Capitulo tres: "Flores Favoritas"

2.6K 211 19
                                    

Alexis | Actualidad

Al inicio mi vida no era tan fácil como todos piensan. ¿Crecí en un hogar amoroso? si. Pero el peso de ser el hermano mayor lastimaba mis hombros con constancia.

Cuando inicie mi carrera seguí mi corazón pero también quise cumplir con mi papá. Por eso decidí ser abogado, un beneficio más al ser streamer.

Aún teniendo a muchas personas a mi alrededor no sabía exactamente que era amar a alguien más allá de la fraternidad, el cariño de padres o abuelos.

Cuándo conocí a Martina no le preste tanta atención, me gustaba gustarle a las personas y en mi estaba el ser atento con todos pero hasta ahí. También existía la parte en la que ella era la mejor amiga de MJ, la veía como mi segunda hermana así que nunca la vi como algo más. No hasta que llegamos a la universidad.

Martina no era una chica arrogante o desagradable a la vista, todo lo contrario; era la chica más graciosa que había conocido, una chica espontánea, linda, delgada, frágil y tenía unos ojos preciosos.

Ella fue mi principal apoyo cuando inicié mi carrera, fue la persona que más confió en mi, la que me dio todo y que a la vez recibió mi peor versión.

📍Guadalajara, Jalisco | Seis meses después | 4:53 p.m.

Alexis

Bajé del auto, necesitaba pasar un rato solo así que llegue a casa de mis abuelos. Una casa que hace ya algunos años estaba vacía, dejé mi mochila en los bancos de afuera, nunca entraba solamente me quedaba afuera para pensar un poco.

Saqué un malboro de la cajetilla que llevaba en mi sudadera y lo encendí, casi nunca fumaba pero hoy sentía la necesidad de hacerlo.

Estaba un poco cansado de toda la situación en la escuela con mi hermana, pero me encontraba más presionado por el peso que estaba recayendo en mis hombros. Seguir los pasos de papá si o si.

Hace algunos días el había hablado conmigo, me quería asegurar un puesto en el Instituto de Altos Estudios Jurídicos de Jalisco, su casa de estudios. Sin embargo, yo aspiraba a otra cosa. Con el trabajo de mamá me había dado cuenta que me encantaba estar frente a una cámara, poder entretener a las personas y mostrar una parte de mi que pocas veces sacaba a la luz, pero todo eso lo reprimía por los deseos de mi padre.

No me desagradaba ser abogado, pero no era mi sueño.

Mire un poco a mi alrededor, tenía una buena vida, omitiendo la parte en la que toda la escuela pensaba que mi familia era una red de narcos o algo así.

El cigarro se consumía poco a poco con cada calada que le daba.

Ser el hermano mayor no era fácil, todos los ojos están sobre ti, todos quieren que tú seas la muestra para los demás, que tu seas el ejemplo a seguir. Yo no quería ser un ejemplo a seguir.

Le di un último vistazo a la casa de mis abuelos, suspiré al verla tan Sola.

Tire la colilla de mi cigarro y la pisé. En paz descansen mis viejitos, me persigné.

Camine hacia el auto, entre y arranque, empecé a manejar hacia casa de nuevo.

El trayecto fue silencioso, no me sentía nada bien.

Llegue a mi hogar siendo recibido por los gritos de MJ y Rogelio.

—¡Pero me quitaste el mando Rogelio. Así no vale!—exclamo mi hermana.

—No mames MJ no que muy chingona, apoco no puedes mover tu carrito con telequinesis—dijo de forma burlona mi mejor amigo y yo reí. Estaban jugando Mario Kart.

Antes de perderte; Quackity Donde viven las historias. Descúbrelo ahora