HOGWARTS: EPÍLOGO, parte 1
Han pasado 20 años...Casa de los Granger-Weasley, Escocia
—Ohhh... oh, nena, eso estuvo espectacular —gimió Ron Weasley, cayendo de espaldas en la cama después de que su esposa terminó de montarlo, hasta que todo su semen terminó al fondo de su coño—. Vaya... puedo descansar bien esta noche, me dejaste seco.
—Me alegro mucho, cari —dijo Hermione, con su habitual radiante sonrisa, saboreando los restos de semen que resbalaban por sus muslos mientras se dirigía al armario para cambiarse de ropa y dirigirse a su próximo destino.
—Oh, vamos, ¿ya te vas? —protestó Ron, pero casi divertido, acostumbrado a las andadas de su esposa, acomodándose en la cama para tomar una siesta.
—Ya sabes cómo son las cosas, cariño. Harry convocó a sus putitas, y por eso debo ir. Además, quiero felicitarlo por su nombramiento como Cabeza del Departamento de Seguridad Mágica.
—Tú eres la Ministra de Magia, ¡tú lo nombraste en ese puesto!
—Sí, bueno, pero no lo he felicitado como él se merece. Descansa, cari, y dale mis saludos a George en la tienda. Si necesitas "acción", recuerda que nuestra hija está en su habitación.
Hermione se despidió de su marido con un beso, se dirigió al lavabo para arreglarse después de la apasionada sesión sexual con el lujurioso Ron, y cuando estuvo lista, se dirigió a las habitaciones de sus hijos. Hermione había aprendido las tradiciones incestuosas de los Weasley, y se despidió como correspondía de ambos.
Hugo tenía una evidente erección bajo las sábanas, y aunque no quiso despertarlo, Hermione no pudo evitar darle una felación a su hijo para que durmiera tranquilo, como hacía casi todas las noches. Cuando el chico se corrió, en medio de ronquidos, en la boca de su madre, ella quedó contenta, tragó todo, y lo dejó dormir en paz, como el angelito que era.
Rose, la hija mayor de la pareja, no estaba durmiendo, pues había escuchado la maratónica encamada de sus padres, y ahora estaba masturbándose frenéticamente bajo las sábanas. Cuando su madre entró, no hizo intento alguno de ocultarse.
—Cariño, ¿necesitas ayuda de mamá?
—Sí mami, por favor —dijo la pequeña que había heredado la personalidad de Hermione y los rasgos físicos de Ron, abriéndose de piernas mientras su madre se recogía el cabello y se acomodaba frente al coño de su hija—. ¿Vas a ir donde la tía Ginny?
—Sí, cariño, voy a felicitar al tío Harry por su ascenso. Quedas a cargo de que tu padre no haga tonterías mientras no estoy —dijo Hermione mientras apoyaba la lengua en el clítoris de su hija y comenzaba a lamer—. Lick, lick, slurp.
—Mmmm, mmmmm... con felicitar quieres decir... ¿s-sexo? —Rose esperó hasta que Hermione asintió—. Mmmmm... mmmmmm, ¿y por qué no puedo ir yo donde la tía Ginny?
—Slurp, lick, lick, slurp, ya te dije que aún no tienes edad para esas cosas, aunque bien podrías bajar la erección de tu padre cuando despierte. Slurp, lick, sluuuurp, ahora relájate, que mamá hará que te sientas muy bien.
Casa de la Familia Black
Un fuerte gemido fue seguido por una rauda liberación de fluidos que fueron a parar a la boca del famoso Harry Potter, mientras su esposa convulsionaba por el orgasmo que el "Chico que Vivió" le dio. Ginny Potter-Weasley era una esposa más que satisfecha. Tomó el rostro de su marido, uno de los magos más famosos de todos los tiempos, y le plantó un beso de lengua profundo y salivoso, de esos que solo ella sabía dar.
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Harry Potter relatos
Ficción GeneralNinguna de las historias aquí son de mi autoría, si no les gusta pueden salir y ya. No hay necesidad de denunciar