Capitulo 15

13 2 2
                                    

Capítulo 15

Sarah, La Dama Ciega


Aquella batalla estaba a punto de llegar a su inevitable desenlace, pues Sarah, La Dama Ciega se encontraba en completa desventaja numérica y de fuerza bruta, su última aliada Chantez había decidido traicionarla y volver al bando con su hermana, y todos sus bandidos habían sido derrotados o huyeron.

El comandante Cullen se encontraba completamente agotado por la pelea, pero aún firme para luchar con lo que sea necesario; Ivalka seguía sedienta de sangre, nada es suficiente para ella; pero el Príncipe y Zack el mercenario estaban agotados de aguantar tanto castigo contra la Dama; por otro lado, las hermanas Chantez y Poet de nuevo juntas estaban listas para luchar, el combate es de seis contra una, pero Sarah no podía aceptar una derrota.


Suspirando y viendo que todo estaba completamente en su contra ella simplemente murmura –Bien, si así deben ser las cosas, que así sea. – sacando un extraño veneno que imbuye en sus cuchillas, dispuesta a dar todo por el todo. - ¡Ríndete, Dama! ¡Tendremos la piedad que tú no tuviste por nuestra gente! - le reclama Cullen al verla dispuesta a todo.

- ¿Piedad? No necesito nada como eso, algo tan banal como la piedad es cosa de los débiles. No volveré a ser prisionera de nadie, ni de los Grunders...ni mucho menos de los Druidas. - les recrimina ella todo el odio que les tiene, Cullen da un paso adelante y procede a finalizar la batalla usando su desplazamiento a la velocidad del relámpago que había usado previamente; pero el sonido del ataque le da la ventaja a la Dama, evadiendo este rápidamente y propinándole un corte en el brazo al Druida.


El Comandante se aleja y empieza a notar como su vista se empieza a nublar nuevamente, es el mismo tipo de veneno que había utilizado contra los tres, quedando ciego momentáneamente, pero lo suficiente como para acabar el combate.

Zack y el Principe Yang intentan llegar hasta ella, con este último estirando su mano y haciendo emerger una llamarada de fuego que dispara hacía ella, pero La Dama Ciega logra absorber el impacto ignifugo con su daga, con el joven observando como la llama empieza a ser consumida por el material del arma de su rival, está hecha con adamantina; mineral con dicho efecto, usualmente utilizado para las esposas de los reinos.

Su arma brilla en color azul al apagar el ataque del Príncipe, en ese momento logra desplazarse con rapidez hacía Yang con furia asesina, pero Zack se interpone en su camino, logrando absorber la mayoría del daño que iba hacía Yang, pero rasgando a ambos, empezando a quedarse ciegos nuevamente.

-Tres fuera. - murmura Sarah mientras posa su nula vista en las tres últimas chicas –Quedan ellas. -


Al decir esto, la Dama se abalanza hacía Poet, chocando sus espadas al instante -¡Pagarás por tu traición!- le dice con rabia, a lo que Poet le contesta –A ti no te puedo intentar salvar más, haré que pagues por todo lo que has hecho. -

La Dama logra evadir un ataque por parte del hacha de Ivalka, mientras que Poet dispara con sus flechas, siendo repelidas con facilidad, en ese momento Chantez se posa al frente de ambas, haciendo que bajen sus armas –Yo me encargaré. - le dice a su hermana.

- ¡¿Chantez?!- intenta decir Poet, pero ella su respuesta proviene como un silencio por parte de ella, está decidida a hacerlo, pues sabe cómo derrotarla, había estado entrenando junto a ella por años y sabía su estilo de combate.

Sarah, La Dama Ciega escucha una serie de ruidos metálicos cayendo al suelo, pero no entra en acción, sabe lo que está pasando. Del otro lado, Chantez se encontraba deshaciéndose de su mandoble y su armadura pesada, necesita ser ligera si quiere tener una oportunidad contra ella. Quitándose los vendajes manchados de sangre que cubren sus brazos y manos, Chantez irá completamente a puño limpio, observándose sus manos con heridas tanto recientes como antiguas cicatrices de guerra.

Saga de Keneor: Lazos de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora