mi gratitud, pero por la forma en que estaba respondido no lo estaba logrando. En vez de demostrar gratitud era como si mis palabras lo hirieran.

-No estás insultando a la maldita familia real, al carajo con ellos, estas insultándome a mí.

Endymion-sama me toma de la barbilla y sus ojos chocan directamente con los míos. Estoy tan sorprendida por la intensidad de su mirada.

-Pensaba esperar más hasta que te dieras cuenta, pero veo que no hay remedio. No puedo controlarme más Usa, te are entender que tu lugar está a mi lado.

-¿Cómo?

No puedo expresar mi pregunta con más fuerza porque de un solo golpe él manda mi certificado volando de un manotazo, descartando todo. La intensidad en su mirada se intensifica y es como si estuviera mirando a los ojos a una persona que no reconozco, ¿Quién es este hombre?

Sus manos me toman el rostro y con sus pulgares acaricia mis mejillas con delicadeza, sus actos me hacen emocionar, vibrar, mi cuerpo entero toma vida con sus caricias y la intensidad de su mirada. Me falta el aire y siento los labios resecos, quiero hablar y decir algo pero las palabras no salen de mi boca, solo puedo abrir la boca en un intento de que salgan las palabras pero no lo consigo. De un momento a otro los labios de Endymion-sama están sobre los míos.