Los chicos llegan en el auto de Diego, Amaya está en el asiento del copiloto y Dan en la parte de atras, tomo asiento junto a Dan y le doy un beso en la mejilla.
-¿Y, se puede saber hacia donde nos dirigimos?- pregunto por que sí, estoy subida en un auto y no tengo la menor idea de para dónde me llevan.
- ¡Iremos al parque de atracciones! - chilla ella encantada.- quien sabe si algunos de nosotros tiene suerte y encuentra a su mate.
-¿Por qué me quieres quitar a Dan, que daño te hice?- pregunto en broma.
-Tranquila Emm, conozco a unos cuantos que estarían encantados de que Dan encontrara a su mate, para poder hacerte compañía, te aseguro que no estarás sola, o hasta puedo prestarte a Diego- canturrea Amaya.
- Pues que sigan esperando- comenta Dan, tomándome por la cintura y acercándome a él. Posesividad activada.
- ¿Y cómo por qué habla de prestarme señorita, acaso soy de su propiedad?- dice Diego fingiendo indignación - y además por qué habla de mi como si no hubiera posibilidad de encontrar a mi mate.
-No te preocupes dieguito, mientras Dan esté disponible no corres
peligro.- le digo mientras revoloteo su pelo.
-¡Bendita mi suerte!- sigue Amaya la broma.
Y entre bromas y risas llegamos al parque de atracciones. Nos desmontamos y empezamos a recorrer el lugar.
-¿Qué hacemos primero? - Como si en verdad no supiera, conociéndola tiene toda la noche planeada.
-Yo quiero comer.- es lo primero que digo.
-Por dos- me sigue Dan, pues claro si es todo un goloso.
-Yo también.- continúa Diego.
-Pero yo quiero ir a los juegos cuanto antes - se queja amaya- bueno ustedes hagan lo que quieran pero Diego viene conmigo.- comenta agarrando al pobre Dieguito y arrastrándolo detrás de ella sin importarle sus quejas.
-Pobre, quizás yo también deba torturarte un poco. - le digo mientras me río.
- Ni lo pienses- dice pasando su brazo por mis hombros- ahora vamos a buscar algo de comer.
Nos detuvimos en un puesto de hot-dog , y pedimos cinco, tres para Dan y dos para mí, me apresuro en comerme los míos porque conociéndolo se acaba los suyos y luego los míos. Él se da cuenta de mi intensión y me atraganta una parte del suyo.
-Golosa, te atreves a ahogarte por no compartir. - dice riendo.
No puedo ni hablar, se me hace difícil hasta masticar, por lo que él se está riendo a carcajadas.
-Te pasas- digo mirándolo mal, después de haber podido tragar sin morir asfixiada.- mira una cabina de fotos, vamos.
-No es necesario, podemos tomarnos unas selfies.
- No es lo mismo, anda gigante.
Lo llevo a la cabina casi a rastras, hacemos la fila y entramos, fueron cinco fotos en total, las guardo en mi bolsillo y seguimos recorriendo el lugar.
-Vamos a ese puesto, te voy a ganar un unicornio todo rosa - dice burlándose, y yo le doy una mirada asesina.
- Pues si yo gano, yo te lo regalaré.
- ¿No puedes al menos fingir ser la chica toda enamorada que acepta el regalo de su “novio" con una sonrisa boba y toda soñadora?. Tienes Cero romanticismo. - dice negando con la cabeza.
-Me verás ser romántica cuando encuentre a mí mate.- digo con una sonrisa en el rostro.
-Lo esperaré con ansias - dice cien por ciento sarcástico.
Cuando uso esa expresión es un claro “nunca" porque ya tuve a mi mate y el me rechazó, por lo que ya no encontraré a otro mate.
-Vamos, el que pierde recibe el unicornio multicolor rosa, pero ¿qué recibe el que gana? - le doy la oportunidad de elegir.
-Todos los gastos de esta noche cubiertos por el perdedor, y un regalo de recordatorio. - al parecer tiene la esperanza de ganarme.
-Por mi está bien, porque te aseguro que voy a ganar. - acepto segura.
-Sí clarooo.
Luego de que llega nuestro turno, empezamos. El objetivo es clavar cinco dardos en el centro de un tablero que se encuentra a unos tres metros.
Acerté cinco de cinco.
-Aver como mejoras eso- me pavoneo a su alrededor.
-Mira y aprende.- no sé porque no me sorprende que el idiota anoto cinco de cinco también. Es obvio que esto no es un desafío para nosotros, pero ya que yo acerté todos lo tiros primero el debía perder, si él no quiere perder y yo no quiero perder esto se puede poner feo.
-Bien- está vez acerté diez de diez .
-Bien- ya acertó nueve de diez, cuando va a tirar el último uso un poco de magia y hago que el dardo de afuera del centro.
Salto de felicidad y celebro, mientras él me mira como si fuera a matarme, claro que se dió cuenta, pero no puede hacer un show donde hay tantos humanos, soy la mejor.
-Soy la mejor.- no puedo parar de reír, sobre todo por la cara de Dan -Ese unicornio rosa multicolor, digo
feliz - cuando el señor me lo pasa me pongo de puntillas y le doy un pico en los labios a Dan - toma “amor”, es todo tuyo.
Él todavía me mira con cara de “me las vas a pagar Emma Clark" yo solo le guiño, y lo saco de ahí.
-Quiero un algodón de azúcar, pero no quiero ir, mejor vas tú y yo te espero aquí.
-Sí mi señora, ¿me puedes cojer a corni mientras vuelvo? - dice refiriéndose al unicornio, y yo no aguanto y me parto de la risa.
- No cariño, ve a exhibir el regalo que a ganado tu novia para tí.
-Como quieras “cariño"- ese cariño sonó más falso que decir que amo el color rosa.
Me siento mientras lo veo hacer la fila. Veo como las chicas lo miran babeando y no es para menos Dan es muy guapo, su hermoso y llamativo cabello rojo natural, sus increíbles ojos azules cubiertos por sus largas pestañas, sus labios gruesos en un tono rojiso, es todo un Dios griego.
Mientras que estoy pérdida en mis pensamientos noto como una chica castaña se le acerca más de lo necesario, y no solo eso también lo está toqueteando, que descarada, conociendo a Dan debe estar de lo más incómodo, veo que trata de quitarsela de encima prudentemente pero la muy descarada no coopera. Estoy furiosa, lo que Dan y yo tenemos no es serio, pero yo amo a Dan, no diré como un hermano porque los hermanos definitivamente no tienen sexo, pero lo amo como a un amigo o algo así.
Sin esperar más me dirijo a donde están.
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Camelia_Red
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Por tu rechazo
Manusia Serigala«Lo que no te mata, te hace más fuerte» Lo aprendí de la peor manera, viviéndolo en carne propia, a base de mi propia experiencia .
